NO HAY ENSAYOS

NO HAY ENSAYO

Discurso del padre de la novia:

• El padre de la novia agradece a todos los invitados el estar presentes en la ceremonia y les da la bienvenida.

• Hace mención lo bonita que está la novia.

• Puede contar una pequeña anécdota de la vida de la novia, como algún recuerdo de cuando era pequeña, alguna ocurrencia de su niñez o adolescencia.

• Le da la bienvenida al novio a su nueva familia.

• Les brinda un consejo a los novios sobre su nueva vida de casados, en esta parte se podría hacer un pequeño chiste.

• Agradece a quienes les ayudaron a hacer de ese día un día muy especial.

• Propone a todos un brindis por los novios.

Respetable concurrencia, hijos míos

Es un día tan especial para todas las personas que los apreciamos y para nuestra sociedad ya que nace un nuevo hogar. Que sellen su compromiso ante Dios y ante los hombres y compartan el respeto mutuo y las responsabilidades.

Hija te apartas de nuestro hogar , para formar uno propio, es una dura realidad , pero necesaria porque esta escrito: "Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne”, Estas palabras expresan la más profunda unidad física y espiritual del hombre y la mujer.

Hija ya que por cuenta propia elegiste este serio compromiso se que vas a cumplir como una buena esposa, porque haz crecido en un hogar en donde se te ha inculcado , el respeto , las responsabilidades y todos los valores humanos.

A ti hijo, te doy la bienvenida a nuestra familia eres de ya parte importante de nuestras vidas y estu amor a nuestra hija el único factor valedero para integrarte a esta solida comunidad [continua]

Ooooo

• Puntos importantes para tener en cuenta antes del discurso:

Prepararlo con antelación;

No debería durar más de 4 minutos;

Se debe recordar que el discurso se realiza de pie y por ello es bueno practicarlo en esa situación;

Mencionar a las personas a las cuales se refiere, por su nombre y relación;

Añadir alguna frase graciosa o un chiste de buen gusto;

No beber antes de dar el discurso.

• El padre de la novia debe:

Agradecer a todos los invitados el estar presentes en la boda, y dar la bienvenida a los padres del novio;

Mencionar la belleza de la novia y aprovechar el momento para contar alguna anécdota de su infancia.

Dar la bienvenida al novio a su nueva familia;

Brindar algún consejo a los novios sobre la vida matrimonial, lo cual da la gran oportunidad de generar algún chiste;

Agradecer a todos los que participaron en la boda, oportunidad para mencionar a la madre de la novia, a su mejor amiga y a quienes estuvieron activamente en la planificación y fueron el apoyo moral de ella en los días previos.

Finalmente proponer a todos un brindis por los novios.

El discurso de los padres del novio tiene una estructura similar aunque más corta. Pueden realizar algún chiste sobre el gasto familiar sobre la boda -que tradicionalmente recae en los padres de la novia- y que en la actualidad ha cambiado bastante esa costumbre.

• Qué debe tener en cuenta el padrino:

Lo inicial es agradecer a su amigo -el novio- por invitarlo a ser el padrino de la boda;

Contar alguna anécdota graciosa sobre el novio, generalmente esta instancia es de las más esperadas en los discursos por lo cual hay que saber con anticipación lo que se dirá y es recomendable no inventar en ese instante por cualquier cosa que pueda escaparse y herir susceptibilidades;

Finalmente debe proponer un brindis por la felicidad de los novios y por los padres de ambos por dar su visto bueno para la boda.

En una próxima entrega os contaré las claves para tener en cuenta si vosotras seréis las que deberéis dar el discurso. Mientras tanto, que practiquen ellos y vosotras observad con atención.

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Discursos del Padre de la Novia

Quienes somos padres, deseamos en el fondo de nuestro ser, que al crecer nuestros hijos puedan formar una familia como lo hicimos nosotros mismos en su debido momento, pero sin embargo la creciente independización económica de las mujeres y su correspondiente inserción en el mundo laboral ha generado en los últimos tiempos que no tengan dentro de sus metas inmediatas el consolidar una familia y por ende contraer matrimonio.

Sin embargo cuando esa oportunidad se da los padres, debemos estar preparados pues una hija no se casa todos los días y por ello en las siguientes líneas proponemos un discurso de un padre en el matrimonio de su hija.

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Querida Hija

Hoy 15 de octubre del 2011, es un día que nunca olvidare, porque a pesar de la tristeza que me embarga, me siento feliz, porque se que tu eres feliz, porque estas logrando alcanzar una de las metas que te trazaste aquella vez que conversábamos, cuando adolescente eras, ingresar a la universidad, terminar la carrera universitaria, conseguir un empleo, contraer matrimonio y ser madre.

Claudia, hija mía tanta felicidad me lleva a recordar otra fecha importante en tu vida, cuando llegaste a mis brazos aquel 8 de abril de1987 en horas de la mañana y te vi tan hermosa, tan frágil pero a la vez tan mía, pues era la primera vez en mi vida que tenia algo propiamente mío no conseguido con dinero, no regalado sino concebido con mucho amor junto a tu madre.

Verte crecer, verte reír sentir tus abrazos y besos en cada etapa de tu vida, infancia, niñez, adolescencia y juventud no tiene parangón alguno, cambio todo por verte feliz, pero no cambiare nunca un beso tuyo, un abrazo, una caricia, una sonrisa, porque sin ti mi mundo se vuelve oscuro, porque tu eres el sol que lo alumbra.

Hija mirarte con tu traje blanco me hace recordar cuando hiciste tu primera comunión y aprendí a compartir tu amor con el amor a nuestro señor y que te sirvió de refugio espiritual durante los tiempos duros que luego vendrían y que enfrentaste hidalgamente.

Hoy quiero confesarte que cada vez que hemos estado separados por mi trabajo, siempre al recordarte he procurado visualizarte y tararear una canción que refleja todo mi amor por ti y es esa vieja canción titulada “Mi niña Bonita” cantada por Lucho Barrios, canción que refleja todo lo que siento por ti.

Nada ha habido mas satisfactorio cada vez que discutíamos y luego tu me llamabas para arreglar las cosas diciéndome con tu vocecita “Discúlpame daddycito”, aun sabiendo que yo era el que me había equivocado, era música celestial para mis oídos, porque sabes nuestra relación es como dice tu hermano igual a la del pan y la mantequilla,

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