Bebidas Energéticas

Bebidas energéticas

Las bebidas energéticas o energy drinks comenzaron a hacerse famosas en la década del noventa por los deportistas, estudiantes, empleados jóvenes, trabajadores nocturnos. Fue el mercado austriaco el que decidió comercializarla con la intención de que las personas que las ingieran puedan incrementar su resistencia física, logrando una concentración mayor, evitando el sueño, proporcionando sensación de bienestar, acelerando su metabolismo, ayudando a eliminar sustancias nocivas en el cuerpo. Todas estas propiedades las hicieron populares llamándolas y publicitándolas como bebidas regeneradas o energéticas. La mayoría de estas bebidas contienen carbohidratos, cafeína, hierbas o extractos de semilla, ginseng, piruvatos, proteínas y aminoácidos, creatinina, carnitina, vitaminas y minerales. Muchas de estas bebidas tienen efectos estimulantes, lo cual aumenta el rendimiento físico del que lo ingiere.

Hay países como Dinamarca, Noruega y Uruguay que han prohibido el uso de estas bebidas, especialmente las que contienen dentro de sus ingredientes glucoronolactona con propiedad desintoxicante. La inclusión de este producto en este tipo de bebidas lo relaciona con el peligro de sufrir infartos fulminantes o daños neuronales. No hay reportes científicos que lo prueben, solo recomendaciones del mal uso asociado con el alcohol o medicamentos antidepresivos, que puede desencadenar temblores y arritmias cardiacas.

Actualmente estos productos no solo tienden a producir dependencia física, sino también social, por cuando cada día aumentan las competencias de deportes extremos o de riesgo que generan exigencia física, mental y mucha adrenalina que implica mayor velocidad, altura y esfuerzo físico, y muy peligroso si se asocia con bebidas alcohólicas y, más grave aún, si no ingieren alimentos antes de la competencia del deporte extremo, lo que puede derivar en una baja de azúcar, acelerando el ritmo cardiaco y un riesgo a sufrir un posible infarto causado por la mezcla de una sustancia inhibidora y otra estimulante, ambas sobre el mismo cuerpo.

Un grupo de investigadores del Hospital Henry Ford en Detroit, Estados Unidos, ha revelado que las personas que sufren de tensión arterial alta o enfermedades del corazón deben evitar el consumo de bebidas energéticas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda denominar a estas bebidas como estimulantes, en lugar de energéticas. Hay reportes actuales internacionales como la de la familia de la joven Anais Fournier, quien denunció a una compañía productora de bebidas energéticas de provocarle la muerte, las dos latas que consumió la niña de 14 años en un solo día, según los forenses, incidieron en el paro cardiaco de la joven.

Hay formas caseras de bebida isotónica que se recomiendan cuando se participa en un deporte extremo, llevar en la cintura una botella de agua, que se anexe en el líquido una pizca de

...