Albergues Infantiles

Albergues infantiles, lo que buscan y no encuentran.

Por Yanina Rivera Copaira

Lo que se entiende para la creación de albergues infantiles es la idea de entregarles a niños en extrema pobreza una alternativa de desarrollo integral que les permitan recibir las armas necesarias y que estas terminen coadyuvando en su superación personal y que, a su vez, logren convertirse en una pieza más de aquel engranaje de la sociedad que los vea armoniosamente insertados, realmente, en la misma esperando, claro está, que esto traiga consigo, además, de su superación personal su participación efectiva en la búsqueda de un mundo mejor para vivir. Pero, esto no es, necesariamente, lo que ocurre en la práctica.

Los albergues infantiles en el Perú y su legislación

Es menester decir que el marco legal lo proporciona el Código de los Niños y Adolecentes que establece que es el PROMUDEH es el organismo encargado de velar por el bienestar de los niños que carecen de familia o que se encuentren en extrema pobreza.

Ahora bien, dichos objetivos, contenidos en la citada norma a los que responde la creación de dichos albergues, por diversas razones, no terminan de verse plasmados en la realidad en casos como los de algunos albergues existentes en Lima.

El Albergue para niños de 2 a 11 años de Huaycan

Es aquí donde vemos penosamente confrontadas las ideas de cómo deberían ser y como se dan las cosas en la realidad. Nos encontramos, entonces, a un albergue ubicado en la zona centro de Lima , el de Huaycan, en donde aparecen carencias que no ayudan a cubrir las necesidades básicas de los niños carenciados del lugar que para esto es que, al fin y al cabo, fue creado.

Este albergue aparece infestado de cosas tan lejanas de la búsqueda del crecimiento personal de los niños que ahí cobija y que, por tanto, no parecen estar gozando los beneficios que deberían en una situación normal.

Es que entre sus muchos déficits podríamos citar la falta de la cantidad necesaria de personal para tratar tan prioritarios como salud, alimentación, educación de los niños que ahí se encuentran. Sumado a esto lo limitada de su infraestructura que se ve reflejada en la falta de ambientes acordes para el desarrollo mental y psicológico de los niños que cobija dentro.

Entonces, basándonos, en este caso puntual, el del citado albergue, que vemos como no basta la legislación, ni las ganas de su personal para el logro de objetivos, sino se precisa de una actitud distinta del estado( en temas como destinar mayores partidas de dinero y contratación de un mayor número personal idóneo ) que logre por fin llenar el vacío de esos niños marginados en temas tan inherentes al ser humano, más aún en niños, como el logro de la superación personal y la inserción de ellos en la sociedad gozando

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