Crisis en la Adolescencia

Crisis en la Adolescencia.

Es universalmente sabido que durante la adolescencia la persona pasa por constantes cambios a nivel psicológico, físico y  social que no solo van a conformar su personalidad, sino que además direccionarán el desarrollo de distintas áreas de su vida y la conformación de una identidad propia. En la búsqueda de adaptación a estos cambios, el adolescente pasa por situaciones o vivencias que no solo le producen ansiedad sino que además pueden producirle conflictos en su estado de ánimo y en su forma de percibir la vida. Además cabe destacar que no es sencillo lidiar con el cambio que supone el ir desde la infancia a la adolescencia, ya que el adolescente debe confrontar la idea de lo que creía que era a lo que se está convirtiendo. Es en esta etapa en donde se forma en el adolescente su sentido de identidad y su personalidad, pero solo a partir de la crisis.

Cuando hablamos de crisis, en muchas ocasiones se viene a la cabeza un suceso negativo, desconsolador y difícil de resolver. Lo interesante es que pese a que la crisis conlleve todo eso, es además una forma óptima de adaptación. La crisis para muchas ciencias de la salud es un indicador de salud y de adaptación, ya que involucra el esfuerzo por superar situaciones adversas. Es en sí la forma en la que a las malas aprendemos a lidiar con situaciones y nos adaptamos a los problemas. Desde la psicología, la crisis no es nada más que una situación crucial del desarrollo de la persona que le permite estructurar su aparato psíquico y su personalidad. La crisis permite a las personas madurar y superar los problemas. Eso sí, es importante saber que si bien la crisis normal de la adolescencia es de cierta forma positiva en la adaptación de la persona, puede ser en muchos casos perjudicial, si se está hablando de una crisis clínica. Es así que es de mucha importancia reconocer los tipos de crisis por los que están pasando los adolescente, para estar al tanto de si es algo por el que pueden lidiar por sí mismo. Esto debido a que la crisis puede tener ya sea un carácter normativo o un carácter netamente clínico.  Al hablar de una crisis normativa, se hace referencia a la crisis propia del desarrollo, en donde  la persona si bien pasa por conflictos, va fortaleciendo su yo o su ego pese a las ansiedades por las que pueda estar pasando o las situaciones adversas. Este tipo de crisis entonces impulsa a la maduración. Por otro lado, está la crisis clínica que más que nada es de carácter patológico, que no solo perjudica el desarrollo de la persona sino que también la aísla de su entorno social.    

Cabe decir que la crisis normativa es la propia de esta etapa evolutiva y la que permite el desarrollo óptimo de la persona. Es así que es esta crisis en la que nos centraremos en este apartado. Para comprender un poco sobre esta crisis, hay que entender cómo surgen. Existen dos doctrinas que buscan explicar de alguna manera los cambios que se producen en la adolescencia y que parten de los cambios psicológicos y sociales por los que atraviesa el adolescente. La primera doctrina es la psicoanalítica, y ésta más que nada se centra en el desarrollo psicosexual del adolescente. Hay que entender que en la etapa inicial de la adolescencia, es decir la pubertad, surge una energía psíquica llamada pulsión que moviliza a la persona a satisfacer necesidades, necesidades en mucho de los casos de carácter sexual. Esta pulsión desequilibra a la persona, ya que despierta el deseo sexual. Este deseo sexual movilizará a la persona para que rompa sus lazos afectivos con su familia, ya que buscará la satisfacción afectiva y sexual en su medio social. Es a partir de este momento en donde el adolescente deja de ser dependiente de los padres para buscar de cierta manera su independencia y es en este momento en donde surge una crisis. Por otro lado, la doctrina sociopsicológica explica que además de los cambios internos por los que debe de pasar el adolescente, se le suman las presiones externas y las situaciones que le son difícil de controlar. Normalmente es en este momento en donde entran más en conflicto ya que no solo deben adaptarse a ellos mismos, sino además a las nuevas exigencias que le impone su grupo social o sociedad, a sus expectativas y a los papeles que ésta intenta darle. Es en esta época en donde este conflicto le da la oportunidad de elegir verdaderamente quién quiere ser y de diferenciarse de las demás personas. De esta manera surge la crisis, ya que el adolescente tiene que enfrentarse a su independencia de los demás y buscar su razón de ser y su lugar en la vida.  

 Una de las crisis más importante que se da en la adolescencia es la crisis de la identidad, una crisis que surge de la búsqueda del adolescente de su identidad que se traduce en una conflicto en el que el adolescente no solo busca saber quién es sino además busca reconocer su lugar en el mundo y  su propósito de vida. Es propia de esta etapa evolutiva y es la base des autodescubrimiento y de conformación de la personalidad de la persona. Es una crisis que surge del cambio brusco de ser niño a ser casi un adulto. Este cambio de cierta forma hace que la persona no se sienta ella misma, se sienta despersonalizada y se perciba a sí misma como alguien extraño. Además a esto se le añade el hecho de que cambia su forma de sentir y de percibir su realidad. La persona se siente extraña tanto consigo misma como con su entorno. Este conflicto encamina a la persona a cuestionarse a sí mismo quién es, a descubrirse a sí misma y a tomar conciencia de que no es como las demás personas. Esto ocurre en un proceso progresivo que el adolescente tiene que atravesar.

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