Transparencia en la gestión publica.

Transparencia en la Gestión Pública

Alguien hace trampa en un examen y decimos: “es humano”. Otro defrauda al fisco y explicamos: “es humano”. Llamamos “humanos” solo a nuestros vicios y a nuestros errores. Pero humana es la inteligencia que hace del hombre un buscador de la verdad, y ésta agobia no cuando vamos en su busca, si no cuando huimos de ella. 

Porque el hombre tiende a mentir y a equivocarse, se inventó la contabilidad. Porque el hombre público, como todos, tiende a mentir y a equivocarse, aunque con un radio de afectación mucho mayor, se inventó la “contabilidad social”, que representa una primera aproximación a la palabra inglesa accountability. “Rendición de cuentas” 

En la constitución política de Colombia que es norma de normas y como principio fundamental, fundada en el respeto de la dignidad humana y en la prevalencia del interés general, establece como fines esenciales promover y garantizar la prosperidad social basada en derechos y deberes que integran decisiones que afecten en el ámbito político, económico cultural y administrativo. Es por eso que como ciudadanos nos vemos en la obligación de estar atentos en la manera como se manejan los recursos en los municipios o ciudades, los cuales nos afectan ya que con estos se desarrolla la calidad de vida de los ciudadanos.

La contratación pública podemos definirla como el conjunto de procesos o actividades a través de los cuales las entidades estatales manejan en gran volumen los recursos del Estado, esto con el fin de adquirir bienes y servicios, dando paso así a la realización de los fines del Estado. Con tal fin, la legislación colombiana ha desarrollado una serie de principios que son la base a través de los cuales debe regirse la contratación estatal y que son de obligatorio cumplimiento tanto para la parte contratante como para el contratista, lo anterior sin perjuicio de la aplicación de los postulados de la función administrativa.

La transparencia suele resultar un requisito imprescindible a la hora de evaluar la gestión pública realizada por un determinado órgano por parte de la sociedad. Es en el encuentro entre la sociedad y los gestores públicos donde se sitúan los organismos de control, que desde una posición de independencia, objetividad y capacidad técnica, contribuye a que la opinión social sobre la actividad del sector público aparezca adecuadamente fundamentada, con independencia del control del Poder Judicial en relación con el examen de dicha gestión a la legalidad vigente.

En esta contribución a la valoración social de la gestión pública se encuentra la razón de ser y la legitimidad que goza de reconocimiento constitucional; pero a su vez en ella radica la responsabilidad asumida la institución que ha de llevar a cabo su actividad con objetividad e independencia a fin de obtener el adecuado reconocimiento social, reconocimiento que permitirá conciliar la legitimidad de origen con la de ejercicio.

Debido a la falta de claridad en cuanto a la responsabilidad en casi cualquier nivel de gobierno no existe un rendimiento acorde con las exigencias de la sociedad. Rendir cuentas, in sensu stricto, es la obligación del hombre público de dar todos los elementos de valor por lo que se le está compensando, así como la obligación de rendir en compromisos los resultados específicos sin sorpresas. En otras palabras, el hombre público de todos los niveles es responsable de mantenerse en lo que dice y ganarse su manutención.

Para hablar de transparencia es de vital importancia tener claro que el concepto de transparencia pública redunda en la generación de condiciones de confianza y franqueza entre los/as que administran la esfera de lo público, basado en competencias y reglas, acceso a la información pública, rendición de cuentas, participación y control ciudadano.

Se cree entonces que el trabajo de la política consiste en saber mentir muy bien y en saber fingir muy bien. Hay una perversidad del poder que se parece mucho a la perversidad de los novelistas, que siempre están trastocando y adulterando la realidad.

La transparencia pública tiene determinadas condiciones que le dan vida hacia el municipio dentro de las cuales tenemos: acceso a la información, rendición de cuentas, cumplimiento de las reglas, y participación.

Los gobiernos locales tienen la necesidad y la obligación de informar y rendir cuentas a la opinión pública, porque no solo deben ser buenos administradores de los recursos sino demostrarlo.

Las autoridades deben conquistar la credibilidad ciudadana con sus acciones y actitudes guiadas por la franqueza, el cultivo de la honestidad en el proceso cotidiano de servir al bien común y así demostrar que no existe corrupción ni mal manejo de la cosa pública, para educar a la población en la responsabilidad que tienen la garantía del buen manejo de la cosa pública para resolver el problema de los mecanismos que contribuyen a la corrupción en cualquier nivel de funcionarios, así los mecanismos de transparencia municipal resultan un sistema de información eficiente , control de la discrecionalidad de los funcionarios públicos, rendición de cuentas y participación ciudadana, y es así que se puede hablar de una política de transparencia municipal que será entonces el conjunto de lineamientos , criterios y procedimientos hacia adentro y hacia fuera de la municipalidad a seguir para generar condiciones de confianza y franqueza entre el gobierno local y la ciudadanía, basándose en las competencias y reglas, acceso a la información pública , rendición de cuentas, participación y control ciudadano basado en un sistema de información municipal que para los ciudadanos es un servicio clave que el gobierno debe privilegiar, porque ello es determinante para que exista una buena relación con la comunidad, basada en la confianza tanto que este sistema.

La rendición de cuentas es otro pilar de la transparencia está muy relacionado con el de acceso a la información a tal punto que no podría decirse que se está rindiendo cuentas si a la vez no se tuviera oportunidad de verificar los informes que se nos entregan.

Si se habla de transparencia en la función pública, la rendición de cuentas es el deber de y la obligación de los funcionarios de responder por sus decisiones y las consecuencias que de estas se generan, sobre las actividades realizadas y sus resultados y por el uso y destino de los recursos.

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