DESARROLLO EMOCIONAL PRIMITIVO

En la lectura del siguiente ensayo en autor Donald Winnicott quien fue psicoanalista y un pediatra inglés, a lo largo de su carrera desarrolla un pensamiento propio de gran relevancia en el ámbito psicoanalítico, a partir de diversos conceptos provenientes tanto de la influencia kleiniana como de posturas más ortodoxas dentro de la obra psicoanalítica, nos presenta un planteamiento personal sobre sus propias teorías la cual una de ellas es la del desarrollo que ocupa de la primera infancia antes del nacimiento y por consecuencia una gran parte de su obra consiste en la exploración verbal de lo que en la historia del individuo es pre verbal, menciona que el desarrollo emocional primitivo es algo desconocido para él, estudiando las fuentes que tenía, labores clínicos al  igual que escritos publicados por analistas y sus ideas.  El autor comienza describiendo los diferentes tipos de psicoanálisis en donde resulta posible realizar el análisis a un paciente tomando en cuenta las relaciones personales que tiene con la gente, al igual que con las fantasías conscientes e inconscientes que apoyan y complican estas relaciones entre las personas.

Los primeros procesos del desarrollo son tres la integración, la personalización y la apreciación del tiempo -espacio y de las demás propiedades de la realidad, en resumen podemos hablar de la comprensión. La integración comienza en el mismo principio de la vida, pero en nuestra labor jamás podemos darla por sentada. Tenemos que tenerla en cuenta y vigilar sus fluctuaciones. La tendencia a integrarse se ve construida por dos series de experiencias, una de ellas es la técnica de los cuidados infantiles en virtud en donde el niño es protegido del frío, bañado, acurrucado, nombrado y, además las agudas experiencias instintivas que tienden a reunir la personalidad en un todo partiendo desde dentro.

Durante las primeras horas de la vida son muchos los niños que ya están bien metidos en la vía de la integración durante ciertos períodos o ciertas actividades. En otros casos en el proceso se sufre un retraso, o se producen contratiempos, debido a la inhibición precoz del ataque codicioso. En la vida del niño normal hay largos períodos de tiempo en los cuales al niño no le importa ser una serie de numerosos fragmentos o un ser global, o no le importa si vive en el rostro de su madre o en su propio cuerpo siempre y cuando alguna que otra vez se reúnan los fragmentos y sienta que es algo. A veces se da que cuando está sano, el individuo está siempre integrado, así como que vive en su propio cuerpo, siendo capaz de sentir que el mundo es real. Sin embargo, hay muchos estados de salud mental que tienen una cualidad sintomática y se ven cargados con el miedo o la negación de la locura, de la posibilidad innata en todo ser humano de verse no integrado, despersonalizado, y de sentir que el mundo es irreal, es la falta de sueño suficiente la que produce estos estados en cualquier persona.

Por otra parte y de igual importancia en la integración está el desarrollo del sentimiento de que la persona de uno se halla en el cuerpo propio. También aquí es la experiencia instintiva y las repetidas y tranquilas experiencias del cuidado corporal lo que gradualmente va construyendo lo que podríamos llamar “personalización satisfactoria” y al igual que en la desintegración, también los fenómenos de despersonalización propios de la psicosis se relacionan con primitivos retrasos de la personalización. La despersonalización es algo común en los adultos y los niños ya que a menudo se ocultan en lo que puede ser por ejemplo lo que a veces llamamos “sueño profundo” y en los ataques de postración que van acompañados por una palidez cadavérica, diciendo que cierta persona está ausente.

Un problema que está relacionado con el de la personalización es el de los compañeros imaginarios de la niñez, ya que no se trata de simples construcciones de la fantasía del  niño sino también en el estudio del futuro de estos compañeros imaginarios, aplicando el análisis, demuestra que a veces se trata de otros seres de un tipo sumamente primitivo. Me es imposible formular aquí un claro planteamiento de lo que quiero decir, aparte de que no es éste el lugar de explicarles este detalle. Sin embargo, diré que esta creación, muy primitiva y mágica, de compañeros imaginarios se emplea fácilmente a modo de defensa, ya que mágicamente deja a un lado todas las angustias asociadas con la incorporación, digestión, retención y expulsión.

Disociación, en la psicología se conoce al término disociación como una amplia variedad de experiencias que pueden ir desde un leve distanciamiento del ambiente circundante hasta distanciamientos más graves de la experiencia física y emocional. El autor menciona que de la no integración surge la disociación pero afortunadamente la disociación puede ser estudiada en sus formas iniciales o naturales, podemos decir que de la no integración nacen una serie de estados a los que luego se llamará “disociaciones” que aparecen debido a que la integración es incompleta o parcial, por ejemplo existen los estados de tranquilidad y los de excitación y es que de un niño no se puede decir que al principio él sea consciente de que mientras siente una serie de cosas en la cuna o que disfruta del estímulo que su piel recibe cuando lo bañan, besan o abrazan él es el mismo niño que las veces donde chilla reclamando comida, viéndose poseído por una necesidad apremiante de agarrar algo y destruirlo a menos que le controlen con leche o lo que él desea. Esto quiere decir que al principio el pequeño no sabe que la madre que él mismo está edificando a través de sus experiencias tranquilas es lo mismo que la potencia que se halla detrás de los pechos que pretende destruir.

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