Psicologia
Enviado por adairzaldivar • 9 de Febrero de 2014 • 1.274 Palabras (6 Páginas) • 232 Visitas
Enfoques de la conducta violenta
Una conducta violenta es aquella que mutila las normas de la sociedad y al bien común, aceptado por la colectividad en un espacio y tiempo determinado.
Enfoque biológico
Explica que la conducta violenta se debe a trastornos biológicos en el organismo de los individuos.
Sistema limbito: Hipotálamo, Tálamo, Hipocampo, Amígdala
Neurotransmisores: un aumento en la Serotonina producía un aumento en las conductas violentas de un individuo.
Herencia: Factores hereditarios;
Enfoque Psicológico
Postula que toda conducta violenta tiene como génesis un determinado factor psicológico, desde Freud con sus teorías de los estadios y las fijaciones hasta los experimentos del Iván Pavlov o Jhon Watson.
Proponía que en una persona que exterioriza determinada conducta antisocial habían fallado los mecanismos de defensa (represión, negación, racionalización) y se rendía a sus impulsos agresivos que transgredía a la sociedad, además que presentaba rasgos de la personalidad inflexibles. Además formulaba la existencia de algunos trastornos de la personalidad que llevaban al sujeto a cometer dicha conducta como el trastorno de la personalidad antisocial, limítrofe y sicótico.
Enfoque social
El enfoque social no solo responsabilizó al individuo de cometer una conducta violenta, sino que hizo hincapié en la responsabilidad que la sociedad jugaba, así expone que el sujeto es sólo un producto del fracaso de la sociedad, reflejo de lo dañado que se encuentra dicho conglomerado.
Enfoque Criminológico
La criminología, con su interdisciplina, llega a unir todos estos factores y postula que la conducta violenta surge de la interrelación de estos tres factores a lo cual llama factor bio-sico-social.
Conducta.
Cualquier actividad humana o animal que pueda observarse y medirse objetivamente.
Comportamiento
El comportamiento es la manera de comportarse (conducirse, portarse). Se trata de la forma de proceder de las personas u organismos frente a los estímulos y en relación con el entorno.
a) Conducta social. Cumple con las adecuadas normas de convivencia, la que no agrede en forma alguna a la colectividad, es la que cumple con el bien común. La mayoría de las conductas en la humana convivencia son de esta clase, nuestras relaciones con los semejantes siguen determinadas normas y buscan la realización de ciertos valores.
b) Conducta asocial. Es aquella que carece de contenido social, no tiene relación con las normas de convivencia ni con el bien común, se realiza por lo general en la soledad o en el aislamiento.
c) Conducta parasocial. Se da en el contexto social, pero es diferente a las conductas seguidas por la mayoría del conglomerado social. Es la no-aceptación de os valores adoptados por la colectividad, pero sin destruirlos; no realiza el bien común, pero no lo agrede. Ciertas modas, ciertos usos o costumbres diferentes, son captados por la mayoría como extravagantes o francamente desviados. La diferencia con la conducta asocial es que la parasocial no puede ser aislada, necesita de los demás para poder darse.
d) Conducta antisocial. Va contra el bien común, atenta contra la estructura básica de la sociedad, destruye sus valores fundamentales, lesiona las normas elementales de convivencia.
Es de aclararse que el termino de conducta desviada, tan utilizado actualmente, es de gran utilidad, principalmente por ser descriptivo y no valorativo.
Alteraciones en conducta por hiperactividad orgánica
Rachel Gittelman (1995) sostiene que varones hiperactivos muestran una tendencia alta de riesgo a entrar en conducta antisocial en la adolescencia. Esta tendencia es cuatro veces mayor a la de jóvenes que no son hiperactivos, y parecen tener historiales de más incidentes de arrestos, robos en la escuela, expulsión, felonías, etc., 25% de los participantes en el estudio habían sido institucionalizados por conducta antisocial.
Daño cerebral
Estudios demuestran que daños cerebrales son la regla entre asesinos y no la excepción. Pamela Blake (1995) estudió 31 asesinos con ayuda de la tecnología médica de los EEG’s, MIR’s y CT SCANS y con pruebas psiconeurológicas. Estos habían sido acusados de ser miembros de gangas, o violadores, ladrones, asesinos seriales, asesinos en masa, y dos habían asesinado hijos. En 20 de estos casos se pudo establecer diagnósticos neurológicos claros. Cinco casos demostraron efectos de síndrome fetal alcohólico, nueve mostraron retardo mental, un caso tenía perlesía cerebral, uno más caso tenía hipotiroidismo;
...