Escuchando la voz de Cristo

“A este abre el portero, y las ovejas oyen su voz; y a sus ovejas llama por su nombre, y las saca. Y cuando ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz.” S.Juan 10:3-4

A ser verdad creo que escuchamos la voz de Cristo una vez que decidimos acudir a su llamado y entregar nuestras vidas a Él, sin importar cual haya sido el motivo, razón o circunstancia decidimos seguirle y confiar nuestra vida a Él.

Pero ¿realmente le estamos confiando nuestra vida? ¿Realmente escuchamos su consejo cuando nos encontramos en situaciones en las que no sabemos qué hacer? Creo que pocas veces le consideramos en decisiones que tomamos, principalmente en aquellas que debemos tomar en momentos de prueba, en momentos difíciles en los que debemos tomar decisiones respecto a nuestra salud, nuestro ministerio, nuestro matrimonio, algún conflicto en la iglesia con algún hermano o con algún familiar.

Recientemente vi un video en el que el presidente de Estados Unidos llamaba al pueblo a celebrar un día de oración por las recientes catástrofes en algunos estados a causa de los huracanes, esta nación tan poderosa que poco a poco se había olvidado de escuchar la voz de Dios desde mi punto de vista, sin embargo parecen estar reconociendo que solo obedeciendo sus mandatos, escuchando su palabra y obedeciéndola es cómo podemos tener las respuestas que esperamos, la protección que queremos y la seguridad de una vida plena.

Esta situación pasa a menudo en nuestras vidas, poco a poco dejamos de escuchar la voz de Dios para escuchar voces que muchas veces solo quieren llevarnos a la destrucción, o muchas veces dejamos de consultarle si es su voluntad sobre alguna situación en nuestras vidas y pedimos consejos o aprobación en personas o métodos incorrectos llevándonos a tomar malas decisiones.

La palabra dice en Juan 10:4 “…y las ovejas le siguen, porque conocen su voz”, nosotros conocemos su voz, sabemos cuándo Dios nos está llamando y sabemos las maneras en que Dios habla, sabemos de igual manera de que manera debemos buscarle para escuchar algún consejo de su parte, no debemos olvidar métodos como la oración y la lectura de su palabra, que son los medios por los que principalmente habla Dios, no debemos olvidar que los pensamientos de Dios son de bien y no de mal para con nosotros, y que toda dirección e instrucción para nuestras vidas está incluida en su palabra, que si escuchamos su voz y le seguimos tendremos la seguridad que caminaremos por caminos seguros, no fáciles, a veces complicados pero teniendo la seguridad de que todas las cosas nos son para bien, nunca nos cansemos de pedir su consejo, escucharle y seguir su dirección.

Nestor de Jesus Vargas Mauricio.

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