Carlos Kasuga
Enviado por randyv16 • 6 de Febrero de 2013 • 2.317 Palabras (10 Páginas) • 505 Visitas
Soy hijo de inmigrantes japoneses que en los años 30 tuvieron la gran visión de
escoger esta tierra y con moldes japoneses me hicieron: fabricantes japoneses
pero ensamblado en México; ¡Y, lo que está hecho en México, dicen que está bien
hecho!
El tema que me designaron el día de hoy, trabajo en equipo, es muy común en Japón.
Me lleno de mucho orgullo y esperanza que existan jóvenes que traten de luchar por
ser empresarios y no estudien para buscar empleo en otro lado, ya que empleo no
hay en ningún lado, lo que necesitamos en México es crear empleos.
Japón es un país del tamaño de Chihuahua con Aguascalientes juntos, pero tiene
124 millones de habitantes, tiene los 10 bancos más grandes del mundo, tiene el
índice educativo y de longevidad más alto del mundo, tiene el índice de criminalidad
más bajo del mundo y su producto nacional es igual a lo que producen Francia,
Inglaterra y Alemania juntos. ¿A qué se debe esa gran productividad?, Es una gran
historia, una gran tradición. Les voy a dar unos “tips” para que sean magníficos
empresarios en esta nación.
Analizando las diferencias entre Japón y México, veo tres diferencias importantes: La
educación, la religión, y la actitud hacia la vida misma y la naturaleza.
La educación
En México se da mucho la educación instructiva, de conocimientos. A los padres les
preocupa el 5 el 6 el 8 pero no la educación formativa, qué valores son inculcados en
nuestras escuelas. Entre los valores que tenemos que tomar en cuenta están: la
honestidad, la puntualidad, la limpieza.
Esta educación se relaciona con la educación necesaria en un empresario de éxito.
Existen cuatro pasos para ser un empresario de excelencia. Estos pasos son: el bien
ser, el bien hacer, el bien estar y el bien tener.
1.- El “bien ser”: Honesto, puntual y disciplinado. Por ejemplo, aquí están cerca de
600 personas. Si el conferencista llega 10 minutos tarde, estamos perdiendo 6,000
minutos en esta nación. Por eso no se puede jugar con el tiempo y menos con el
tiempo de las demás personas.
El principio fundamental del respeto: si no es tuyo debe ser de alguien: si esta pluma
te la encontraste en un escritorio debe ser de alguien, entonces devuélvela. Si te
encontraste un reloj o un anillo y no es tuyo, debe ser de alguien, si te encuentras una
cartera tirada en la calle y no es tuya, debe ser de alguien, y si te encuentras en una
fiesta una señora, y no es tuya debe ser de alguien. Y si todos respetamos todas estas cosas viviríamos mejor.
Soy el fabricante de los juguetes Kay “como Kay no hay”. En esta empresa no hay
llaves en ningún lado. Les voy a comentar como conseguí a mi gente. Compraba yo el
periódico que venden los muchachos en la tarde. Les daba 100 pesos y me tenían
que regresar $99.20. Muchos no me lo regresaron, pero los que me lo regresaron son
los que actualmente tienen un porvenir, son ellos mis actuales ejecutivos y directores,
por eso yo tengo tanta fe en este país porque la gente con la que trabajo sabe trabajar
en equipo.
Como los japoneses somos pequeños, la maestra nos pide sacar el volumen de
la jaula de los changos sin utilizar ningún instrumento, pero cálculo visual. Es
por eso que cuando los japoneses van a cualquier exposición en el mundo,
regresan al hotel y sin cámaras de video o fotográficas hacen los planos de
esas máquinas y las mejoran. Yo he mandado a mis técnicos a exposiciones en
Hamburgo y les pregunto ¿Qué vieron? Me contestan, “un oso”, y ¿Qué tiene el
oso? Les pregunto las medidas o el volumen, el material de los osos y no me
dicen con exactitud.
2.- El “bien hacer”: Haz las cosas bien. Si vas a nadar hazlo bien, y si vas a estudiar
hazlo bien, y si vas a hacer el amor hoy en la noche, hazlo bien, hazla ver estrellitas
pero hazlo bien, entrégate.
3.- La gente que es un “bien ser” y da a la familia y a su escuela más de lo que
recibieron, llegará al tercer paso: el “bienestar”, y quienes siguen estos 3 pasos en
este orden, tarde o temprano llegarán a lograr un “bien tener”.
Yo les digo a los empresarios: ¿Cómo te atreves a sancionar a un trabajador si llega
10 minutos tarde, mientras tu llegas dos horas más tarde y en un automóvil último
modelo?
Actitud ante la naturaleza
En cada acto importante de la vida planta un árbol: cuando se casen planten un árbol,
cuando nazca un hijo tuyo planta un árbol, cuando entres a la primaria planta un
árbol, antes de cualquier evento realmente importante, planten un árbol.
Si tu padre y tu madre plantaron un árbol cuando naciste, a ese árbol que tiene ahora
unos 20 años, a ese árbol lo quieres. Sí, realmente sí, porque significa mucho para ti.
Pero si aquel árbol lo siembra el gobierno me importa un comino y es el mismo. Es
por eso importante que cada quien hagamos nuestras propias cosas, para que las
amemos. Por eso, la juventud tiene que ser emprendedora. Nos quejamos de la
contaminación y de la erosión de la República, pero si cada quien plantara un árbol
en cada momento importante de su vida, México sería otro.
La religión
En un programa de televisión al que me invitó Ricardo Rocha, yo fungía de traductor
y Ricardo preguntó cuál es la diferencia entre los trabajadores japoneses y los
mexicanos. Después que los japoneses terminaron de cuchichear, se levantó el jefe
y les dijo: “Hemos visitado muchas empresas mexicanas y creemos que el trabajador
mexicano es mucho más hábil, pero el día de hoy acabamos de estar en La Villa y
nos hemos dado cuenta por qué las relaciones entre los obreros y la empresa son
tan deficientes. Los que vimos en La Villa, es que los dos pueblos son iguales: les
gustan las peregrinaciones, las tamboras, los amuletos, los cuetes, etc.; pero ustedes
van a los templos a pedir y a esperar y en el Shintoísmo nosotros vamos a ofrecer.
Por eso, nos hemos dado cuenta que los sindicatos mexicanos presentan pliego de
peticiones y los sindicatos japoneses presentan pliego de ofrecimientos, ¡Pequeña
pero gran diferencia!
El pliego de ofrecimientos. ¿A qué me
...