La inflación. Definición. Causas

LA INFLACIÓN

1. Definición

Definimos como inflación al aumento sostenido y generalizado de los precios de los bienes y servicios de un país, siendo medido éste, a través de índices como el Índice de Precios al Consumidor  (IPC) o Índice de Precios al Productor.

En muchos países como el nuestro, se encuentra controlada y por debajo de un 10% anual. Cuando la inflación sobrepasa el 50% mensual se denomina hiperinflación.

1. Causas

Las causas de la inflación suelen ser de dos tipos, y distinguimos las presiones inflacionarias y los mecanismos de propagación.

Las presiones inflacionarias son desequilibrios de oferta y demanda que provocan la subida de los precios, mientras que los mecanismos de propagación son los que provocan que éstas subidas de precios, se trasladen hacia otros mercados.

Entre las presiones inflacionarias tenemos las siguientes:

1. Inflación Monetaria

Es producida cuando el incremento en la  oferta monetaria, es superior al incremento de la demanda monetaria y el fundamento teórico en el que se apoya esta causa, es la teoría cuantitativa del dinero y por lo general se produce por una monetización del déficit fiscal.

La monetización del déficit fiscal es producida cuando el gobierno reduce sus reservas internacionales o imprime dinero para financiar la deuda.

En éste punto es importante analizar la situación teniendo en cuenta el tipo de cambio.

Dónde hay un tipo de cambio fijo, el banco debe comprar monedas nacionales para que se pueda mantener fijo el tipo de cambio, lo que provoca la pérdida de reservas, ya que la compra de monedas nacionales, se hace a costa de éstas.

Si el gobierno al final de éste proceso, no consigue financiar el déficit fiscal, no se podría mantener el tipo de cambio, y el gobierno debe devaluar la moneda. Al devaluar la moneda, se provoca inflación ya que los precios se incrementan.

En países con régimen de tipo de cambio flexible, el déficit fiscal se traslada a los precios y la moneda se deprecia, provocando la inflación al subir el nivel general de precios.

En estos casos es donde se produce el “impuesto inflacionario” que es cuando el ingreso real disminuye por el incremento de los precios.

Los monetaristas utilizan la siguiente ecuación  para explicar cómo la masa monetaria en circulación se encuentra estrechamente vinculada a la inflación:

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Dónde:

V: Velocidad de circulación del dinero.

O: Oferta Monetaria

P: Precio de los bienes y servicios

Q: Cantidad de bienes y servicios

La explicación que dan los monetaristas, es que si la Velocidad de circulación del dinero se mantiene constante al igual que la producción total de bienes y servicios de la economía, y al mismo tiempo se produce un incremento de la oferta monetaria del país, la única manera de mantener la igualdad, es mediante el incremento del precio de los bienes y servicios.

Dentro de este enfoque, existe una corriente que es el llamado “enfoque monetario de la balanza de pagos” que analiza a una economía abierta con tipo de cambio fijo y postula que el incremento de la oferta monetaria, además de incrementar los precios locales, también llevaría a un incremento de las importaciones, lo que se llevaría a cabo a través de una reducción de las reservas internacionales que lograrían eliminar el exceso de dinero.

1. Inflación de la Demanda

Esto se debe a que la demanda de bienes y servicios es superior a la oferta y es producida debido a que la oferta no puede crecer al mismo ritmo que la demanda y por lo general esto se debe a trabas gubernamentales.

Los keynesianos son los que asocian la inflación al pleno empleo de los factores productivos.

En una economía con el pleno empleo de sus factores, por más que se incremente la demanda, no se podrá incrementar la oferta al mismo ritmo, lo que causaría el incremento de los precios.

Para los Keynesianos, la inflación es un fenómeno de la demanda agregada, en la que la oferta agregada viene a ser inferior a ésta y nos aseguran que si nos encontramos en una economía dónde hay desempleo de los factores productivos, un incremento de la demanda agregada, haría que se aprovechen los factores desempleados incrementando la oferta agregada y de ésta forma no se produciría un fenómeno inflacionario.

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