Analizabilidad - Elizabeth Zetzell

3. Analizabilidad

1.-  El concepto de analizabilidad:

El punto de partida de Elizabeth Zetzel es que las relaciones objeto se establecen antes de la situación edípica y son de naturaleza diádica (1). En la etapa preedípica del desarrollo, pues el niño establece una relación objetar bipersonal con la madre y con el padre, que son independientes entre sí. Consolidar este tipo de vínculo es un requisito indispensable para que se pueda enfrentar después la relación triangular del complejo de Edipo. Lo que falla por definición en la neurótico es justamente la relación edípica, que es la que se alcanza por vía regresiva en el análisis como neurosis de transferencia. 

Porque para Zetzel la neurosis de transferencias reproduce el complejo de Edipo, mientras que la alianza terapéutica es pregenital y diádica.

El establecimiento de firmes relaciones de naturaleza diádica con la madre y el padre independientemente crea las condiciones para plantear y, en el mejor de los casos, resolver la situación edípica, sobre la base de la confianza básica de Ericsson (2), ya que equivale a la posibilidad de distinguir realidad interna y realidad externa. Como se comprende, distinguir realidad interna y realidad externa importa tanto en el tratamiento psicoanalítico como deslindar la neurosis de transferencia de la alianza terapéutica. Es en este sentido que la doctora Zetzel establece un circulo entre sus ideas y la confianza básica, así como también  con el concepto de posición depresiva de Melanie Klein (3).

Las personas que no pudieron cumplir estos decisivos pasos del desarrollo serán inanalizables, en cuanto tenderán continuamente a confundir al analista como persona real con las imagos sobre él transferidas.

2.- La buena histérica:

Zetzel distingue cuatro formar clínicas de histeria femenina en punto a la analizabilidad.

Grupo 1: Corresponde a la buena histérica, la verdadera histérica que se presenta lista para el análisis. Estas mujeres, personas, se deciden por el análisis cuando comprenden, de pronto, que sus dificultades están dentro de ellas mismas y no afuera.

Grupo 2: Es el de la buena histérica potencial. Se trata de un grupo clínico más abigarrado que el anterior, con síntomas dispares. El problema mayor de este grupo en cuando al análisis es el período de comienzo, en que pueden sobrevenir regresiones intensas que impiden establecer la alianza de trabajo, o de una huida hacia la salud que lleve a una brusca interrupción.

Grupo 3: Ya pertenece a la so called good hysteric y solo puede ser analizable a través de un tratamiento largo y dificultoso. Se trata de caracteropatías depresivas que nunca pudieron movilizar sus recursos o reservas  ante cada crisis vital que debieron enfrentar.  Si estas pacientes entran en análisis muestran bien pronto su estructura depresiva, con una fuerte dependencia y pasividad frente al analista. el proceso analítico se hace difícil de manejar, en cuanto la paciente no logra discriminar entre la alianza de trabajo y la neurosis de transferencia. La etapa final de análisis lleva a serios problemas, cuya consecuencia es el análisis interminable.

grupo 4: Cuadros floridos con acusados rasgos de apariencia genital, demuestran en el tratamiento, sin embargo, una notoria incapacidad para reconocer y tolerar una situación triangular auténtica. La transferencia asume precozmente, con frecuencia, un tono de intensa sexualización que apoya en un deseo tenaz obtener una satisfacción real. Incapaces de distinguir la realidad interna de la externa, estas histéricas hacen imposible la alianza terapéutica, base para que se instaure una neurosis de transferencia analizable.

3.- El obsesivo analizable:

Zetzel sostiene que el neurótico obsesivo analizable no presenta dificultades para entrar en la situación analítica, pero si para desarrollar una neurosis de transferencia franca y analizable durante el primer tiempo de análisis. En otras palabras, la neurosis obsesiva tiene dificultades con el proceso analítico y la histeria con la situación analítica. Así como los síntomas histéricos no son una prueba suficiente de analizabilidad, tampoco podemos basar nuestra indicación terapéutica en la presencia de síntomas obsesivos. El paciente obsesivo analizable muestra siempre que alcanzó a establecer una genuina relación independiente (diádica) con cada padre, y que sus problemas derivan del irresuelto conflicto triangular edípico.

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