Ensayo 1 De Segundo Semesre

PRESENTACIÓN

Etzioni, dice que la racionalidad de la organización y la felicidad humana corren de la mano. También que los trabajadores son impulsados por motivos económicos, y a la organización se le caracteriza por la división del trabajo. Nuestra sociedad es una sociedad organizacional. Nacemos dentro de organizaciones, somos educados por ellas y nosotros consumimos gran parte de nuestras vidas trabajando para organizaciones.

DESARROLLO

Para medir la felicidad, lo primero es definirla.

La felicidad ha sido definida por muchos autores, por lo tanto es posible ofrecer otras muchas definiciones:

• Ser feliz es autorrealizarse, alcanzar las metas propias de un ser humano. Aristóteles.

• Ser feliz es ser autosuficiente, valerse por sí mismo sin depender de nada ni de nadie (cinismo y estoicismo).

• Ser feliz es experimentar placer intelectual y físico y conseguir evitar el sufrimiento mental y físico (hedonismo). Epicuro.

• Autorrealización: También llamada felicidad, se sostiene por la motivación que produce nuestro trabajo constante y continuado. Gracias a las capacidades de nuestro cerebro de crear, de adaptarse y resolver problemas. Maslow.

• Martin Seligman, define la felicidad como un conjunto de: Emociones positivas: Tales como éxtasis y la comodidad. Y Actividades positivas: Tales como la concentración y el cumplimiento de nuestras tareas.

¿Qué es la felicidad y porque la perseguimos? Es un estado de ánimo que se produce en la persona cuando cree haber alcanzado alguna meta deseada. Tal estado propicia paz interior, un enfoque del medio positivo, al mismo tiempo que estimula a conquistar nuevas metas. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría.

Esto es lo que piensa la humanidad de la felicidad que la obtenemos por medio de objetos, personas, trabajo, etc. Y en este caso la queremos obtener por medio de las organizaciones a las que pertenecemos socialmente.

Mucha gente que trabaja para organizaciones se siente profundamente frustrada y enajenada a consecuencia de su trabajo. La organización, en vez de convertirse en servidor obediente de la sociedad, se vuelve a veces su amo.

Ese enajenamiento que siente la sociedad trabajadora es debido al puesto que ocupa en la organización donde no se le permite desempeñarse con todos los conocimientos y cualidades que este posee, esto es porque la empres solo lo utiliza como instrumento en beneficio de una pequeña parte de la organización.

No todo lo que aumenta racionalidad reduce la felicidad y no todo lo que aumenta la felicidad reduce la eficiencia. Cuanto menos enajena una organización a su personal, más eficiente es. Los trabajadores satisfechos trabajan más y mejor que los frustrados.

La felicidad eleva la eficiencia en las organizaciones e, inversamente, sin organizaciones eficientes

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