Efecto Pigmalión

EL EFECTO PIGMALIÓN

Por

Esteban Gutiérrez

Como punto de partida es necesario aclarar de qué se trata el Efecto Pigmalión y de dónde proviene. En palabras resumidas este efecto afirma que las expectativas que creamos de una persona puede influir, de manera positiva o negativa, en ésta ayudándola a lograr un gran objetivo, o por el contrario cumpliendo con una tarea (o a veces no cumpliéndola) de manera mediocre.

La teoría fue implementada en base de un mito griego, en el que Pigmalión, un escultor con mucho talento, se dispuso a hacer una escultura en la que expresa su criterio de la mujer perfecta.

La escultura llenó tanto sus expectativas que se enamoró de su obra, tratándola incluso como una mujer real. Después de un sueño de Pigmalión creado por Afrodita, que al ver el amor del hombre por la escultura que representaba la mujer de sus sueños, se compadeció de él y le dio vida a la obra, convirtiéndola en una mujer real.

Este efecto aplica también en el ámbito educativo. Donde el trato que un maestro dé a sus alumnos, previa creación de las expectativas positivas, puede mejorar el rendimiento de éstos, obteniendo mejores resultados.

En el aspecto laboral se hace muy presente la aplicación de este efecto, partiendo de una muestra de aceptación por parte de los jefes hacia los empleados, ellos obtendrán un alto desempeño en sus labores, pero constantemente también se presentan expectativas negativas hacia los empleados, cuestionando continuamente sus capacidades, mostrándose indiferentes y generando mucha desmotivación . Como consecuencia de este tipo de manifestaciones vemos que los trabajadores disminuirán la cantidad y calidad de su trabajo.

Maestros, jefes y demás personas tienen una imagen de sus alumnos o de sus empleados según el caso, y tratan a las personas de acuerdo a esa imagen que tienen, pero el punto cúspide es que esa imagen también es percibida por los alumnos o colaboradores, aunque el jefe o el maestro no la comuniquen verbalmente. Por lo cual cuando la imagen es positiva todo funciona bien, pero cuando es negativa sucede lo opuesto.

Resumiendo, el encargado de manejar personal, sea cualquier área (educativa, laboral o incluso social) deberá además de crear una expectativa positiva, buscar todos los medios disponibles para comunicarla. Esto se logra generando un CLIMA apropiado y positivo para el trabajo, permitiendo APORTACIÓN de la otra parte, es decir, permitir y resolver las preguntas que se formulen en el proceso. Con esto se obtendrán unos RESULTADOS positivos y al final generando una RETROALIMENTACIÓN, es decir, no sólo diciendo cómo hacer bien las cosas, sino también enseñando cómo hacerlo aún mejor.

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