EQUIDAD DE GENERO

JUSTIFICACIÓN

La siguiente investigación se fundamenta en la perspectiva de equidad de género, enfocado a la mujer, sus principios y derechos constitucionales que se hacen valer. La mujer juega un papel muy importante dentro de la sociedad y este estudio presenta a detalle los derechos que se han obtenido a favor durante años.

INTRODUCCIÓN

A través de los años y con múltiples esfuerzos hoy en día podemos presumir que en México se ha impulsado la equidad de género. La participación de las mujeres en varios sectores como empresariales, económicos, políticos y culturales al interior y exterior de la república cuentan con una participación activa de las mujeres, representando así a nuestro país con un importante porcentaje en los ámbitos ya mencionados. Es un proceso de consolidación democrática que ha vivido México a raíz de un arduo trabajo, dejando de lado las ideas machistas donde solo los hombres podían ocupar los puestos importantes dentro y fuera de nuestro país.

La democracia en nuestro país parte de la situación real en que vive la población, en ella se encuentran los aspectos formales como el sistema político, las instituciones, la promoción de valores democráticos, el respeto, la aplicación de las leyes y el de los derechos humanos. Que a decir verdad, la democracia en nuestro país es un término que pocos conocemos y sobre todo los políticos que la manejan a su antojo, dejando mucho que pensar sobre lo que realmente significa.

Nuestra constitución mexicana nos ampara en un artículo que hace algún tiempo fue reformado:

Artículo 4°. ...

El varón y la mujer son iguales ante la ley. Esta deberá establecer mecanismos e instituciones suficientes para garantizar la igualdad y promover la equidad de género, especialmente en el caso de mujeres trabajadoras y jefas de familia, además de proteger la organización y el desarrollo de la familia.

Como vemos, la Constitución Mexicana, leyes y algunas instituciones a nivel mundial promueven la equidad, amparando así nuestros derechos.

Por otro lado, en México, se publicó en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en el 2007. Así que confiamos en que gracias a esto se tenga una convivencia digna dentro de las escuelas, ya sean públicas o particulares. La Secretaría de Educación Pública también se encarga de varios proyectos a nivel nacional donde se promueve la equidad tanto a niños, adolescentes, jóvenes y docentes, llevando campañas de sensibilización para construir un mejor mañana, enrolando a mujeres y hombres por igual para que dejen de lado la violencia y discriminación racial.

DESARROLLO

Antes que nada entendamos que equidad es un valor de carácter social y que trata de la constante búsqueda en la justicia social con el único fin de buscar que todas las personas tengan condiciones por igual, es decir, que se les trate de la misma manera y tengan oportunidades de crecimiento sin discriminación racial, de género, preferencia sexual o de religión.

Equidad de género significa que mujeres y hombres independientemente de sus gustos o diferencias tienen derecho a acceder a cualquier beneficio de los bienes y servicios que la sociedad proporciona, así como a tomar decisiones y participar por el bien de la misma.

Cuando hablamos de equidad nos referimos al valor social que tiene como fin velar por la justicia para que todos tengamos una vida digna, al igual que un empleo, acceso a la salud, vivienda, estudio, a programas sociales que nos beneficien, etc.

Por su parte el género se caracteriza por lo social, psicológico, político y cultural, que se asignan directamente a las personas y estas a su vez lo van modificando.

Sin duda alguna la mujer ha sido el blanco de discriminación, menosprecio y falta credibilidad durante siglos, restando valor a su trabajo e inteligencia. Falta recordar que Sor Juana Inés de la Cruz, tuvo que refugiarse en un convento para no ser reprimida y tener el tiempo de escribir y estudiar a escondidas. Claro! Si la vida de las mujeres hace años atrás hubiese sido como la de Juana, tal vez México sería dominado por mujeres ansiosas del saber, cultas y listas para demostrar su importancia dentro de una sociedad. Sin embargo, sabemos que poco a poco se ha ganado un lugar, respeto y valor dentro de la sociedad y todo ello gracias a que poco a poco se nos reconocen y hacen valer nuestros derechos dentro y fuera de nuestro país. De la misma forma en que se han ido tomando lugares y empleos que antes solo eran ocupados por los varones.

Sabemos que la consolidación de la democracia en nuestro país depende en gran parte a la participación activa de las mujeres y más porque hoy en día somos madres, padres y amas de casa a la vez. Para llevar a cabo el fortalecimiento y promoción de dicha democracia es necesario dar pie a los valores democráticos como la libertad, tolerancia, justicia y equidad, impulsándolos desde el hogar haciendo consciencia de su importancia para la vida dentro de la sociedad ya que más del cincuenta por ciento de la población está formado por mujeres. Esto nos hace pensar que a ese paso las mujeres habremos alcanzado un lugar significativo en todos los ámbitos dentro de algunos años.

Sabemos que es un largo camino por recorrer y que resulta de suma importancia el impacto que ocasiona a los hombres el darle un lugar importante a la mujer dentro de la sociedad con la finalidad de construir sociedades más justas y dignas ya que tenemos una historia que nos muestra la discriminación que se ha hecho a las mujeres, sobre todo a aquellas que tienen la desdicha de vivir en países donde siempre se les ha visto como un adorno del hogar prohibiéndoles salir más que lo necesario, cubrirse la cara y utilizar vestimentas largas. Lugares donde se ha llegado al extremo de asesinarlas por el simple hecho de desobedecer al marido y creerse traicionado, mismos lugares donde las mujeres son atropelladas de manera brutal cuando siendo aún niñas las cosen de los labios vaginales a fin de que no sientan placer sexual el día que consuman su matrimonio. Lo malo de esto es que las mismas mujeres al crecer dentro de esta “cultura machista”, curiosamente son quienes juzgan y están a favor de estas prácticas al creerse sujeto de pertenencia del marido. Saben y están dispuestas que al casarse dependerán totalmente de lo que ellos digan o dispongan.

Superar estos problemas es una labor que exige un nivel de trabajo muy arduo, es luchar contra la religión e ideales. En el mejor de los casos debemos atacar desde lo

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