Crisis famosas en México (presidentes de la república)

Crisis famosas en México (presidentes de la república)

Introducción:

La crisis económica es un problema que día con día afecta en nuestra sociedad que poco a poco se deteriora en nuestras vidas, hoy tratamos de comprender por qué se da dicha situación y no solo eso; sino como solucionarlo y controlarlo.

En nuestro estudio es importante conocer las altas y bajas de nuestro mundo económico para así poder analizar y estar a la defensiva de los nuevos problemas que a diario se dan en nuestro entorno. Algunos ejemplos serian: el incremento en el dólar y como este afecta en la moneda mexicana y a su vez el incremento de las materias primas que da un fuerte giro globalmente y principalmente a nuestro país.

Desarrollo:

GOBIERNO DE GUSTAVO DÍAZ ORDAZ 1964-1970

Durante el sexenio de este personaje los indicadores de la economía presentaron un desequilibrio externo. Tanto el endeudamiento del país como las inversiones extranjeras directas aumentaban, y de esta manera, los capitales del exterior iban monopolizando la industria y el comercio, con lo que la nación dependía cada vez más del exterior. La cantidad de productos de exportación descendía, por lo que el comercio exterior presentaba números negativos por más de tres mil millones de dólares.

La deuda externa se aproximaba a los cuatro mil millones de dólares y la hacienda pública, por concepto de intereses, debía pagar cerca de quinientos millones de dólares anualmente.

La balanza económica del país se encontraba así en dificultades, pues el volumen de la producción industrial, el comercio, las actividades de la banca y los impuestos eran absorbidos en gran parte por concepto de la deuda externa.

Asimismo, las empresas transnacionales, principalmente procedentes de Estados Unidos, construyeron verdaderos imperios económicos y financieros a través de grandes capitales invertidos en el país, así como por sus altos volúmenes de producción y ventas.

DESARROLLO ESTABILIZADOR

A la etapa de 1953 a 1970 se le conoce como el periodo del desarrollo estabilizador. Durante estos años, fue importante el crecimiento de la industria, el comercio, la banca y los medios de transporte y comunicación. Así, el país entró al terreno del progreso y la modernidad. El sector industrial, la banca y el comercio fueron la palanca para el “despegue del país”; el “milagro mexicano” era un hecho. El desarrollo estabilizador se caracterizó principalmente por el incremento del ahorro interno y por que la economía entró en expansión; con ello se crearon fuentes de trabajo; la producción aumentó; el producto interno bruto que obtiene el país como ganancias neta con el valor de bienes y servicios sumado a los impuestos, creció en 7%; se mantuvo la paridad del peso frente al dólar en 12.5; salarios y precios se equilibraron, logrando que el poder adquisitivo fuera suficiente para cubrir las necesidades familiares.

Al concluir el periodo de Díaz Ordaz terminó este proceso. El desarrollo estabilizador y la economía del país encontraron en un prolongado periodo de descenso de crisis, que prevalece hasta nuestros días.

GOBIERNO DE LUÍS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ 1970-1976

La política del desarrollo estabilizador había concluido; con cambio, el rezago en la dotación de bienes y servicios demandados por la sociedad era patente.

También las transacciones comerciales con el exterior, como lo son las exportaciones de productos nacionales al extranjero se redujeron.

Por ello se intentó incrementar el ingreso de divisas, apoyar las finanzas públicas, reorganizar el comercio exterior y reducir la inflación, los aumentos generalizados en los precios de los productos de consumo necesario.

Este gobierno puso punto final al desarrollo estabilizador, con el argumento de que con esa política se había disminuido el poder adquisitivo del pueblo y se había incrementado se explotación. También pregonó que acabaría con los privilegios y en consecuencia con la opresión, y defendió la tesis de que el trabajo agrícola debería ser colectivo, pues de esta manera se incrementaría la producción del campo.

Pero todos estos proyectos y acciones no funcionaron. Hacia la segunda mitad del sexenio hubo enfrentamientos entre el gobierno y los capitalistas nacionales y extranjeros; para el final, la desconfianza era dramática. Los inversionistas, en forma masiva, retomaron sus capitales y la política económica fracasó completamente ante las agrias críticas de las clases dominantes.

El valor del peso frente al dólar cayó de 12.50 a más de 26.00 pesos; es decir, nuestra moneda se depreció en as de 100% y este descenso continúa hasta nuestros días en mayor proporción.

La deuda externa se incremento de 4262 millones de dólares en 1970 a más de 20 mil millones de dólares en 1976, lo cual quiere decir que aumento cinco veces en seis años.

Todo esto trajo más pobreza para el pueblo y una mayor pérdida para la economía del país, pues los intereses que deberían pagarse aumentaban en esta proporción, sumados a los demás problemas.

OBIERNO DE JOSÉ LÓPEZ PORTILLO 1976-1982

Al comienzo de su mandato y para enfrentar la crisis económica, el presidente pone en práctica un plan: la Alianza para la Producción. Para ello solicita la participación de empresarios y trabajadores.

Debido a que el gobierno controlaba los precios, los productos de la canasta básica estaba sometidos a una rígida vigilancia de las autoridades; pero ante las presiones de productores y comerciantes, la administración de López Portillo permitió que el comercio determinada los principio de más de cien productos, entre ellos azúcar, jabón, pastas para sopa, detergentes y otros, por los que el consumidor debió de pagar más. en 1978 y ante el molestar de la población debido a la carestía, el gobierno se manifestó a favor de elevar los ingresos despueblo, así para lograr un reparto más equitativo de la riqueza declara que el Estado continuará estableciendo las reglas y acciones en el entorno económico. Pero todo esto no tuvo éxito.

LA PETROLIZACIÓN DE LA ECONOMÍA

Desde comienzos de la administración de López Portillo, la conducción de la economía fue equivocada. Se consideró que el territorio nacional flotaba en un mar de petróleo y gas, y que esa riqueza salvaría al país de la crisis. Así, se empezaron a construir más refinería y plantas petroquímicas en las zonas petroleras; estas instalaciones eran necesarias para el desarrollo nacional, pero era un error.

Al mismo tiempo que se aceleraba la producción petrolera, crecía al gasto público porque de los millones

de dólares que llegaban a las arcas de

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