El concepto del poema sinfónico

Para hablar del poema sinfónico es necesario tener en cuenta la dimensión que tomó la música con Beethoven y las características del arte romántico. En la música, tradicionalmente se considera que Beethoven es el puente hacia el Romanticismo, él al igual que el poeta Lord Byron y el paisajista William Turner tiene una motivación que es crear a partir de sus propios sueños, ideales y deseos; la intimidad es una palabra que enmarca las obras artísticas de esta época.

El romanticismo es un movimiento artístico e intelectual europeo que se extiende desde el año 1800 hasta 1850; en la pintura, “La pesadilla” es una obra que anuncia una nueva época, esta creación se da entre 1790 y 1791 por el pintor suizo Henri Fuseli quien en su pintura refleja el melodrama, la fantasía y el horror. La mesura del clasismo empieza a ocultarse para darle paso a la libertad, expresar estados de ánimo, sentimientos muy intensos o místicos y eludir la claridad y la definición es el objetivo trazado por los artistas; la razón se hace a un lado por los sentimientos.

La sinfonía es un tipo de obra orquestal que con Beethoven llegó a niveles inimaginables, el tratamiento que Beethoven le dio a la forma sonata en sus obras para piano se traslado ella. La envergadura de obras como la Sinfonía nº 3 en mi bemol mayor, opus 55 o la Sinfonía nº 5 en do menor, opus 67 (1808), no tiene precedentes. En sus obras demostró que con su estilo, basado en una temática del todo nueva y en armonías opuestas que utilizaban notas contrarias, podía crear música dotada de una fuerza y expresividad muy importantes. Lo realizado por Beethoven dejó un fantasma que rondó cerca de cada compositor, es indudable que su trabajo los condicionó: de la cantidad de sinfonías que compusieron los clásicos Haydn y Mozart, la exigencia a la que se sometió Beethoven lo llevó a componer solamente nueve. De ahí en adelante no hubo compositores que lleguen a las cifras de los dos músicos clásicos.

En cuanto a la forma y al desarrollo de temas, los compositores posteriores, con la obra de Beethoven, adquirieron un mayor compromiso, sin embargo, con respecto había un elemento que Beethoven no exploró: la tímbrica o el color. Beethoven siguió utilizando orquestas similares a las que utilizaba Mozart, solamente hizo que un instrumento nuevo esté dentro de ellas; con la composición de su quinta sinfonía, el trombón incursionó en sus filas. El color de la orquesta sinfónica fue uno de los campos que tuvo preponderancia en la época del Romanticismo.

La poesía al igual que la pintura y el teatro hablaban de la naturaleza, de los sentimientos individuales, y los compositores vieron que en la música había muchas posibilidades para reflejarlos. Esto lleva a que los instrumentos necesiten nuevas técnicas para su ejecución, también a que se empleen nuevos instrumentos, además de maneras de manejar los motivos y lo temas, y en base a ello se creen las obras que hacen evidente la gran capacidad creativa del ser humano,

Hector Berlioz fue uno de los primeros defensores de este tipo de arte, el estilo que Berlioz cultivó es esencialmente dramático, su música es inseparable de su vida personal, por lo que nos encontramos ante un compositor claramente romántico. Con su gran obra “La Sinfonía Fantástica” causó una gran revolución al utilizar un programa literario, este se basó en las cartas que él le escribió a la actriz irlandesa Harriet Smithson con quien contrajo matrimonio. La historia dice que estos escritos contienen una pasión exagerada que hizo que dicha mujer se alejara de Berlioz. Smithson no quiso asistir al debut de la obra, pero dos años más tarde asistiría a una presentación dándose cuenta de que era una clara alegoría a las cartas que el compositor le había escrito. Esta sinfonía es un drama musical descriptivo que muestra la fascinación que sentía Berlioz por la literatura romántica. El movimiento subtitulado "Marcha al cadalso" describe al héroe de la sinfonía dirigiéndose hacia su ejecución. Berlioz tiene algunas semejanzas con Beethoven por el tratamiento de los sentimientos en la música instrumental y su uso de la orquesta con finalidad dramática. Su falta de formación pianística hizo de él un compositor cuya inspiración es de naturaleza melódica: utiliza la melodía como elemento de unidad y emplea también el timbre como para dotar de mayor firmeza estructural a la obra. La armonía es para él un recurso de énfasis pero no el núcleo

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