NADA NOS PASA
Enviado por Kefren01 • 27 de Agosto de 2012 • 1.423 Palabras (6 Páginas) • 292 Visitas
*Desarrollo Arabia *Cordillera Sur
*Desarrollo La Cumbre *Naciones Unidas (Sector Chaparro)
*El Tesorito *Naciones Unidas (Sector Sta. Rosa)
*Florida Sur Alto *Tierra Linda
*Ocho de Diciembre
*San Rafael Sur
OBJETIVO GENERAL
Estimular un avance progresivo en el desarrollo social, físico y espiritual en los jóvenes, mediante la generación de elementos constructivos para favorecer una mejor calidad de vida para que etas personas vivan en convivencia. Como estrategia se emplearan programas pedagógicos, talleres o charlas y desarrollo humano.
Había una vez un rey que tenía una esposa cuyos cabellos parecían de oro, y tan hermosa que en toda la tierra no se habría encontrado otra igual. Cayó enferma y, presintiendo su fin, llamó a su marido y le dijo:
- Si cuando yo muera quieres casarte de nuevo, no escojas a ninguna mujer que sea menos hermosa que yo y que no tenga el cabello de oro. ¡Prométemelo!
El Rey se lo prometió, y ella, cerrando los ojos, murió.
Por largo tiempo al Rey estuvo inconsolable, sin pensar ni por un momento en volverse a casar, hasta que, al fin, dijeron sus consejeros:
- No hay más remedio sino que vuelva a casarse el Rey para que tengamos Reina.
Entonces fueron enviados mensajeros a todas las partes del país, en busca de una novia semejante en belleza a la reina fallecida. Pero en todo el mundo no había otra, y, aunque se hubieran encontrado una, no tendría los cabellos de oro. Por eso, los mensajeros tuvieron que regresar a la Corte con las manos vacías.
Pero he aquí que el Rey tenía una sobrina que era el vivo retrato de su esposa muerta, tan hermosa como ella y con la misma cabellera de oro. La contempló un día el Rey, y viéndola en todo igual a su difunta esposa, de repente se sintió enamorado de ella. Dijo pues a sus consejeros:
- Me casaré con mi sobrina, ya que sobrina, ya que es el retrato de mi esposa muerta; de otra manera, no encontraría una novia que se le pareciese.
La joven al conocer la intención de su tío se horrorizó, pues estaba totalmente enamorada de un noble joven. Así es que pensó en la manera de hacerlo desistir de su desatinada decisión y le dijo:
- Antes de satisfacer vuestro deseo, es preciso que me regaléis tres vestidos: uno, dorado como el sol; otro, plateado como la luna, y el tercero, brillante como las estrellas. Además quiero un abrigo hecho de mil pieles distintas; y ha de tener un pedacito de la piel de cada uno de los animales de vuestro reino.
Al decir esto pensaba:
“Es absolutamente imposible conseguir todo eso, y, así, conseguiré que mi tío renuncie a su idea”. Pero el Rey se mantuvo obstinado, y las doncellas más habilidosas del país hubieron de tejer las tres telas y confeccionar un vestido dorado como el sol, otro plateado como la luna y otro brillante como las estrellas; y los cazadores tuvieron que capturar los animales de todo el reino y quitarles un pedazo de piel, y con los trocitos fue hecho un abrigo de mil pieles distintas. Cuando ya todo estuvo dispuesto, el Rey mandó llamar a su sobrina y, le presentó los objetos exigidos por ella, y le dijo:
- Mañana será nuestra boda.
Al comprender la doncella que no había ninguna esperanza de hacer cambiar la decisión de la decisión de su tío, resolvió huir. Por
...