Pastorela
Enviado por aguaelemento • 27 de Marzo de 2014 • 3.403 Palabras (14 Páginas) • 264 Visitas
Gabriel: ¿Será aquí? Según las coordenadas exactas que me dieron debe ser aquí, pero no veo absolutamente nada
Alégrate María, has encontrado gracia ante los ojos de Dios, él ha decidido hacerle al hombre un regalo divino, mandar a su hijo para que viva entre ellos, y tú has sido elegida para ser la madre de ese niño. Concebirás y darás a luz a un hijo y le pondrás por nombre Jesús. (Se detiene la música)
María: ¿Yo, concebir y dar a luz un hijo? ¿Cómo puede ser eso posible? Yo no he conocido hombre alguno.
Gabriel: Serás iluminada por el espíritu santo, concebirás por gracia de Dios. El niño que darás a luz será llamado santo, el hijo de Dios, vendrá a traer el perdón de los pecados para todos los hombres y su reino no tendrá fin. Entonces María ¿Qué dices?
María: Pues no sé todavía estoy muy confundida, no entiendo cómo es que yo, pueda concebir sin más que la gracia de Dios. Pero si esa es la voluntad del Señor, ¡¡¡Que así sea!!! (María se arrodilla) Hágase en mí según tu palabra bello ángel, yo soy la esclava del Señor.
Gabriel: Hijo, no me imaginaba que José viviera tan lejos, ya traigo ampollas en los cayos de los juanetes, oh, creo que aquí es.
Gabriel: Hay José, tú has sido el elegido del Señor para ser el padre de su hijo aquí en la tierra.
José: Está bien, atenderé al llamado del Señor mi Dios, tendré a María por esposa y cuidaré de su hijo. (José se hinca mientras que el arcángel Gabriel sale) Hágase tu voluntad aquí en la tierra como en el cielo. (Se apagan las luces)
Tercer Cuadro: Lucifer se entera del nacimiento del niño.
Narrador: Las cosas iban bien, María estaba esperando al hijo de Dios quien vendría al mundo a librar al hombre de sus pecados, pero el mal que nunca descansa no tardaría en enterarse de los planes de Dios y seguramente algo intentaría hacer para evitar que el niño Jesús cumpliera con su destino en la tierra, veamos que sucede en tanto en el infierno.
Lucifer entra bailando, con atuendo de Zapata, con carrilleras, sombrero, unas botas altas como a la rodilla y una pistola en el cinto, se escucha la música de la canción “Cómo me duele” Lucifer canta cambiando la letra.
Hay, yo soy muy malo
Yo soy muy malo
Rey del infierno tinieblas y obscuridadyygv
Soy el chamuco
Soy el demonio
El más malvado y también el más galán
Travesuras y maldad
Los pecados provocar
A los hombres pervertir
Y sus almas atrapar.
Se baja el volumen de la música sin detenerse, Lucifer sigue cantando hasta que lo interrumpen…
Soy el chamuco
Soy el chamuco…
Se escucha que tocan la puerta.
Lucifer: ¿Quién es?
Voz: ¡¡¡Mensaje para el Señor Lucifer!!!
Lucifer: Déjelo en el buzón.
Lucifer: (Va, toma un sobre de alguna caja que semeje un buzón, lo abre y empieza a leer) ¿Qué, Qué? ¿El hijo de Dios va a nacer? ¿Y va a venir para enderezar a los hombres? No, no puede ser, y tanto trabajo que me ha costado darle al hombre cosas en que distraerse para que se olvide de mi enemigo.
La avaricia con los ricos, la envidia entre las mujeres vanidosas, el odio entre los poderosos para que hagan guerras, la lujuria la he metido entre los infieles. Y ahora que todo parecía marchar tan bien.
¡¡¡Aaaaaah!!! No puedo permitir que un niño me eche a perder tantos siglos de maldades, tendremos que redoblar esfuerzos, trabajar horas extra ¿Dónde estarán mis ayudantes? Últimamente no se han conectado al Messenger, ni al facebook, no dejan mensajes en twitter y ya ni digo del myspace (Gritando) ¡¡¡Satanás, Luzbelina, vengan aquí, aparezcan demonios!!!
Lucifer: (Va, toma un sobre de alguna caja que semeje un buzón, lo abre y empieza a leer) ¿Qué, Qué? ¿El hijo de Dios va a nacer? ¿Y va a venir para enderezar a los hombres? No, no puede ser, y tanto trabajo que me ha costado darle al hombre cosas en que distraerse para que se olvide de mi enemigo.
Los he mandado llamar porque necesito que redoblemos el trabajo, me han avisado que mi enemigo el de allá arriba va a mandar a su hijo a la tierra, a vivir entre los hombres para predicar la paz, el amor al prójimo, la hermandad, (Conforme Lucifer va diciendo cada buena palabra los otros dos hacen gestos de asco) ¿Se dan cuenta? No podemos permitirlo, debemos evitar que los hombres regresen al buen camino, debemos voltear el mundo de cabeza si es necesario para irle ganando terreno a ese niño, y cuando nazca ya le habremos ganado la batalla.
Narrador: Y el tiempo pasó, y el día del nacimiento del niño Jesús se llegó, y Dios le encomendó al arcángel Gabriel que junto con sus ángeles bajaran a la tierra a darle la noticia a la gente en la tierra, los humildes eran los elegidos para ser los primeros que recibieran la buena nueva y los primeros que tuvieran la dicha de verlo. Así que el arcángel Gabriel dividió sus tropas en dos para que bajaran a la tierra a hacer el anuncio del nacimiento del hijo de Dios invitando a la gente humilde a ir a adorarlo. Y a pesar del frió de temporada los ángeles bajaron a la tierra a cumplir con el mandato de Dios.
Cuarto Cuadro: El anuncio a los pastores.
Gabriel: soy el enviado del Cielo, y hemos venido a darles la buena nueva una buena noticia. (Comienza la música de arpas de fondo) Ésta noche, en la Ciudad de Belén nacerá el enviado del Cielo, el Salvador, el que trae el perdón de los pecados para todos los hombres, el Hijo de Dios.
Gabriel: Sí, y nosotros hemos venido a avisarles y a decirles que ustedes, los más humildes, han sido elegidos para ser los primeros en verle y darle la bienvenida, para adorarle y ser testigos del amor de Dios por los hombres, ustedes son de los afortunados elegidos.
Gabriel: (Se ríe) Está bien, pero, en lo que estábamos; (Empieza de nuevo la música de arpas) seguirán aquella estrella (Señala hacia el horizonte) y en donde ésta se detenga, ahí encontraran al niño, junto a sus padres María y José, tendrán la dicha de conocer al hijo de Dios.
Divina: Así que anden buenos pastores, prepárense y anden, vallan que el hijo de Dios está a punto de nacer, y ustedes deben llegar a Belén para darle la bienvenida. (Los ángeles se van)
Narrador: Mientras, los demás ángeles seguían llevando la noticia del nacimiento del hijo de Dios a los más humildes, y los invitaban para que marcharan hacia Belén a darle al niño la bienvenida. Veamos que tal les estaba yendo
Los tres pastores
...