EL PERFIL IDEAL DE UN FRANQUICIATARIO

EL PERFIL IDEAL DE UN FRANQUICIATARIO

[pic 1]

Adquirir una franquicia representa un acontecimiento de enorme relevancia tanto para el Fraquiciante como para el Franquiciatario, reunidos en un acto de negocios cuyo éxito dependerá en gran parte del perfil del empresario que dirigirá el negocio. 

La evaluación de este perfil es una obligación que no sólo debe dejarse a la franquicia, es decir al Franquiciante, como comúnmente sucede, en cambio debe ser también una responsabilidad para el propio emprendedor, quien antes de pensar en adquirir una franquicia debe realizar un análisis serio de su perfil para saber si puede o no ser, en lo general, un buen Franquiciatario.

No hay que olvidar que el Franquiciatario es el que invierte los recursos económicos, que en la mayoría de los casos representan una parte muy importante de su patrimonio, y que de su trabajo, esfuerzo y dedicación dependerá en un alto grado el funcionamiento del establecimiento en franquicia.

Pero ¿cuál es este perfil ideal para un Franquiciatario?. Revisemos los principales aspectos que podemos identificar para la mayoría de las franquicias, en el entendido que cada una de ellas y cada giro de negocio en particular tiene su perfil específico:

Tener apego a normas y lineamientos, es quizá la condición más importante y particular que debe poseer un Franquiciatario. Se puede ser un emprendedor creativo y tener mucha iniciativa, pero al final de cuentas al momento de operar y administrar el negocio, el Franquiciatario debe seguir, aún si no está de acuerdo, las políticas, procesos, procedimientos, normas, lineamientos e inclusive estrategias que le imponga la Franquicia. Habrá franquicias bien desarrolladas que establezcan formas para aceptar alguna propuesta de modificación o iniciativa de un Franquiciatario, no sin antes pasar por un profundo análisis para ser autorizadas, quedando muy claro que el beneficio de toda la cadena de franquicias siempre estará por encima del bien particular de una sola unidad en franquicia.

Ser positivo hacia la supervisión y la crítica, aceptando observaciones, propuestas de mejora, e inclusive indicaciones de incumplimientos que pudieran llegar a ocurrir, siempre en una actitud positiva y proactiva hacia la resolución inmediata de los problemas que pudiera tener su negocio. El Franquiciatario no debe olvidar nunca, sin importar los años que lleve operando, que el Franquiciante es el experto del negocio, que dicha supervisión forma parte de la asistencia técnica que debe recibir y que por lo tanto es un beneficio muy importante para la mejora de su negocio.

Querer ser parte de una organización, el Franquiciatario no puede ser una persona individualista que quiera encerrarse en su trabajo sin saber de nadie más, por el contrario debe querer ser parte de una cadena de franquicias formada por empresarios como él. Además debe tener actitud para el trabajo en equipo con su personal, y para relacionarse con clientes.

Dedicación al negocio, un Franquiciatario debe trabajar en su franquicia igual que si pusiera un negocio independiente, por lo tanto debe dedicarle la mayor cantidad de tiempo efectivo posible. La mayoría de las franquicias están de acuerdo en que existe una relación proporcional muy directa entre el tiempo dedicado del Franquiciatario a su negocio y el éxito de la misma.

Capacidad financiera que sea superior a la inversión inicial requerida por la franquicia, es decir que el Franquiciatario cuente con el capital de trabajo y con los recursos económicos suficientes para hacerle frente a los primeros meses de operación en que su negocio pudiera no llegar al punto de equilibrio, e inclusive para cualquier imprevisto o reinversión requerida.

Tener objetivos claros, tanto personales como laborales o profesionales, y en sincronía con el giro de negocio en el que se quiere involucrar.


Otros características generales a considerar:

• Liderazgo para el manejo de personal y manejo de conflictos.
• Organizado en la administración de su negocio y de su tiempo.
• Adaptabilidad a los cambios de la franquicia y del mercado.
• Orientación a resultados del negocio, pero con visión a mediano o largo plazo.
• Disciplina interna y externa.
• Rendimiento bajo trabajo a presión.
• Autoconfianza y motivación por el negocio y la franquicia.
• Toma de riesgos pero controlados.
• Transparencia, sobretodo en el manejo de la información con la franquicia, incluyendo lo referente a los antecedentes legales y financieros.
• Integridad moral y ética en los negocios.

Por último resaltar que el candidato a Franquiciatario debe conocer, de manera clara, lo que implica la franquicia desde el punto de vista económico, jurídico y operativo, para estar plenamente convencido de querer formar parte de esta exitosa forma de hacer negocio.

 Perfil del franquiciante y franquiciatario

Un buen franquiciante no solo cumple con lo que legalmente se le exige. Su misión es la búsqueda de la excelencia y de una oferta claramente diferenciada para sus franquiciatarios. Este punto define y separa, en gran medida, una buena franquicia de una mala empresa llamada franquicia. Se debe tomar en cuenta que no dejan de ser franquicias los negocios por su simpleza de operación, manejan procesos de capacitación poco elaborados, no emplean manuales e incluso no cobran cuota inicial o regalías de forma convencional. Las franquicias serias trabajan, a diario, en aspectos como (Ferenz f y Manuel G.):

1. Calidad y mejoras continuas.

2. Reducción de costos.

3. Capacitación continúa.

4. Empowerment (de su equipo y el de los clientes).

5. Mantener un staff reducido.

6. Orquestación de la tecnología.

7. Enfoque al cliente (interno y externo).

8. Competitividad organizacional y profesional.

9. Vivir y hacer realidad una verdadera relación ganar-ganar.

El perfil de las partes es necesario en la franquicia. El franquiciatario desea que el franquiciante tenga ciertas cualidades o características para que el negocio sea exitoso. De la misma manera el franquiciante desea que el inversionista satisfaga cierto perfil. Cuando el negocio ha sido estructurado bajo el sistema de franquicias, el franquiciante investiga al posible franquiciatario para conocerlo y evaluarlo, en cuanto a sus datos y características generales, para determinar si reúnen el perfil establecido que se integran con cualidades , más que con otros requisitos como escolaridad, tales como aptitudes y actitudes para apegarse a las normas y procedimientos, a guardar la confidencialidad, a aceptar como positiva la supervisión del franquiciante, a la cultura y disposición para aceptar sugerencias a entregar los informes y reportes cuya obligación se encuentra en el contrato de franquicia.

...