Aumentar la Calidad de vida de pacientes con Obesidad grado 2

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Alumnas:

Porras Ferrer María Mercedes

Romero Reyes Daniela

Tutor académico:

Centro: Hospital Regional de Alta Especialidad

Tutor del Centro colaborador: Lic. Alejandro Martínez del Alto

Fechas de realización de prácticas:

“Programa de intervención Cognitivo Conductual para pacientes con Obesidad grado II”

Meta.

Aumentar la Calidad de vida de pacientes con Obesidad grado II que acuden al Hospital Regional de Alta Especialidad  mediante la aplicación de una intervención psicológica  grupal.

Objetivo general.

Identificar los riesgos que promueven hábitos de vida desfavorables para el paciente con Obesidad grado II promoviendo el apego al tratamiento e incrementando la calidad de vida.

Objetivos específicos.

• Fomentar la motivación en el paciente para el cambio hacia un comportamiento saludable.
• Propiciar la expresión de sus sentimientos y emociones para prevenir que repercutan negativamente en su peso.
• Confrontar sus creencias y conductas para lograr una restructuración cognitiva que promueva pensamientos y conductas adaptativas.

Justificación.

La Organización Mundial de la Salud (OMS, 2012), define a la obesidad y al sobrepeso como una acumulación excesiva o anormal de grasa que puede ser perjudicial para la salud, en donde la causa fundamental de su aparición yace en un desequilibrio energético entre las calorías consumidas y gastadas. De esta manera, cuando la obesidad fue considerada como un problema de salud, surgió la necesidad de establecer parámetros que permitieran determinar y clasificar el exceso de grasa en las personas, así como para determinar los severos daños que causan a la salud. El 65% de la población mundial reside en países donde las principales muertes son originadas por personas que padecen sobrepeso y obesidad.

Desde hace varios años la obesidad ha dejado de ser no sólo una preocupación estética y un asunto privado se ha convertido en un problema de salud pública. Las cifras reportadas por algunas organizaciones internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) han alertado sobre la creciente prevalencia de la obesidad en México y sus implicaciones para la salud de millones de personas.

Algunas de las enfermedades relacionadas con la Obesidad son Diabetes tipo II, padecimientos cardiovasculares como Hipertensión e Infartos cardiacos, algunos tipos de Cáncer, enfermedades de la Vesícula, Depresión, Desórdenes músculo-esqueléticos y síntomas respiratorios.

En México la desnutrición afecta a 1.4 de las mujeres y 1.5 de los hombres adultos de 20 años de edad o más, por su parte 1 de 4 mujeres y cerca de 1 de cada 3 hombres tienen un peso adecuado, el promedio nacional con peso adecuado es 29.2% entre los adultos mayores de 20 años.

Las cifras de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006 indican que cerca de 69.4% de la población mexicana adulta mayor de 20 años de edad tiene exceso de peso corporal: 40% sufre pre-obesidad, 29.4% obesidad.

De acuerdo a los resultados de la Ensaut 2006, se puede apreciar que Tamaulipas representa una de las Entidades Federativas con mayor porcentaje de población masculina con obesidad siendo éste el 32.1%.

Al analizar la problemática antes descrita es evidente la necesidad de un mayor compromiso por parte de los profesionales de Salud para generar estrategias integrales que conlleven a mejorar la calidad de vida de las personas, aumentando hábitos saludables  y para ello se ha observado que el Tratamiento psicológico de la Obesidad favorece en lograr estos objetivos.

El Objetivo de cualquier intervención para el tratamiento de la obesidad debe ir más allá que la mera reducción de peso. Es imprescindible la introducción de distintas técnicas cuyo principal objetivo sea la modificación de los hábitos de alimentación y que permitan una mayor adhesión al tratamiento  y un cambio de actitud ante el problema. Las técnicas cognitivo- conductuales se han usado como apoyo al cambio de hábitos y comportamientos.

La mayor parte de los enfoques terapéuticos son susceptibles de hacerse tanto en grupo como individualmente, no obstante, la comunicación de experiencias resulta en mejores resultados en tratamientos de grupo, aunque resulta necesario y conveniente hacer encuadres grupales diferentes para determinadas conductas, como alimentación y ejercicio, al tener objetivos, pautas y procedimientos muy semejantes.

El planteamiento global del tratamiento se centra en cambiar el estilo de vida y este cambio está dirigido preferentemente a tres aspectos: la conducta alimentaria, propiamente dicha, la modificación de la vida sedentaria por un aumento regular de ejercicio físico y la modificación de los factores de la vida emocional que repercuten en la obesidad.

Fundamentos teóricos

La nutrición es el proceso a través del cual el organismo obtiene de los alimentos la energía y nutrimentos necesarios para el sostenimiento de sus funciones vitales. La ingestión inadecuada de alimentos en cantidad o calidad y el deficiente funcionamiento del proceso, ocasiona una mala nutrición que puede ser por déficit (desnutrición) o por consumo excesivo (obesidad o sobrepeso). Una buena nutrición se consigue con un adecuado consumo de alimentos y si a eso se agrega un estilo de vida activo, se obtiene como consecuencia una buena salud.

El consumo de alimentos sanos y adecuados retrasa la aparición e incluso previene enfermedades graves como el Cáncer, la Diabetes Mellitus, las enfermedades del corazón y la mejora de su calidad de vida. En cambio el sobrepeso y la obesidad se les asocia con un aumento con el riesgo de sufrir enfermedades crónicas no transmisibles.

La obesidad es una enfermedad crónica que se reconoce como una epidemia mundial. Está presente en países desarrollados y no desarrollados. Se presenta tanto en niños como en adultos y ha ido remplazando problemas de salud pública como la desnutrición y las enfermedades infecciosas.

Epidemiología

Según las últimas cifras que ha registrado la OMS, en el 2008, había en el mundo 1,400 millones de adultos de más de 20 años con sobrepeso, y más de 200 millones de hombres y aproximadamente 300 millones de mujeres con obesidad en el mundo. Reportando que las personas obesas desde el año de 1980 se han duplicado a la actualidad.

Situándonos en nuestro país, de acuerdo a los datos que brindó la Secretaría de Salud (SSA, 2010), México ocupa el segundo lugar de prevalencia de obesidad a nivel mundial, antecediendo a nuestro país vecino Estados Unidos de América. Alrededor del 70% de la población mexicana adulta padece de sobrepeso u obesidad, en donde el 66.7% son hombres y 71.9% son mujeres, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSA, 2006). La prevalencia en México combinada de sobrepeso y obesidad en niños de 5 a 11 años, fue aproximadamente de 26% para ambos sexos, en donde el 26.8% corresponde a las niñas y el 25.9% a los niños, lo que representan cerca de 4,158,800 niños en edad escolar con sobrepeso y obesidad. Ahora bien, en los adolescentes, uno de cada tres hombres o mujeres tienen sobrepeso u obesidad, lo que representan 5,757,400 adolescentes en el país entre la edad de 12 a 19 años que padecen este problema.

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