John Williams y su trabajo en Harry Potter y la piedra filosofal

John Williams y su trabajo en Harry Potter y la piedra filosofal

Introducción

Hasta el día de hoy, John Williams ha sido uno de las figuras más icónicas y predominantes, cuando de composición de bandas sonoras para proyectos cinematográficos se habla. Ha compuesto las bandas sonoras de múltiples franquicias de cine. John Williams estudió piano y composición en la Universidad de California. Williams ha ganado el Óscar en cinco ocasiones y tiene en su haber 52 nominaciones, consagrándose como el segundo hombre con más nominaciones al máximo galardón del séptimo arte después de Walt Disney.

Ha trabajado con el célebre director Steven Spielberg desde 1974 y compuso la música de todas sus obras, a excepción de tres películas. En adición, ha realizado composiciones musicales para múltiples Juegos Olímpicos, diversas series de televisión, noticieros y algunas piezas de concierto.

La partitura de Williams es generosa y alegre, y se inscribe en la antigua tradición sinfónica de Hollywood de los años 40, del mismo modo que la película de George Lucas. Está llena de colores y ecos de Europa Central, una especie de música antigua y robusta que se propone contar una historia y dar un golpe. Max Steiner, Erich Wolfgang Korngold y Richard Wagner, han sido de gran impacto e influencia en la música de Williams, ésta cuenta con característicos leitmotiv en sus bandas sonoras.

Desarrollo

En el siglo XXI, el trabajo de Williams en bandas sonoras se ha mantenido, tanto en la continuación de su magnífico trabajo en ciertas franquicias, como Star Wars episodios: II, III, VII, VIII, IX e Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008), como en nuevos proyectos tales como, Memorias de una Geisha (2005), Caballo de Guerra (2011), Los archivos del Pentágono (2017), entre otros trabajos aclamados por la crítica y reconocidos.

Entre sus obras de este nuevo siglo, cabe destacar la realizada en la primera adaptación cinematográfica de la serie de novelas juveniles redactadas por la autora británica J. K. Rowling, en Harry Potter y la Piedra Filosofal (2001). Este trabajo fue bastante fiel a su modo usual, en que separa los elementos principales de la trama y crea sus bases melódicas basado en ello.

Williams compuso la banda sonora de dicho proyecto, a partir de un concepto de separación de aspectos fundamentales de la historia, es decir,  suele comenzar su trabajo creando una melodía distintiva para ciertos personajes, lugares o grupos sociales relevantes. Gracias a esto, él construye una banda sonora completa en base a estas melodías temáticas y permite que la audiencia inicie la creación de un lazo mucho más fuerte con los personajes, mediante solamente la música.

El ejemplo más obvio de lo anteriormente mencionado, es el leitmotiv icónico de la saga, que originalmente fue compuesto como tema distintivo de hedwig (la lechuza de Harry), conocido como Hedwig’s theme. Este se volvió el tema icónico de la saga debido a que la lechuza de Harry era un punto fundamental para establecer el vínculo entre lo considerado mágico, y Harry. En consecuencia, cada vez que se muestra el castillo de Hogwarts (la escuela de magia) se escucha dicho tema.

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