Elefante Blanco

Elefante Blanco

La Película Elefante Blanco intenta evidenciar a partir de sus personajes Julián y Nicolás curas villeros que misionan dentro de barrios marginales y Luciana una asistente social una realidad invisibilizada por las sociedades de hoy en día, una realidad que deja vislumbrar la devastación, la miseria, la drogadicción, el narcotráfico, la desolación, la falta de oportunidades y por supuesto la vulneración de derechos a que se ven expuestos miles de personas.

Sin lugar a dudas la realidad que demuestra la película, es una realidad a la que los trabajadores sociales se ven expuestos constantemente. El como enfrentar los problemas y conflictos que se vivencian en contextos como lo son los expuestos en la película ya sean villas, campamentos o sitios en los que se manifiesta la drogadicción, el narcotráfico, la delincuencia, entre muchas otras variables de conflicto, es por decir lo menos un tema a discutir, pero la pregunta es clara ¿qué hacer?

Apoyar, entregar herramientas, solidarizar, socio educar y muchas otras ideas se cruzan por la mente. ¿Pero cómo? En la actualidad, pese al avance de las políticas públicas, ese enfrentamiento es complejo, pero sin duda, una de las formas de cambio es comenzar una intervención temprana, tal como se muestra en la película, crear espacios recreación y aprendizaje para que los niños y niñas en situación de vulnerabilidad, logren descubrir sus capacidades y así vislumbrar nuevas oportunidades. Ahora bien, que ocurre con los que ya están inmersos en problemáticas como la drogadicción, la ayuda y el servicio que podeos brindar, de cierto modo se ve coartado, debido a que los sistemas de rehabilitación de drogas no dan abasto y en muchas ocasiones resultan ineficientes.

Tomando en consideración lo expuesto anteriormente, el accionar de la trabajadora social no es cuestionable, de hecho es exactamente lo contrario. Durante 5 años había brindado ayuda y herramientas a los vecinos para lograr de cierto modo la inclusión social, haciéndolos participar de programas de inserción, proporcionándoles educación y ayudando en la rehabilitación de niños con problemas de consumo.

Si bien su relación con las personas de la villa, se basaba en el respeto y la sentían como figura de autoridad, ésta era también muy cercana, de confianza y afecto, lo cual era necesario e indispensable para trabajar con ellos y lograr los resultados esperados. Debido principalmente a que las personas con vulnerabilidades, son reticentes a los cambios y a aceptar la opinión y la ayuda de terceros.

Y en cuanto a la exasperación que comenzó a sentir debido a la falta de compromiso tanto gubernamental como de la empresa constructora, que negaban los recursos y por consiguiente produjo el rechazo de los trabajadores a continuar trabajando sin la justa remuneración, esta se encuentra de cierta forma validada, debido a que el esfuerzo de largos años, se comienza a dinamizar, producto de las inequidades y del desgano de los propios vecinos por conseguir una vida más digna.

Para finalizar se puede señalar que la película logra generar un espacio de reflexión, sobre una temática muchas veces invisible para el mundo que demuestra una fría, cruda y cruel realidad, intentando que los observadores generen conciencia sobre el relato

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