Gerencia En Venezuela

Introducción.

El presente ensayo es una opinión basada en mi experiencia académica y lo que he visto y palpado sobre el estado de la gerencia en Venezuela en la actualidad, el cual depende de las medidas que hoy tomen los gerentes en nuestro país y en nuestro planeta.

En la historia de Venezuela, han ocurrido diferentes acontecimientos y causas que han modelado el perfil actual del gerente. Las causas han sido entre otras, de corte político-social, geográfico-geológico.

Líderes que sobrevivieron a las dictaduras, se prepararon mejor y pudieron ofrecerles mejor educación a sus hijos, por lo que la carrera gerencial empezó a tomar forma, se copiaron y adaptaron modelos gerenciales exitosos de otros países, se le dio entrada a capital extranjero del cual se aprendieron buenas prácticas en todos los aspectos, hubo un nutrido grupo de personas que se prepararon académica y laboralmente en otros países y luego implantaron modelos gerenciales retadores y paralelamente, en el mundo en general se estaban escribiendo nuevas teorías más humanas sobre gerencia.

Existen diversas causas de lo más conocidas por nosotros que generan incertidumbre y duda acerca de la continuidad de la evolución de la gerencia en nuestro país. La inseguridad social, la economía, la constante amenaza a la propiedad e inversión privada, la pobreza, la censura y en general la polarización político-social pudieran obstaculizar el desarrollo de la gerencia.

Sin embargo, existen personas, universidades e instituciones que están invirtiendo en enseñar y aprender más sobre este tema y así generar nuevos gerentes capaces de cambiar la dinámica del país y sus organizaciones, educación, ambiente y entorno.

LA GERENCIA EN VENEZUELA

En estos tiempos modernos, nuevas y complejas condiciones de competencia determinan la conducta y las acciones de las empresas, que de alguna u otra forma deben enfrentarse a mercados cada vez más globalizados y exigentes, impulsados por el crecimiento tecnológico que de muchas maneras, cambia y modela las necesidades de la sociedad a una velocidad increíble.

Los países y mercados en América Latina no escapan a esta realidad, aún y cuando persistan muchos de los fenómenos políticos y sociales, que mantienen a sus aparatos productivos relegados a una condición y conducta tercermundista. Hoy en día, gran parte de nuestra región y muy especialmente en nuestro país Venezuela, enfrenta una crisis social y política que ha traído como consecuencia la instauración de un gobierno totalitario y centralista que basa sus acciones y políticas en caducadas doctrinas comunistas soviéticas, ejerciendo así acciones de control extremo sobre los mercados, generando un ambiente muy complejo para la actividad productiva de las empresas, las cuales se ven obligadas a operar y sobrevivir en el marco de una inseguridad económica y jurídica.

Los empresarios y gerentes en Venezuela deben ejercer hoy su actividad sorteando todas las complejidades de los mercados globalizados, con la presencia de crisis económicas de carácter mundial y sumar además a su itinerario, fuertes y desgastadora jornadas en la búsqueda de oportunidades y toma de decisiones en un contexto inmediato caótico e inseguro.

Sobrevivir en este plano requiere de carácter, de la creación de planes empresariales con visión de largo plazo y persistencia, de la creatividad para identificar estrategias que permitan el progreso y mejoramiento constante, que logren identificar las oportunidades en situaciones que a primera vista parecen adversas y destructivas.

La gerencia venezolana tiene muchos aspectos particulares que la han ido modificando y dándole forma con el paso de los distintos escenarios políticos y económicos de nuestra historia, convirtiéndose a través de este proceso en una gerencia que busca amoldarse a cada situación sin responder a líneas y objetivos claros en la búsqueda de planes a largo plazo.

Como plantea Alberto Rial (1997), la falta de preparación de los gerentes Venezolanos sobre todo en las pequeñas y medianas empresas, ha potenciado ese comportamiento discontinuo de sus ideas. Respondiendo a los procesos gerenciales por condición cultural de una manera autodidacta e improvisada. Todo esto enmarcado en una identificación directa con una sociedad que actúa espontáneamente sin mucha inclinación a la planificación, en la cual los individuos se han acostumbrado a obtener resultados de manera rápida y fácil.

El cambio constante y la situación económica que enfrentamos

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