Un Pavo Real En El Mundo De Los Pinguinos

UN PAVO REAL EN EL REINO DE LOS PINGUINOS

Una obra que aunque corta, narrada en forma de fabula, nos deja entrever los anhelos que tienen las personas que aprenden en las instituciones como el SENA y como se enfrentan al mundo laboral de las diferentes empresas; pero que con la constancia y dedicación pueden llegar a sobresalir en lo que hacen, rompiendo paradigmas y esquemas predeterminados, claro sin llegar a chocar.

Todos somos actores de cambios y el mundo global nos enfrenta a nuevos retos de carácter tecnológico, procedimental y operacional pero la virtud no está en hacernos notar sino tratar que el entorno adopte estas nuevas tendencias, a fin de lograr la armonía y el trabajo en grupo sin desconocer las virtudes individuales que aunadas a las de los demás miembros del equipo nos dan como resultado el éxito empresarial.

Nosotros los hoy aprendices debemos de ser un “Pedro”, personas sin miedo a la diferencia, la comodidad y el servilismo con nuestros jefes. Labrándonos un camino innovando, retroalimentándonos de cada una de las experiencias del diario vivir, permitiendo que las demás personas sean “Helenas”, “Eduardos”, “migueles”, y “Saras” todos trabajando por un fin común pero con la diferencia que caracteriza a cada uno de acuerdo con sus habilidades, destrezas.

Nunca debemos de dejar que la necesidad del trabajo no obligue a abandonar las características individuales, a dejar la innovación, a tener miedo al reto, a plantear nuevas formas para el hacer, a romper las cadenas tradicionales, a sumar el valor agregado a cada una de nuestras actuaciones aportando siempre nuestro granito de arena. Debemos imponernos no con la altivez del que “sabe más” sino del que tienes ideas nuevas que contribuye con sus compañeros sin caer en la lambisconería.

Desafortunadamente el reino de los pingüinos está presente en la mayoría de nuestras empresas, de nuestros jefes y de nuestros compañeros, que como algunos de nosotros nos conformamos con el hecho de que “como a mí me pagan los mismo sin hacer más para que me voy a matar”; es pues este un nuevo reto no para plantearlo acá en el papel sino para ponerlo en la practica en cada una de nuestras actuaciones y es dependiendo de cada uno de nosotros, un éxito o un fracaso si tenemos la conciencia necesaria para hacernos respetar y valer por cada una de nuestras actuaciones no solo en el campo laboral sino en la vida personal.

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