Tomas Moro

Tomas Moro

En este capítulo Tomas Moro nos plantea la idea de un país perfecto, Utopía, donde todo se encuentra en perfecto equilibrio.

Utopía inicialmente estaba conectada a un continente, pero durante el gobierno de Utopo, este encargo que se cortara el país en forma de Luna creciente. Su perímetro parece trazado por un compás. Como resultado, Utopía terminó siendo rodeada por agua. Las altas montañas protegen contra los vientos, el mar es calmado como un lago, hay rocas visibles y ocultas alrededor de este, por consiguiente se puede decir que eran mecanismos de defensa naturales ya que formaban parte de la naturaleza.

Está formada por cincuenta y cuatro ciudades. Todas estas ciudades son homogéneas, ya que poseen la misma lengua, costumbre, organización y leyes. Además se señala que todas las ciudades están bien distribuidas, ninguna ciudad se encuentra aislada. Todos los años tres representantes de cada ciudad se reúnen en Amaurota para tratar temas relevantes sobre el país. Esta ciudad es determinada como la capital, ya que es el ombligo de Utopía.

Una familia agrícola está compuesta por cuarenta integrantes como mínimo y se le añaden dos esclavos. Por lo general la familia se dividía en dos partes, el primer grupo se dedicaba al campo y la otra mitad se iba a la ciudad, pero cada año rotaban del campo a la ciudad y de esta manera se evitaba que todos sean ignorantes o inútiles en materia de agricultura. Los campesinos se dedicaban a la tierra, crianza de animales, cortaban leña y transportaban sus productos por mar o tierra. Para la época en la que se encontraban, tenían una tecnología muy avanzada, criaban pollos y lo que hacían era quitarle los huevos a las gallinas y ellos mismos idearon un sistema de calefacción para poder incubarlos, además eran conscientes que no poseían demasiados caballos, por ellos solo los utilizaban para el ejército; es por ello que utilizaban los bueyes para transportar sus productos, al mismo tiempo descubrieron que ellos eran menos propensos a contraer alguna enfermedad como los caballos.

Cada grupo de treinta familias elige anualmente un magistrado, llamado Sifogrante, cada diez Sifograntes hay un Traniboro. El príncipe es un magistrado vitalicio, salvo que este recurra a la tiranía. Los Traniboros se reúnen en consejo con el príncipe para discutir sobre los negocios públicos.

Todos los utópicos poseen el mismo oficio, agricultores; pero ellos no solo se dedicaban a esto, sino también se podían dedicar a lo que ellos más les gustaran. Por ejemplo podían ser tejedores, artesanos o carpinteros, por lo general era heredados por el padre pero podían cambiar de labor y se adoptados por otra familia para poder laborar en lo que a ellos decidieran.

La función principal de los Sifograntes consistía en supervisar a los campesinos para que estos no se dedicaran al ocio o respetaran sus horas de trabajo, para evitar la fatiga se determinó un horario donde trabajaban tres horas, almorzaban, reposaban dos horas, regresaban a su trabajo por tres horas más y finalmente se podían dedicar a lo que quisieran hasta la hora de la cena, posterior a la cena tenían una hora de descanso y después tenían sus ocho horas de sueño.

La ciudad al estar formada por familias, constituidas por grupos unidos por vínculos de parentesco. Las mujeres se casaban a una edad determinada y vivían en casa de sus maridos, los hijos y nietos vivían quedaban con la familia bajo la tutela de los más ancianos. En cada familia el más anciano domina a la familia, la mujer sirve al marido y los más jóvenes sirven a sus mayores.

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