Tienda De Muñecos

ENSAYO SOBRE LA TIENDA DE MUÑECOS DE JULIO GARMENDIA

El escritor, periodista y diplomático Julio Garmendia nació en El Tocuyo, estado Lara, el 9 de enero de 1898 y murió en Caracas el 8 de julio de 1977. Hijo de Rafael Garmendia Rodríguez y Celsa Murrieta, fue uno de los alumnos fundadores del colegio La Salle. Tras cursar el bachillerato, llegó a Caracas con su padre en 1915. A los 17 años, comenzó una intensa labor como periodista en el diario El Universal y en distintas revistas de su época, al tiempo que participó activamente en los círculos intelectuales de la ciudad. En 1909 publicó un pequeño ensayo en el diario El Eco Industrial. En 1914 cursó estudios en el Instituto de Comercio de Caracas, los cuales abandona poco tiempo después para trabajar como redactor en el diario El Universal. Se relacionó con integrantes de la llamada Generación del 28 y despuntó como el gran artífice de la vanguardia venezolana y representante de la vanguardia hispanoamericana.

En este sentido, el autor se desempeño como diplomático, trabajó en la Legación de Venezuela en París, luego fue cónsul general en Génova, en Copenhague y Noruega desde 1923 hasta 1940. Anterior a este viaje, escribió La Tienda de Muñecos (1927), el cual será el punto central en este ensayo, pues los juguetes fueron y aún siguen siendo el motivo de muchas alegrías de hecho, siempre se han constituido como un buen recuerdo de la niñez. De este modo, se trata de un cuento escrito en primera persona, pues el narrador es protagonista, los personales son: el abuelo, el padrino, el ahijado, Heriberto un ayudante en la tienda que es descrito como afeminado y despreciado por el propio padrino. Se trata, de un relato donde los familiares del narrador, específicamente su abuelo y padrino le enseñaron a su ahijado a tenerle muchísimo respeto a los muñecos de su tienda. Además, el padrino enseña al ahijado para que se haga cargo de la tienda, ya que el abuelo se muere.

Es de hacer notar, que la tienda de muñecos es un cuento que narra la historia de un viejo hombre que conserva una tienda de juguetes que heredó. Cabe destacar, que el tiempo que ha pasado con ella es largo, pero a pesar de todo, y del hecho de que lo que contiene son "sólo muñecos", el hombre insiste en mantener en el lugar una especie de régimen jerárquico como si los juguetes y toda la tienda fuera una especie de reino. Cabe mencionar, que el ahijado mucho más joven se encuentra viviendo en la tienda, y obviamente las reglas y el sistema del actual dueño no le parecen. Pues, cuando se lee la historia, se puede deducir y pensar que el padrino es un drástico y demasiado estricto con unos pobres muñecos. Ya que es de suponer que esas tiendas son lugares donde los juguetes son mostrados para ser vendidos, no obstante, en esta tienda en particular, el autor plasma en la obra que el dueño insiste en dejar los juguetes perfectamente ordenados de forma jerárquica, sin permitir que el muchacho quien está con deseos de jugar con ellos, los toque.

Dadas las condiciones que anteceden, el cuento pertenece al género fantástico, pues se evidencia en sus relatos hechos que no tiene nada que ver con la realidad. De hecho, es una obra, que nos puede alegrar el día dado a los toques de humor que el autor ha insertado en ella. Además, de ser una obra infantil, puede llevar al lector al pasado, permitiendo recordar momentos de niñez por el simple hecho de tratar sobre muñecos. Dentro de este orden de ideas, el cuento demuestra que es un autor distinto a otros al poner en práctica un término conocido como "ambigüedad", ya que hay ciertas situaciones que no son totalmente claras, y por tanto el lector no puede distinguir completamente si son ciertas o falsas, se observa claramente, cuando el autor menciona una tienda de muñecos, pero no detalla donde se encuentra ubicada, por lo que puede ser cualquiera y no podemos deducir su veracidad.

En atención a lo antes expuesto, se infiere que en el cuento la ironía está presente en algunos fragmentos como, en efecto, se confunde a los abogados con las pelotas de goma, que en realidad están sabemos que no se puede y esto se debe a que cuando Garmendia expresa sin problemas que los confunde, está

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