Bagdad Cafe

Bagdad Café es una película alemana de 1987 dirigida por Percy Adlon. Esta transcurre en un café y un motel al costado de la ruta en el Desierto de Mojave.

La película comienza con la llegada de Jazmín, una turista alemana, que tras tener una pelea con su marido, el único lugar que encuentra es el Bagdad Café, y quien lo maneja es una mujer negra llamada Brenda, que vive allí con su familia. La cafetería es visitada por varios personajes como Coxx, un artista de Hollywood, una tatuadora, el sheriff proveniente de las comunidades originarias de América, un viajero, camioneros, etc..con los que se irán formando distintas relaciones, en un principio con mucha desconfianza, ya que al haber diferencias culturales que se ven en las formas de vestir, de alimentarse (por ejemplo: el café americano aguado con el café alemán concentrado), en sus distintos hábitos y lenguajes, hacen que se dificulte la comunicación entre ellos pero que luego al ir conociéndose se irán transformando en una verdadera amistad.

Esta cafetería, es el espacio donde los personajes se expresan en un contexto determinado. A este lugar los personajes le dan un valor simbólico que va mutando a lo largo de la película, al cambiar las relaciones entre ellos. Este sería el espacio referencial que está delimitado por las acciones que se van desarrollando dentro del mismo. En el inicio es un lugar triste, aburrido, en donde no pasa mucho, y la gente lo transmite. Después de la llegada de Jazmín, se llena de magia y magia real también porque empiezan a hacer espectáculos que atraen a mucha gente que viaja, y se convierte en un espacio de entretenimiento y alegría.

Esto también ocurre porque empiezan a haber modificaciones en los vínculos entre los sujetos. Porque como ya dijimos al ir conociéndose se van dando uniones entre ellos. Jazmín llega a cada uno de los personajes, de diversas maneras, influye sobre ellos, hace que se genere una transformación en la energía de cada uno y del lugar. En estos lazos hay interpelaciones que se van dando como por ejemplo la de Jazmín con el hijo de Brenda, Salomon, que toca el piano y le encanta la música y ella se sienta a escucharlo y a compartir esta pasión con él, dándole lugar para que se exprese, lo mismo con Phyllis, la otra hija de Brenda, que le muestra su ropa y juegan con ella, y con el boomerang. Con Brenda, que se encuentra en una situación parecida al ambas haberse separado de sus maridos recientemente, que después de varias confrontaciones se irán aproximando. Con el empleado del café también, que empieza a hacerle el café como a ella le gusta.

Y Coxx, quien se enamora de su belleza natural y desea retratarla, el interpela sobre ella también ya que retrato tras retrato se irá liberando, desnudando su cuerpo y su alma, dejando salir su verdadero ser.

Cada uno de los habitantes y visitantes eventuales toman como referente educativo a Jasmin, que es

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