Quiero ser psicólogo

Ensayo “Quiero ser psicólogo” por Karen Servian Vidal

Primer Curso – Primera Sección

PSICOLOGÍA

La psicología…  una carrera subestimada por muchos, tildando a los que la siguen de “ir por lo fácil”, pero, así como cada carrera tiene dificultades diferentes, también tienen sus métodos previos, algunos más complejos que otros, etc. Pero la psicología es más que simples fórmulas bien elaboradas, más que una ecuación bien hecha, el psicólogo debe crear humanidad, empatía, donde su primer campo de estudio debe ser él mismo, debe tener un análisis constante de las ecuaciones de su comportamiento, para así luego poder generar naturalmente esa empatía a la persona que buscará ayuda en su persona, fomentar en sí el respeto, la calidez prudente y decenas de hábitos que van de la mano con una vida que vaya en crecimiento personal, y sea motivo de crecimiento para los demás.

Quiero ser psicóloga porque desde un primer encuentro con esta ciencia quedé fascinada, más que por el “querer comprender el comportamiento de las personas”, fue el descubrir más del mío, y corroborar algo que siempre digo citando un slogan publicitario de una línea telefónica: “Cada persona es un mundo”… y cada vez estaba más segura de ello, pues por más que haya clasificaciones de los temperamentos y muchos otros factores para medir en cierta manera otras características específicas, nunca podremos abarcar todos los matices de una persona, todo su valor inestimable.

Es fascinante además la manera en cómo tantas cosas, aparentemente superficiales en nosotros, van gritando con voces silenciosas y escasamente escuchadas aquello que somos: un dibujo, la manera en que lo hacemos, el simple trazo del lápiz, lo que vemos en algo sin mucho sentido y que cobra una forma concreta en nuestra mente. Todo eso puede darte tanto de lo que vivió una persona que me parece extraordinario; sobre sus emociones, su autopercepción, sus traumas, su relación familiar, en fin, transmitimos aquello que somos y el psicólogo es la persona que ayuda a oír esas voces silenciosas.

Creo que también consiste en base a algo que yo lo hago gráfico en mi mente y que describiré:

En una sala vacía pero bien iluminada sin más que una mesa relativamente amplia, pero más larga que ancha, para que las dos sillas que están una frente a otra en la mesa tengan cierta proximidad, están dos figuras, una tiene un semblante cálido y la otra algo más apenado, pero esta lleva una gran mochila, casi como esas de acampar, bien grande y pesada a simple vista; y que al estar ya cada uno sentado en su respectivo lugar, este último luego de sentirse cómodo tras un diálogo con la primera persona (que se da cuenta del peso excesivo de la mochila), le sugiere poner sobre la mesa todo su contenido, para así poder ver si hay cargas innecesarias que entorpecen su camino, también poder clasificar las demás y que las pueda conocer, las que son más frágiles y que por ende debe llevar con más precaución y las herramientas que quizás no sabía que poseía, o que ya lo había olvidado, para que pueda usarlas más seguido en el camino que le depara.

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