La formulación de un problema es más importante que su solución

“La formulación de un problema es más importante que su solución”

Albert Einstein

Al plantearnos un problema, sea el que sea, lo primero que pensamos es una solución lógica, cotidiana o que ya conozcamos, dejando para el final lo más absurdo o lo inimaginable.  Pero al momento de empezar con el proceso de solución, nos podemos topar con dos pensamientos el Convergente y Divergente, que a continuación explicaremos de que se trata cada uno.

“El Pensamiento Convergente se emplea para resolver problemas bien definidos cuya característica es tener una solución única, se mueve en una dirección, en un plano. En estos casos se enfrenta un universo cerrado, con límites definidos, con elementos y propiedades conocidas desde el comienzo, que no varían a medida que avanza el proceso de búsqueda de una solución”

Usando esta definición, puedo determinar que en  mi predomina, a mi parecer, el pensamiento convergente. Ya que me gusta el hecho de solucionar problemas usando un proceso que siempre me va a dar el mismo resultado, esto porque se puede comprobar y decir que el resultado es el deseado, donde este bien definidas las reglas y el proceso a realizarse.

Basándose en el concepto de que “el Pensamiento Divergente no se restringe a un plano único, sino que se mueve en planos múltiples y simultáneos.”  Para mí este tipo de pensamiento es un reto, aunque es con el que siempre empiezo al solucionar problemas, es muy difícil aplicarlo porque no tengo manera de comprobar que ese es el mejor o el único proceso para obtener el resultado deseado. En mi es resolverlos a prueba y error hasta conseguir el mejor camino, lo que me hace sentir que estoy resolviendo a ciegas.  

Un ejemplo son las ciencias exactas, física, química, matemáticas, y sus derivados, son mi fascinación, me encanta razonar todo el proceso que se necesita para llegar al resultado. Solo hay una forma de llegar a él y esa es la fórmula, pero lo que varía es el orden, la cantidad de fórmulas y de variables que se deben usar, pero siempre al final debes llegar a un solo resultado, y tienes la forma de comprobarlos. Eso es lo que me gusta, que no solo desarrollas un solo pensamiento, sino que te desarrolla a la par.

En el trabajo, aunque usamos un manual donde vienen todas las instrucciones bien específicas, usando el pensamiento convergente, pues también usamos el divergente ya que en el manual no te dice cómo sacar un tornillo que se barrió o como botar la pieza sin romperla, etc., en cada proceso igualmente aplicas los dos pensamientos, pero el que predomina es el divergente, ya que el solucionar problemas debes buscar hasta por debajo de las piedras la forma y la herramienta a utilizar.

En conclusión, el pensamiento Convergente o Limitado, es usado en problemas que son exactos o tienen solo una solución y el Divergente o Múltiple, con el que vamos a buscar varios caminos para lograr solucionarlo, tener un equilibrio o saber fusionarlos es lo más favorable para realizar un proceso de solución efectivo.

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