Tomando La Crisis En Serio - Jorge Suarez Velez

Tomando la Crisis en Serio - Jorge Suarez Velez

La crisis financiera que afectó a Europa en el año 2011 hizo que muchos países entraran en recesión y otros tantos incluso se declararan en quiebra. En los Estados unidos, uno de sus efectos secundarios fue la disminución en la popularidad del Presidente Barack Obama, y la rápida aceptación del gobernador de Texas Rick Perry como posible candidato de la oposición. Aunque al final, Obama volvió a ganar la contienda electoral.

En China, el panorama no fue menos desolador, pues la deuda interna del país aumentó a tal grado que pasó a representar un 200% del PIB, gracias, entre otras cosas al desperdicio de recursos en obras que muchos consideraron inútiles.

En México, los ánimos estaban por los suelos (se podría decir, en cierto sentido que aún lo están) entre otras cosas por la guerra contra el narcotráfico. Particularmente la atención se centraba al ataque al Casino Royale. Sin embargo, al parecer la intención del Cártel (al que se le atribuye la masacre) no era la de matar a las personas, sino de destruír el lugar, pero los arrestos de los líderes de éstas asociaciones delictivas han derivado en que las mismas queden a manos menos expertas que terminen por cometer tan grandes “errores” como éste. Así lo explica la empresa Stratfor. La principal falla de las naciones, está justamente en atacar los problemas en las consecuencias y no en la causa. En el caso de México, por ejemplo. Atacar a los cárteles con el fuego sirve, pero no es la solución. Sino investigar a los políticos involucrados con dichas actividades delictivas, hacer conciencia en los consumidores de droga acerca del costo que ésta tiene en vidas humanas, y más aún, en los consumidores norteamericanos, que son los que más dinero inyectan al narcotráfico. Las medidas que México necesita para acabar con éste problema van más allá del combate armado. Se necesitan reformas estructurales, creación de nuevos empleos y atacar al resto de las mafias organizadas, no solo a las vinculadas con el tráfico de dogas. El tiempo ha llegado de tomar medidas más elaboradas, más precisas y más efectivas. La crisis económica mundial va de mal en peor, y si ambos problemas llegaran a juntarse, la solución será aún más difícil.

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