La Famlia

Hace poco leí en el diario La República, un comentario crudo e insensible sobre nuestros padres. Ya en la calle una periodista empezó a preguntar a todo aquel que pasaba por su lado “Si te ganaras la Tinka ¿En qué gastarías ese dinero?”, muchas fueron las alternativas posibles que los entrevistados daban de respuesta, en una libertad completa, en un lugar donde tu opinión valía tu pellejo. Ningún comentario saldría bajo un “que tiene?” o “ni al caso tu comentario” o mucho menos un “oe cállate”, podías decir lo tu que querías, podías decir lo que tu pensabas. Pero la insensibilidad si se hizo presente y sobre todo la falta de afecto.

Entrevistado n° 24.-Nombre: Luisa. Sexo: Femenino. Estudiante de la PUCP. Pregunta 1: Si te ganaras la Tinka ¿En qué gastarías ese dinero?. Respuesta: Me lo gastaría yo misma, en mis propias cosas, tengo muchas necesidades para tener 18 años. Pregunta 2: Les comprarías algo a tus hermanos, a tus papas… Respuesta: Jaja nica, si fui yo quien se ganó la Tinka, no ellos. Pregunta 3: Pero gracias a tus papás, pudiste haber comprado ese voleto ganador. Respuesta: Mi papá tiene cáncer así que ya se va a morir. Mi mamá? Ella está en su mundo y en su mundo no estoy yo, solo sus fiestas sociales e ir al club a jugar tenis jaja.

Obviamente mi reacción fue esta: “Pero que tiene en la cabeza esta flaca? ESTA LOCA!!! Sus papás deberían serlo todo para ella, es una malagradecida”. Y creo que la reacción de muchos también hubiera sido casi parecida. Pero nuestro comentario aquí no vale, no vale nada por el simple hecho de que no fue nuestra entrevista, no fue ni es nuestra vida. No estoy justificando a Luisa sobre su respuesta, es más, me da mucho que pensar sobre su persona. No la conozco y tampoco quisiera hacerlo.

Analicemos esto parte por parte: Rpta 1. “Me lo gastaría yo misma, en mis propias cosas, tengo muchas necesidades para tener 18 años.” ¿Qué tipo de necesidades puede tener una chica de 18 años? Yo tengo 16 años y puede que no sepa una ¡NADA! de este “tipo de necesidades” pero tampoco tengo diez años para no comprender ni entender lo que una chica de esa edad busca en sí, tengo una hermana mayor cuya edad no pasa ni llega a los 20, tiene 19, muy aparte de saber y comprender la situación, por estar a meses de cumplir 17 años y muy bien cumplidos. Entonces no soy tan tonta para no estar hablando el mismo idioma con Luisa. No creo, en todos los mundos que existan, que sus necesidades pasen de ropa, joyas, maquillajes, fiestas, viajes con amigas, más ropa, viajar sola, viajar con su flaco y más ropa. Si tiene una enfermedad? No creo. No me consta. Así que sus disque “necesidades” son puro floro de bajo presupuesto.

Analicemos esto parte por parte: Rpta 2. “Jaja nica, si fui yo quien se ganó la Tinka, no ellos.” La pregunta fue si ella con ese dinero les compraría algo a sus hermanos o a sus papás, estamos hablando de un mínimo de gastos para los hermanos con quien pasa la gran mayoría de tiempo, con los que paso toda su vida, completa hasta el día de hoy. No les compraría nada a sus papás, pero justifica su respuesta con un “fui yo quien se ganó la Tinka, no ellos.” Sumare lo que ella gana, nadie toca, ni su mamá. Desde mi punto de vista, creo que el nombre de “Egoísta” le queda corto.

Analicemos esto parte por parte: Rpta 3. “Mi papá tiene cáncer así que ya se va a morir. Mi mamá? Ella está en su mundo y en su mundo no estoy yo, solo sus fiestas sociales e ir al club a jugar tenis jaja.”

Al parecer a Luisa le importa un @&%!”# que su papá tenga cáncer y que se vaya a morir. Que linda hija. No se da cuenta, aún, que todo TODO lo que ella tiene, sus botas de marca, las mechas californianas de su cabello, su colegio carísimo, su universidad carísima, la comida que digiere, el “sencillo” con el que sale cuando se va de juerga, la ropa con la que viste, la ropa que quiere, en sí aún no se da cuenta que SU VIDA COMPLETA la tiene gracias a su papá, pero como diría ella “tiene cáncer así que ya se va a morir”. Terrible Luisita.

Como se expresa de su mamá, se nota que no tienen una buena relación y no somos nadie para culparla a ella o a su mamá por esto, pero

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