Motivación y satisfacción

Las investigaciones de las teorías de la motivación y su relación con la satisfacción laboral tuvieron un gran auge  gracias a los movimientos humanistas, el cual obtuvo una gran fama al comienzo del desarrollo de los experimentos por parte del Psicólogo George Elton Mayo en la empresa “Western Electric Company en Hawthorne” (Garcia, 2016) su experimento consistió en analizar las relaciones que tenían entre las condiciones físicas del lugar de trabajo y el desempeño de los trabajadores, en específico ver el efecto de las condiciones de iluminación en los niveles de producción, cuyos resultados demostraron que los niveles de productividad que exista se debía a la integración social que haya dentro de la empresa y que la motivación monetaria no era efectiva en los empleados, sino que las motivaciones morales y sociales son directamente proporcional  al nivel de la satisfacción de los empleados y esta a su vez en los niveles de productividad .Estas conclusiones dieron comienzo a que  Roethlisberger y Dickson, siguieran con más investigaciones quienes analizaron varios factores de los incentivos económicos. Sus conclusiones demostraron que  incrementar los incentivos de este tipo no aumentaba los niveles de productividad a pesar de los esfuerzos que se daban.  

Lo anterior mencionado fue producto por la inquietud que palpaban los trabajadores por los despidos habituales que se atribuía en esa época de 1929, producto de la Gran Depresión. El motivo giro en torno a la teoría del hombre social, a quien le atribuía que  la búsqueda de satisfacción era basada en la congruencia de tener grupos de trabajo estables.  

Para entender el significado de la motivación es necesario determinar que estos conceptos son establecidos como procesos, que parte de lo fisiológico y psicológico de las personas, que estimula un comportamiento orientado hacia un incentivo o un incentivo. La esencia para comprender este proceso de motivación radica en la comprensión de los siguientes significados; necesidad, impulsos, incentivos y la interacción entre estos.

Schein explica que “la motivación se relaciona con procesos que proporcionan energía y dirección a la que la voluntad que pone la persona para dirigir su conducta esto también depende de situaciones como el género, la edad, el nivel socioeconómico y el ambiente familiar” (Hernandez, 2011).  

“Chiavenato estudioso de las organizaciones, menciona que la motivación es un proceso psicológico básico, define a la motivación como el resultado de la interacción entre el individuo y la situación que lo rodea. Dependiendo de la situación que viva el individuo en ese momento y de cómo la viva, habrá una interacción entre él y la situación que motivará o no al individuo” (Mendez, 2018)

Las necesidades son un factor que asocia al concepto de motivación, y con lo mencionado por Maslow las necesidades es a escases o insuficiencia que la persona percibe en un tiempo determinado. Maslow dividió estas necesidades en una pirámide: “1) las necesidades fisiológicas, 2) las necesidades de seguridad, 3) las necesidades sociales, 4) las necesidades de estima y 5) las necesidades de autorrealización” (Vasquez, 2018). Las necesidades producen impulsos que implica a una acción, la cual está enfocada a conseguir la satisfacción.

La motivación y satisfacción no son sinónimos, pero se encadena entre sí. “La motivación se refiere al comportamiento dirigido a alcanzar metas e incentivos. La satisfacción se deriva del éxito que se alcance con el proceso de motivación. La satisfacción es otra variable importante del proceso de motivación. La satisfacción significa realización personal en virtud de la experiencia provocada por diversas actividades y recompensas” (Herrera, 2011).

Según Ruiz (2000): “La motivación y la satisfacción laboral son fenómenos que incluye diversidad de factores, los cuales son percibidos por los individuos dependiendo de las situaciones y el contexto en los que se desenvuelvan. El resultado de la percepción puede ser positivo o negativo”.

Varias teorías han tratado estudiar el fenómeno de la motivación laboral y su interacción  con el comportamiento del individuo en el ámbito laboral. Campbell, Dunnette, Lawler y Weick clasifican a las teorías en dos niveles: “las teorías enfocadas en el contenido y las teorías centradas en el proceso de la motivación. Las teorías de la primera categoría tratan de identificar los conceptos sustantivos que motivan la actividad, como por ejemplo las necesidades” (Hernandez, 2011). De estas teorías es necesario señalar la siguiente: teoría del establecimiento de metas de Locke.  

“Edwin  Locke sostuvo que las intenciones de trabajar dirigido hacia una meta, se constituye en una fuente muy importante de motivación en el trabajador, otro punto que menciona es que la retroalimentación   lleva a un trabajador a un mejor desempeño dentro de su rol de trabajo”  (Amoros, 2004, pág. 89)

“La teoría de la finalidad o del establecimiento de metas nos habla que es una teoría de la motivación basada en el supuesto de que las personas actúan racional y conscientemente además que las metas específicas y las metas difíciles son las que llevan a un alto desempeño”  (Amoros, 2004, pág. 89)

Según Ruiz (2000): “La idea básica de esta teoría es que las ideas conscientes de un sujeto regulan sus acciones y partiendo de este hecho, esta teoría trata de analizar las relaciones entre metas o intenciones conscientes del sujeto y su nivel de ejecución en la tarea. Locke define las metas como lo que un individuo trata de hacer conscientemente”.

Este autor también tiene en cuenta en su teoría el efecto de los incentivos externos sobre el nivel de ejecución en la tarea. Se admite que si las metas o intenciones son una condición necesaria para la mayoría de las conductas, entonces los incentivos afectarán a dichas conductas sólo si afectan a las metas o intenciones del sujeto, y no tendrán ningún efecto si se dan independientemente de estas metas o intenciones

Las metas pueden tener varias funciones:

• Centran la atención y la acción estando más atentos a la tarea.
• Movilizan la energía y el esfuerzo.
• Aumentan la persistencia
• Ayuda a la elaboración de estrategias.

Según Díaz (2018): “Edwin Locke propuso una teoría para la fijación de metas, en la cual incluyó cinco principios”.

1. La claridad

Sea cual sea meta que te propongas, es fundamental que sea específica. Metas muy generales te llevarán a perder el verdadero propósito y terminarás con poca motivación para continuar. 

1. Establecer retos:

Como regla general, mientras más difícil sea tu objetivo, mayor será la satisfacción que tendrás tras completarlo

1. El compromiso:

Este paso es el más obvio, si has elegido por ti mismo una meta, entonces automáticamente deberías estar comprometido a ella – a menos de que hayas sido forzado a participar, entonces será difícil que te sientas motivado a ser responsable y constante.

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