Liderazgo, El quehacer, labor, trabajo

El liderazgo

Es la habilidad gerencial o directiva por excelencia, y consiste en tener la capacidad de influir en la forma de ser de las personas o en un grupo de personas determinado, logrando que el trabajo se lleve a cabo con entusiasmo y se enfoque en el logro de metas. Un buen líder visiona su entorno y busca las mejores alternativas para alcanzar sus objetivos.

Si bien considerarse o tener el papel de un líder ya es un comienzo para su desarrollo personal o para su crecimiento como persona. En este entorno al tener muchas responsabilidades y al ser la mano derecha de su grupo de trabajo experimenta momentos, actividades, decisiones o acontecimientos no solo de sí mismo sino de su conjunto que lo ayudan a cuestionar y a tomar nuevas iniciativas, aquí se da un crecimiento en su labor.

Una de las características que evidencian el desarrollo personal al tomar este papel y que lo convierte en buen líder son las siguientes:

• Mejora el rendimiento empresarial.
• Se consiguen los objetivos a corto, medio y largo plazo.
• Mantiene a los empleados contentos y motivados.
• Se favorece el trabajo en equipo.
• Aumentan las ventas de la empresa.
• Incrementan los beneficios de la empresa.
• Se reducen las ausencias en el trabajo y el malestar.
• Mejora el clima empresarial.
• Se mejora la empresa en general y su imagen interior y exterior.
• Mejora la competitividad de la empresa.

Entre otras características que demuestran el éxito personal. Su triunfo dependerá de muchos factores, entre ellos mantener un buen ritmo social con su grupo de trabajo.

El quehacer,  labor, trabajo  o tarea de un buen líder en el ámbito profesional principalmente es enfocar sus metas, guiar a su grupo al éxito y prepararse para el ámbito laboral. Se considera que un buen líder no tendrá pensamientos para descender a ser un empleado sino tener visiones de alto nivel.

Uno de sus “mandamientos” o quehaceres en el ámbito profesional es:

• Dominar su área. Un líder debe ser un experto en su campo. Debe tener experiencia suficiente para hacer proyecciones y enfrentar crisis que posiblemente se preseinten, así como para compartir su conocimiento con otros.
• Confiar en sí mismo. Este normalmente conoce a la perfección sus talentos, pero también está consciente de sus limitaciones.
• Ser íntegro. Tener sentido común. ser coherente en sus pensamientos y acciones, trata a las personas que le rodean con respeto.
• Ser flexible. Este debe ser flexible para modificar la forma de trabajo y las estrategias cuando sea necesario.
• Asumir responsabilidades. Debe asumir las consecuencias, ya sean positivas o negativas, de sus acciones. Asimismo, deja a un lado el orgullo para disculparse cuando es necesario.
• Ser empático. Es decir, mantener una conexión con los miembros del equipo, ponerse a los zapatos de ellos y ofrecer soluciones.
• Planear. Tener la capacidad de armar un plan y establecer estrategias para alcanzar los objetivos.
• Ofrecer retroalimentación. Apuntar los errores y aciertos de su equipo respetuosamente. Tener la disposición de escuchar a miembros de su equipo.

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