Cuadro De Mando Integral

Cualquier empresa para sobrevivir hoy en día, no puede centrarse sólo en generar ganancias y beneficios a corto plazo, sino que deben desarrollar capacidades necesarias para progresar en el futuro aunque esto le conlleve a la disminución de sus beneficios actuales.

Es por ello, que en los últimos años se esté utilizando con gran insistencia por las empresas una herramienta que revoluciona el control de la gestión. Se trata pues, del llamado Cuadro de Mando Integral (CMI) o Balance ScoreCard.

El concepto de cuadro de mando como instrumento de información y control ha sido utilizado en diversas organizaciones e instituciones en el sector público y privado. Pero estos han estado basados en información sólo de uso financiero, dejando a un lado

el enfoque integrador con todos los recursos que lleva a la Organización al logro de los resultados esperados. Es así como surge el CMI, en un principio como sistema de medición mejorado, pero que con el tiempo se ha convertido en el pilar básico de cualquier sistema de gestión estratégico organizacional, siendo una extraordinaria herramienta para comunicar la misión, visión y objetivos de la misma.

Muchas empresas, organizaciones e instituciones han experimentado el fracaso en la aplicación de esta herramienta de trabajo, en la aplicación de estrategias gerenciales, en la implementación de principios de la calidad total, entre otros elementos importantes de la planificación estratégica. En este sentido, el aporte del CMI será el de transmitir la interrelación que se genera entre los actores individuales, las acciones en la consecución de los objetivos y el presupuesto; comprometiendo así a todos los actuantes llevarlas a cabo sin perder de vista el propósito y la intención de la compañía.

EL CUADRO DE MANDO INTEGRAL

DEFINICIÓN

El Cuadro de Mando Integral es un instrumento o metodología de gestión desarrollado por Robert Kaplan y David Norton en el año de 1.992, al cual lo definen como:

El Cuadro de Mando Integral traduce la estrategia y la misión de una organización en un amplio conjunto de medidas de la actuación que proporcionan la estructura necesaria para un sistema de gestión y medición estratégica.

Así pues, facilita la implantación de la estrategia de la empresa de una forma eficiente, ya que proporciona el marco, la estructura y el lenguaje adecuado para comunicar o traducir la misión y la estrategia en objetivos e indicadores organizados en cuatro perspectivas:

1. Perspectiva Financiera

2. Perspectiva del Cliente

3. Perspectiva del Proceso Interno

4. Perspectiva de Aprendizaje y Crecimiento

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