Instrumentos financieros: Los derivados

Los derivados son aquellos instrumentos financieros que se vinculan al valor de un activo subyacente, son como un contrato que “deriva el precio futuro para tal activo sobre la base de su precio actual (el precio al contado) y las tasas de interés el valor del dinero en el tiempo)” (Gray y Place, 2003, p. 2).

¿Qué es subyacente?

Es aquel que puede ser un activo físico, son popularmente conocido como commodities o un activo financiero como una acción, un bono, una divisa, un índice, una tasa de interés, y otros.

Definición de Cobertura:

La cobertura son los riesgos ante cambios en los precios de determinados productos físicos y financieros, la cual corresponde a la finalidad original de los derivados.

RIESGOS EN DERIVADOS FINANCIEROS

Los derivados originan pocos riesgos, pero al igual que la mayoría de los productos, generan exposiciones al riesgo del mercado y al riesgo de crédito de contraparte, así como la serie de riesgos operativos. Los derivados pueden contener una serie de riesgos en formas complejas, resultando en una mala comprensión de la exposición a estos riesgos y a una mala fijación de precios. Los derivados pueden permitirle a los bancos aceptar grandes exposiciones a los riesgos de mercado a cambio de desembolsos iníciales relativamente pequeños.

No se debe olvidar que los derivados son productos sofisticados que, cuando no son utilizados en cobertura y/o si además no se domina y controla de forma adecuada su gestión, pueden comportar pérdidas inesperadas importantes debido al alto grado de apalancamiento financiero que suelen tener. Los inversores y los gestores de esta operativa deben tener muy en cuenta los riesgos inherentes.

En general, podemos decir que en la operativa con productos derivados las partes pueden incurrir en los siguientes riesgos fundamentales: mercado, crédito, liquidez, operacionales y jurídicos.

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