IMPORTANCIA DE LAS DECISIONES EN LAS ORGANIZACIONES
Enviado por JGUZMANZAV • 27 de Abril de 2019 • Ensayo • 2.179 Palabras (9 Páginas) • 113 Visitas
IMPORTANCIA DE LAS DECISIONES EN LAS ORGANIZACIONES
El hombre es un ser de acción (praxis) , de ejecución, de practica; esto quiere decir que no puede tener una visión contemplativa de la vida y de su entorno, ya que necesita actuar para poder satisfacer sus necesidades, para responder a las circunstancias que se le presenten o bien para hacer que las cosas pasen, es decir obtener algo distinto a cubrir una necesidad o responder a una situación fortuita.
Desde luego, esta praxis (acción) no es algo intrascendente, sino que debe de tener una base, una fuente, un objetivo, una razón de ser. La filosofía de la praxis nos permite entender que el hombre no puede ser un ser contemplativo debe de actuar, y que esta praxis debe ser critica del sentido común, es decir, el hombre no debe vivir solo del sentido común, sino que se debe cuestionar el sentido común para sacar al hombre de su sencillez y permitirle acceder a una concepción superior y trascendental de la vida. El ser no puede separarse del pensar y este pensar será el que convertirá al hombre un ser de acciones, y estas acciones generarán cambios y transformaciones. Las ideas no tienen valor si no se convierten en acción que permitan la transformación y reconstruyan de una u otra manera el mundo en el que vive el hombre. Desde esta perspectiva, Dewey sugiere que es mejor cometer errores participando y actuando en la sociedad, que mantener una actitud contemplativa.
Una de las visiones mas influyentes del efecto transformador de la praxis, esta dada por la filosofía marxista. En ella podemos ver los puntos de unión entre los diversos aspectos sociales en que se desarrolla el hombre. En lo que se refiere a la filosofía, la praxis es el centro de unión entre la voluntad humana y la estructura económica. Marx, en su Tesis sobre Feuerbach, plantea el hecho de que para que el pensamiento humano tenga una verdad objetiva, deberá existir la praxis. A través de esta praxis, el hombre puede demostrar la verdad, la realidad y el poderío. Indica que, si bien la teoría de que el hombre es productos de las circunstancias y de la educación, y que esto produce un hombre modificado, no se considera que el hombre es el que hace que cambien las circunstancias a través de la praxis y que la educación se va adaptando a esas circunstancias. Al ser el hombre un ser social, entonces la praxis o acción también la actividad social implica la praxis y esta debe estar orientada a transformar el mundo, no solo contemplarlo o interpretarlo.
Ahora bien, esta praxis o acción, implica la toma de decisiones, decidir que hacer, como hacerlo, porque hacerlo, etc. La toma de decisiones esta presente en todos los aspectos de la vida del hombre, desde que ropa se va a poner hasta la de si lleva a un país a la guerra. Las decisiones estarán dadas en función a las necesidades que debemos cubrir, a responder a las situaciones que se nos presentan o al ejercicio de su libertad. La toma de decisiones debe de hacerse también en un marco ético, ya que dicha toma de decisiones también implica asumir las consecuencias que provoquen.
La acción y la toma de decisiones que esta implica, tienen consecuencias y estas serán tan importantes como haya sido la toma de decisiones, es decir, ya sea a nivel personal o social y económico, la toma de decisiones puede tener muchas implicaciones en cuanto a sus consecuencias y efectos, por esto es, que el hombre debe llevar a cabo las acciones y la toma de decisiones bajo principios basados en la ética.
Podemos definir a la Ética, como el estudio filosófico de la moral, pero esta definición, no nos permite por si misma saber que es actuar éticamente. La ética se puede dividir en el estudio general del bien, en el estudio general de las acciones moralmente correctas, en la ética aplicada, la metaética, la psicología moral y la metafísica de la responsabilidad moral. La ética aplicada es la rama que nos interesa, ya que esta incluye la ética profesional, dentro de la cual podemos considerar la ética de los negocios. La ética practica no implica una aplicación mecánica de preceptos que están por encima de la moral común, sino que se puede considerar como una disciplina independiente que ayuda a aclarar y analizar los usos en un ámbito profesional, de modo que resulte posible aplicar la moral “estándar”.
Ya con todos lo elementos anteriores, podemos ahora enfocarnos en la toma de decisiones éticas dentro de las organizaciones, para lo que primero deberemos definir cual es objetivo de una organización o empresa.
Podemos considerar que el objetivo de la actividad empresarial es la satisfacción de necesidades humanas a través de recursos materiales, financieros y humanos. Los recursos humanos son la parte mas importante de la organización, por lo que no basta con que la actividad empresarial satisfaga necesidades, sino que también debe desarrollar el potencial del elemento humano. Las decisiones que se tomen en la actividad empresarial, por lo tanto, no solo estarán enfocadas a la satisfacción de necesidades y la obtención de utilidades, sino también en la calidad, la honradez, respeto a las relaciones internas y externas de la empresa y al desarrollo y capacitación de su elemento humano.
Cabe mencionar que la ética profesional y la ética empresarial no son precisamente lo mismo, ya que la ética profesional esta determinada por cada actividad profesional. La ética empresarial estará dada por la actividad empresarial y por la organización misma y deberán de considerar unos valores, principios y actitudes que deberán de observar todas personas de la empresa.
Ahora bien la toma de decisiones en las empresas, deberán estar enfocadas a cumplir los objetivos de la organización, pero también considerando la ética que la misma organización aplica dentro de su actividad. La visión ética de la empresa ha tenido cambios a lo largo del tiempo dependiendo de la características sociales, humanas y económicas que se han vivido a lo largo de la historia.
Como ejemplo de esto, podemos observar los objetivos y principios éticos que se manejaron a lo largo de los siglos XIX y XX, tales como que: Para poder triunfar en los negocios era necesario olvidarse de la ética común, ya que los negocios tenían sus propias reglas y por tanto sus propios principios éticos. El objetivo de la empresa era maximizar utilidades sin importar el como se lograba. Los principios éticos dentro de la empresa debían limitarse a básicamente cumplir con la legalidad y cumplir con las leyes del marcado.
En base al párrafo anterior, podemos entender que las decisiones que la empresa debía tomar decisiones sin importar a quien afectaba o en que forma lo hacia, por lo cual si la toma
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