Habilidades de la gente altamente efectiva
Enviado por LuSinchi1204 • 5 de Mayo de 2020 • Trabajo • 3.083 Palabras (13 Páginas) • 373 Visitas
Habilidades de la Gente Altamente Efectiva
Universidad de Cuenca
Facultad de Ciencias Económicas y Administrativa
Contabilidad Y Auditoria
Comportamiento Organizacional I/II
AE-01-01
Introducción
Los hábitos forman nuestra vida y si nos damos cuentas todas las personas tenemos hábitos, algunos son buenos, otros irrelevantes y otros pueden llegar a ser muy dañinos. Por lo general vivimos inconscientes de ellos y los hacemos sin preguntar por qué los hacemos y rara vez reflexionamos sobre ellos. Sin embargo, es de suma importancia aprender a integrar conscientemente hábitos positivos que nos ayudaran a construir la vida que todas las personas desean.
Generalmente los buenos hábitos no surgen naturalmente, al principio se tendrá que aplicar disciplina y hacer un esfuerzo consciente para adoptarlos a nuestro estilo de vida. Pero gradualmente podremos notar que empezamos a transformar la forma en que actuamos y pensamos, podremos tomar mejores decisiones, eliminar malos hábitos, incrementar el nivel de satisfacción, pero sobre todo podremos encontrar la manera de responsabilizarnos de nuestra vida y llevarla por el rumbo que deseamos.
Habilidades de la Gente Altamente Efectiva
Independiente de la posición que cada uno de nosotros ocupe dentro de la organización, la habilidad de gestionar el tiempo nos permitirá y ayudará a ser más eficientes y eficaces en el trabajo. En la mayor parte de los casos las personas funcionan de manera reactiva, por lo que esta actitud genera altos niveles de estrés, ya que no se prevé o anticipan estas situaciones, este estrés interfiere en la toma de buenas decisiones. En base a estas decisiones el individuo incrementa su nivel de estrés y es así como continua el ciclo. Por lo que la comprensión de cómo se administrara el tiempo de forma efectiva y cómo se manejara este estrés van de la mano y dan como resultado la productividad. (Carnegie, 2016)
De acuerdo con la “Ley de Causa-Efecto”, es posible ser exitosos con tan solo hacer lo que la gente exitosa ha hecho. Ya que las investigaciones demuestran que este tipo de personas alcanzan el éxito haciendo ciertas cosas de una cierta manera, una y otra vez. Por lo que se puede decir que a acciones iguales corresponden reacciones iguales. (Tracy, 2001)
Para ejemplificar este tema se presenta un diagrama en el que se ejemplificara el sistema de los hábitos que poseen las personas efectivas.
En la parte de abajo se encuentra la victoria privada, aquí encontramos los primeros tres hábitos de la gente altamente efectiva enfocados en el desarrollo individual, es importante que las victorias privadas vengan primero con la intención de adoptar una estabilidad interna que después permita hacer cambios externos. Lo ideal para construir una visión de vida es que primero se trabaje profundamente con tus propias ideas y emociones.
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Ilustración 1 Consiguiendo la Victoria Privada
Hábito 1: Se Proactivo
El primer paso es fundamental. Aquí podemos ver que existen dos posturas ante la vida; la gente reactiva y la gente proactiva. Las personas consideradas reactivas actúan en relación a una cuestión externa, están constantemente esperando y respondiendo a estímulos externos, esta manera de actuar nunca encuentra satisfacción porque todo el tiempo se encuentra siendo empujada por el mundo.
Por otro lado, existe la gente proactiva y es aquella que ejerce la completa libertad sobre su ser, se puede actuar con iniciativa propia desde un motor interno que alimentara todas las decisiones de la persona. Para ser proactivo se tendrá que tomar la completa responsabilidad de tu vida y actuar desde una perspectiva donde tu tengas el control.
En este hábito el autor menciona que hay dos tipos de esferas psicológicas donde se puede habitar. El circulo de influencia o el circulo de preocupación.
- El circulo de preocupación: está lleno de todas aquellas cosas que importan al individuo pero que no las puede controlar.
- El circulo de influencia: está conformado por lo que es relevante para el individuo y además se tiene el control para modificarlo.
La visión proactiva radica en concentrarse la mayor cantidad de tiempo en el círculo de influencia, donde se tiene la capacidad de influenciar el resultado.
La mente proactiva se pone a funcionar cuando es alimentada por una visión y objetivos, en lugar de reaccionar a los problemas y frustraciones.
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Ilustración 2El hábito de la Proactividad
Nos da la libertad para poder escoger nuestra respuesta a los estímulos del medioambiente. Nos faculta para responder de acuerdo con nuestros principios y valores. En esencia, es lo que nos hace humanos y nos permite afirmar que somos los arquitectos de nuestro propio destino. (Covey, Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva, 1997) |
Hábito 2: Empieza con un Fin en Mente.
Al desarrollar un proyecto de vida se parte con muchas preguntas para saber qué es lo que realmente se quiere. Se comienza con una visión, es decir, una imagen mental que represente que es lo que se quiere conseguir con la vida de cada uno. Entre más clara y significativa sea esa visión, más fácil será caminar hacia ella.
Para conocer qué camino tomar en este mismo instante se deberá tener una idea clara de a donde se quiere llegar. Para comenzar a entender en donde se está actualmente se inicia por crear una visión del futuro que te inspire a actuar. Piensa en tu vida como si fuera una obra de arte, para saber que técnica y que colores utilizar lo primero sería estructurar una idea clara de cómo se verá al final el panorama completo.
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Ilustración 3 Comenzar con un Fin en Mente
Este hábito hace posible que nuestra vida tenga razón de ser, pues la creación de una visión de lo que queremos lograr permite que nuestras acciones estén dirigidas a lo que verdaderamente es significativo en nuestras vidas. (Covey, Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva, 1997) |
Hábito 3: Establece Primero lo Primero.
Es en este punto cuando se empieza a desarrollar un plan de acción detallado y luego ejecutarlo de la mejor manera posible, aquí es tiempo de comenzar a administrar tu día a día. Se basa en tres hábitos:
- Este consiste en elegir tomar la responsabilidad, que es tomar la decisión de empezar.
- El segundo se forma al crear una visión ideal del futuro, se enfoca en desarrollar los planos de lo que vamos a realizar teniendo todo muy claro en la mente.
- Este hábito consiste en aterrizar la visión a la realidad y comenzar a construir los cimientos que permitirán alcanzar lo propuesto.
Los principios y valores deben ser la prioridad en esta etapa de desarrollo, es por esta razón es fundamental que se empiece a estar consciente de la administración del tiempo que se tiene disponible.
Realizando un modelo con cuatro bloques donde se ubican las actividades en función de la urgencia y la importancia
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