Grupos

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LOS CABALLEROS TEMPLARIOS 

“Sello de los caballeros de Cristo”

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Podemos definir como organización a la Orden del temple o la Orden de los pobres caballeros de Cristo como también son conocidos los templarios, esto por ser una estructura en la cual los miembros aportaban diversas características y elementos, hacia el fin común que compartían el cual era, fomentar e inculcar a todo el mundo la religión cristiana.

Para que esta orden se creara hubo diferentes fases por las que tuvo que atravesar a causa de la necesidad inmediata de combatir a los musulmanes y de fomentar e implementar sus creencias.

Fase de emergencia: Esta surge a causa del poder que ejercía el imperio musulmán en Tierra Santa, por lo cual un grupo de caballeros franceses vieron la necesidad de formar una organización que proteja su ideología destacando de estos su primer Gran Maestre, Hugo de Payns. La cual es bautizada con el nombre de Los pobres caballeros de Cristo a principios del siglo XII, que posteriormente seria llamada la Orden del Temple.

Fase de Integración: Es el momento en que el Sumo pontífice, Honorio II el cual da un valor institucional a la organización otorgándoles una norma de vida también llamada La regla. La Santa Sede empieza a financiarlos al igual que distintos imperios aliados, como por ejemplo el rey Balduino II.

Fase de burocratización: A medida que el poder de los templarios va en aumento, también su número de propiedades e integrantes, por lo cual se va haciendo necesaria una categorización dentro del grupo para delegar las diferentes actividades a cada integrante.

Este movimiento social que era cada vez más poderoso, podía (o por lo menos intento) cumplir sus metas, que por su índole político/religioso consideraremos como transformadoras y redentoras.

Transformadoras porque de esta forma, a través del uso de la fuerza y violencia pretendían modificar e imponer sus creencias a los musulmanes y al mundo. Y redentoras por ser estos caballeros siervos de dios, los cuales pretendían salvar de las brasas del fuego eterno a los herejes.[pic 3]

Esta dualidad se da por el carácter bivalente de esta organización, ya que a la vez que predicaban con la palabra de dios y llevaban una vida desprendidos de las cosas materias, incorporaron a su credo una doctrina tanto militar, económica y política, con la cual imponían sus creencias.

La fragmentación y cese de esta Orden se dio por una lucha de poder entre el Papado y el rey de Francia, el cual resultó vencedor. Teniendo el papa Clemente V que elegir entre continuar con su papado y mantener su honor o disolver la orden templaria. Esta situación no le supuso ninguna duda, y en 1312 con el concilio de Viena la orden fue suprimida. Jacques de Molay, el último Gran Maestre, murió en la hoguera por orden del rey en 1314. 

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