GÉNERO Y SEXUALIDADES

¿Por qué crees que es importante estudiar sobre sexualidades con un enfoque de género?

La sexualidad es inherente al ser humano, es algo intrínseco que define cómo nos desarrollamos, cómo nos relacionamos con nosotros mismos y con los demás. Por otra parte, el género se define como aquello que “se relaciona con todos los aspectos de la vida económica y social, cotidiana y privada de los individuos y determina características y funciones dependiendo del sexo o de la percepción que la sociedad tiene de él” (Pedrero, 1998). Por tanto, el género es una construcción social del comportamiento, actitud e identidad que asume un individuo como miembro de una sociedad, que se va definiendo en la interacción con el otro.

Como construcción social ha sufrido cambios a lo largo de los años, así como la sociedad que la va definiendo (Montero, 2011). La noción de género inicia su definición como un concepto binario: femenino – masculino, donde estudiar a uno implica estudiar al otro. Se va asociando a conceptos tales como poder, política, patriarcado, subordinación, puesto que tanto los conceptos de lo femenino como de lo masculino han obedecido a las condiciones sociopolíticas y económicas de la época, así como a las intencionalidades estratégicas de las esferas de poder. En ese proceso, la diferenciación sexual es una forma primaria de diferenciación significativa que obedece a los procesos sociales en los que está inmersa.

Las relaciones de género derivan de la forma en la que se le entregan funciones y responsabilidades de manera distinta a mujeres y hombres y, en este contexto, la asignación de género por la genitalidad, la identidad de género como afinidad armónica con uno de ellos y el rol de género como los deberes, derechos, expectativas, entre otros, asociados a uno de los sexos, marcan la diferencia sociocultural entre lo femenino y lo masculino.

Nuestra sexualidad emerge y se desarrolla en un contexto cultural bajo la influencia de muchos factores. Existe una variabilidad enorme de formas, creencias y conductas sexuales que van determinando nuestra sexualidad. Por ello, estudiar las sexualidades bajo la óptica de género, nos permite comprender la organización de la sociedad, como se va transformando, situarla dentro de un contexto sociocultural necesario para comprenderla y abordar las necesidades de una sociedad que se torna cada vez más diversa, deconstruyendo y reconstruyendo los roles sexuales y otras categorías por una nueva imagen más inclusiva dentro del análisis social.

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