Reporte de lectura “Para una critica de la noción raza”

Reporte de lectura “Para una critica de la noción raza” de Carlos López Beltrán

        Históricamente la mala clasificación de las enfermedades a matado a mas personas que los campos de batalla, al igual que cuando caemos en la tendencia de usar el concepto raza, los usuarios suelen cegarse con malentendidos y prejuicios infundados. Podemos entender este concepto a través de las definiciones históricas como el lazo sanguíneo o estirpe que identifica a una persona, ligado al pensamiento tipológico, el cual con lleva no solo la herencia genética sino además los rasgos morales, aun que siempre ligado al linaje consanguíneo.

Cabe mencionar que luego de muchos debates y devenires, y luego de Darwin, se estableció un único criterio real de unidad en un grupo biológico al que podemos aspirar: ascendencia común, ya que coloquialmente se tiende a pensar que el pertenecer a un grupo racial es algo fundamental biológica y espiritualmente hace a la persona ser lo que es.

Podemos aclarar que la discusión actual sobre el uso de la palabra raza tiene dos vertientes, el debate científico de la clasificación y el debate abierto y popular en el que se discute si el uso de las clasificaciones humanas crea o no crea un sistema de jerarquización racista de los grupos humanos.

Luego del nazismo el uso de la clasificación por medio de la palabra raza creo una incomodidad ética, así pues, en las décadas de los mediados del siglo XX lo que define la palabra raza es la frecuencia con la que aparecen unos genes.

Actualmente entendemos que el uso inconsciente de la palabra raza va ligado de la mano de las condiciones climáticas, y esto pues en un claro ejemplo de la evolución, la cual adapta al ser humano a su entorno próximo, por ello el identificar una raza por las conjeturas seudobiologicas o superficiales con una nación no solo es un acto de ignorancia, sino que puede se criminal.

Educación y cultura, por Margaret Mead

El método etnográfico permitió lo siguiente: Conjugar lo cultural con lo social brindando una visión más completa de la realidad comunitaria. Partir del supuesto de que el único y particular fenómeno descrito ejemplifica procesos sociales universales (se encontrará lo general en lo particular). Con esta directriz podemos dar conclusión a que el desarrollo de un niño depende de su entorno, ambiental y social, y que cualquier posible rasgo identificable del ser humano proviene de aspectos menores vividos en la temprana edad que van moldeando el carácter general del niño.

Esto nos da dos grandes ventajas en el entendimiento del desarrollo del ser humano, los contrastes que ofrecen lo distintos desarrollos humanos, así como se menciono con antelación, el encontrar las variables que forjaron al ser humano.

Por ello, el tener un caso de estudio similar con otro podría tener consecuencias de desarrollo distintas si factores ambientales o sociales son modificados en sus respectivos procesos de crecimiento.

Por ello el reconocer al igual que el trabajador social, o educador cuyo trabajo es la adaptación inmediata del individuo que los fenómenos de la naturaleza humano son biológicamente predeterminados es un error que se desecha al experimentar y entender que son determinados socialmente por el entorno próximo

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