EL QUERER COMO EL HACER

“EL QUERER Y EL HACER”

VERSICULO: FILIPENSE 2: 13

13 porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad.

Uno de los conflictos que se genera en nuestro ser  por causa del “YO” es pensar que la obediencia es la parte que debe hacer el hombre para lograr la salvación  y nos encontramos tristemente confundidos sobre este asunto.  Eso viene ocurriendo desde tiempos antiguos.  Nuestro YO no se conforma  con dejar que El Señor haga la obra y persiste neciamente en cumplir lo que solamente Dios puede hacer. (Hmno. Oscar Pacheco)

La obediencia es el resultado de la fe y si la fe es un Don de Dios del cielo…  es un regalo de Dios que viene  de parte de Dios por medio de Cristo, como nos indica el libro de  Efesios   en su capítulo 2, a partir del versículo 8, entonces la obediencia también lo es.

FILIPENSE 2:13 nos indica que Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer por su buena voluntad… y si observamos las instrucciones de nuestro Dios que nos indica en el capítulo anterior, es decir el capítulo 12 el cual nos dice  que tenemos que llevar  a  cabo nuestra salvación con temblor y temor podemos ver que Dios y nosotros, por decirlo de alguna manera,  formamos  un maravilloso equipo donde cada quien tiene una tarea… La nuestra, es decir, la parte que nos toca es llevar a cabo nuestra salvación con temor y temblor como se indica en el versículo 12, teniendo siempre presente que somos salvo por gracia a través de nuestra fe  en Jesucristo y no por obra tal como lo expresa  Efesios 2:8-9… Siendo la tarea de Dios el cumplir su promesa de  producir en nosotros el querer y el hacer a través del espíritu santo por su buena voluntad.

Cuando el querer como el hacer lo produce Dios en el hombre, comandado por el Poder del Espíritu, entonces el hombre hará todo sin murmuraciones y contiendas como nos dice filipense 2:14.

Dios requiere un medio para obrar, le doy un ejemplo a modo de comparación, así como un chofer necesita un coche para conducir… el coche por sí solo no puede hacer nada, ni tan siquiera arrancar… por esa razón Pablo refiere  en Filipense 4:13 todo lo puedo en Cristo que me fortalece… Notemos que dice en Cristo, pues separados de El nada, nada podemos hacer… Hmno Oscar

El Querer y el hacer no se trata de nuestras propias fuerzas, sucede cuando nos encontramos viviendo en la gracia de nuestro Señor Jesucristo, por el amor hacia Él y su influencia es nuestras vidas, entonces reflejaremos su misma humildad y vamos a querer hacer la voluntad del Padre de la misma manera que Él lo hizo, surge de forma espontánea.

Pongamos como ejemplo de ello, el amor que tenemos hacia nuestro esposo o esposa… todo lo que hacemos para él o ella lo hacemos por nuestra propia voluntad, de forma espontánea, movidos por ese hermoso sentimiento y lo hacemos para complacerlo, para  hacerlo feliz, para darle alegría demostrándole de esa manera ese amor que le profesamos

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