OBJETOS Y FENÓMENOS TRANSICIONALES

OBJETOS TRANSICIONALES Y

FENOMENOS TRANSICIONALES

I. PRIMERA HIPOTESIS

Los recién nacidos tienden a usar el puño, los dedos, los pulgares para estimular la zona erógena oral.

Al cabo de varios meses los bebés encuentran placer en jugar con muñecas. La mayoría de las madres le ofrecen algún objeto especial y esperan que se aficione a ellos.

LA PRIMERA POSESION

Se advierte una amplia variación con las primeras actividades de inducción del puño a la boca, a la larga esto lleva al apego a un osito, una muñeca o un juguete, blando o duro.

Aparte de la excitación oral, estas pueden ser las bases de todo lo demás.

Se pueden estudiar muchas cosas de importancia:

1.- La naturaleza del objeto.

2.- La capacidad del niño para reconocer el objeto como un “no-yo”.

3.- La ubicación del objeto.

4.- Capacidad del niño para crear, idear, producir.

5.- La iniciación de un tipo afectuoso de relación de objeto.

Los objetos transicionales y los fenómenos transicionales son la zona intermedia de experiencia, entre el pulgar y el osito, entre el erotismo oral y la verdadera relación de objeto, entre la actividad creadora primaria y la proyección de lo que ya se ha introyectado.

Lo inadecuado de la formación habitual de la naturaleza humana

Una exposición de la naturaleza humana no resulta suficiente.

Cada individuo que ha llegado a ser una unidad, con una membrana limitante, y un exterior y un interior, puede decirse que posee una realidad interna.

La tercera parte de la vida de un ser humano, es una zona intermedia de experiencia a la cual contribuyen la realidad interior y la vida exterior.

La prueba de realidad se establece con una clara distinción entre la apercepción y la percepción.

La sustancia de la ilusión, es lo que permite al niño y lo que en la vida adulta es inherente del arte y de la religión, se convierte en el sello de la locura cuando el adulto exige demasiado de la credulidad.

El enfoque del autor tiene que ver con la primera posesión y con la zona intermedia entre lo subjetivo y lo que se percibe de forma objetiva.

Desarrollo de una pauta personal

En el desarrollo de un niño pequeño aparece, tarde o temprano, una tendencia a entretejer en la rama personal objetos-distintos-que-yo. Estos objetos representan el pecho materno.

Experiencia autoerótica:

I) Con la otra mano el bebe toma un objeto exterior y lo introduce en la

boca junto con los dedos.

II) Succiona y se aferra al trozo de tela.

III) El bebe arranca lana y la reúne para la parte acariciadora de la actividad.

IV) Se producen movimientos de masticación, acompañados de balbuceos, ruidos anales, notas musicales, etc.

Estas experiencias van acompañadas por la formación de pensamientos y fantasías, a las cuales se les llaman fenómenos transicionales.

Puede surgir algún fenómeno, que llega a adquirir una importancia vital para el bebe en el momento de disponerse a dormir, y que es una defensa contra la ansiedad.

Ese objeto que el niño ha encontrado se convierte en el objeto transicional.

La pauta de los fenómenos transicionales empieza a aparecer desde los cuatro a sei meses hasta los ocho a doce.

La necesidad de un objeto o de una pauta de conducta específicos que comenzó a edad muy temprana, puede reaparecer más adelante, cuando se presenta una amenaza de privación.

Los varones tienden a los juguetes duros, y las niñas se orientan de forma directa a la adquisición de una familia.

Cuando el bebe empieza a usar sonidos, puede aparecer una palabra para nombrar al objeto transicional.

A veces no existe un objeto transicional aparte de la madre misma. O cuando el bebe se siente perturbado en su desarrollo emocional, que no le es posible gozar del estado de transición.

Cualidades especiales de la relación:

1.- El bebe adquiere derechos sobre el objeto. Existe cierta anulación de la omnipotencia.

2.- El objeto es acunado con afecto. Amado y mutilado con excitación.

3.- Nunca debe cambiar, a menos de que lo cambie el propio bebe.

4.- Tiene que sobrevivir al amor instintivo.

5.- Al bebe debe parecerle que irradia calor, o que se mueva, o que posee cierta textura.

6.- Proviene de afuera desde nuestro punto de vista, pero no para el bebe.

7.- Se permite que su destino sufra una descarga gradual.

Relación del objeto transicional con el simbolismo

Lo importante no es su valor simbólico, sino su realidad.

Cuando se emplea el simbolismo el niño ya distingue entre los objetos internos y externos.

Es posible entender el objeto transicional y no entender del todo la naturaleza del simbolismo.

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