Análisis Institucional De La Dialéctica De Los Grupos En Educación

Análisis institucional de la dialéctica de los grupos en educación

Psc. Susana López Guerra

Otoño 2013

A los estudiantes de Análisis Institucional del 7º semestre de la LIE.

Introducción

El Análisis Institucional recupera dos perspectivas teóricas para el análisis de la dialéctica de los grupos: la psicoanalítica y la sociopolítica. Ambas visiones se complementan para comprender a la institución mediante la explicación freudiana libidinal y la kleniana --en la que se fundan los supuestos básicos de Bion--; así como de los procesos de institucionalización y burocratización grupal (Lourau, 1975).

Según Lapassade (1980) el Análisis Institucional explica los procesos grupales en el ámbito de la estructuración burocratizada de los mismos. No debe escaparse la idea básica de que toda institución se realiza fundamentada en una actividad burocrática; los grupos, sujetos y actores de las actividades que se dan dentro de este marco poseen una dialéctica, y para comprenderla remite al análisis que realiza Hegel del Contrato Social de Rousseau, en su clásico texto La Fenomenología del Espíritu. El Análisis Institucional rescata esta reflexión para ofrecer una visión inacabada y en permanente estado de inmadurez de los procesos grupales (Lapassade, 1977).

A su vez la explicación psicoanalítica de una experiencia educativa implica una búsqueda de polos conceptuales que tradicionalmente por su naturaleza disciplinaria no convergen porque poseen diferente intencionalidad filosófica: las reflexiones sobre la educación están inscritas en un pensamiento de carácter positivo y en contrapeso axiológico el psicoanálisis rubrica lo mejor de su esencia en la negatividad de su pensamiento teórico. Sin embargo, en la lógica de su evolución el psicoanálisis ha desarrollado otras formas de interpretación que hacen posible esta nivelación fuera del troquel teórico de la ortodoxia. El desarrollo conceptual psicoanalítico ha arrojado luz para la comprensión de interacción social en general y de los procesos grupales, entre ellos los educativos. La perspectiva psicoanalítica no debe confundirse con el pensamiento de la Dinámica de Grupos de la Psicología Social.

El psicoanálisis clásico de grupos

Uno de los trabajos más importantes de la obra freudiana y de la explicación psíquica de los grupos es Psicología de masas y análisis del Yo (Freud, 1981) donde se explica la vida libidinal de los grupos. El texto es un clásico porque es indispensable para el que pretenda explicarse el comportamiento relacional e integrativo de los grupo; la estructura del yo y cómo se establecen los vínculos psíquicos al interior del sujeto --entre el yo, el super yo, el objeto del yo--, así como la relación con el exterior. Freud analiza en esta obra la estructura grupal de dos formaciones sociales permanentes, ambas artificiales y convencionales: la iglesia y el ejército, que comparten características de intemporalidad e idealidad. Estas organizaciones tienen un elevado grado de cohesión porque están sujetas a una gran dosis de coacción: la parte básica de este ligamento se encuentra en la estructura libidinal, la organización y la ideología. Estos elementos, afirma Freud, definen a las masas artificiales.

El Psicoanálisis de grupos de Bion

Algunas vertientes del psicoanálisis dan luz respecto a otro tipo de organizaciones y grupos como es la escuela: espacio social en donde se consuman no sólo los anhelos líricos y optimistas de la pedagogía, sino donde también se protagoniza la historia no verbalizada de un tipo de aspiraciones: el Deseo (nivel hermenéutico de la energía libidinal).

En la teoría psicoanalítica se encuentra la evidencia teórica de la estructura libidinal de los vínculos educativos, en donde tanto el liderazgo del maestro como los afectos desarrollados entre los miembros del grupo movilizan hacia la organización grupal. Es decir, no hay eficiencia social si los lazos entre los miembros del grupo no están suficientemente libidinizados. La energética freudiana explica cómo toda organización presenta una amalgama de vínculos de tal fortaleza que es de difícil desintegración y cuando esto sucede se enfrenta el duelo y la melancolía --fin de cursos, graduaciones, reprobados y deserciones, cambios de maestros, etc.--, todo lo que implique el dolor de la pérdida del objeto donde se ha depositado la energía libidinal por identificaciones proyectivas.

La traslación de conceptos extraídos de Psicología de masas… y su aplicación al universo de la vida grupal en el ámbito escolar es un primer acercamiento a la explicación del fenómeno en cuestión, porque es necesario comprender en términos energéticos el proceso grupal. Sin embargo el germen creativo que fundó la visión clásica del freudismo da paso a otras concepciones no menos profundas y dramáticas. Tanto Melanie Klein como Jacques Lacan son considerados como los dos únicos discípulos que construyeron teorías psicoanalíticas originales y son baluarte del psicoanálisis posterior al freudismo ortodoxo.

A su vez el discípulo de Melanie Klein, Wilfred R. Bion realizó hallazgos de sumo interés en el análisis de la vida de los grupos. La materia prima con la que trabajó este teórico del psicoanálisis y que le permitió arribar a sus hallazgos fue el tratamiento de pacientes psicóticos. Después del término de la Segunda Guerrra Mundial trabajó con grupos de “lisiados espirituales” por el trauma de la gran violencia organizada. Tavistock Clínic fue la sede hospitalaria de Bion donde reformularía algunos de los elementos de la teoría freudiana respecto de los grupos. La tesis propuesta por Freud en Psicología de masas… fue retomada por Bion quien la reformuló a la luz de la teoría psicoanalítica kleiniana, trasladando el acento de la teoría libidinal a la de los supuestos básicos.

Un supuesto básico es una fantasía colectiva y unitaria subyacente, es decir el conjunto de virtualidades de asociación contenidas en todo grupo humano (cualquiera que este sea). Precisamente una de estas virtualidades es la valencia, que no es otra cosa que la facultad de los individuos de combinarse espontánea y voluntariamente para actuar bajo un supuesto básico que necesariamente se comparte.

Este autor afirma que el estado emocional de supuesto básico no es completamente grato, esto quiere decir que el comportamiento de un grupo humano instalado en este nivel tiene manifestaciones de tal carácter que se le puede definir como irracional, debido al malestar de esa cultura grupal que el "sujeto grupal" se apropia. Este tiene la característica de manifestarse con una apariencia racional, pero su trasfondo psíquico está sostenido en los objetos proto-históricos de los miembros del

...