CERVECERIA CUAHUTEMOC-MOCTEZUMA

CERVECERIA CUAHUTEMOC-MOCTEZUMA

Se visitó la cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma en la ciudad de Guadalajara, Jalisco.

En la entrada se nos indicó que no podíamos tomar fotos, la vestimenta no importaba mucho, la única restricción que había era no usar zapato abierto.

El recorrido comenzó con la historia del lugar, con su fundador, su ideal, sus primeras ideas, fue una explicación a través del tiempo hasta mostrar lo que es hoy en día la cervecería.

Se mostraron los productos de cada una de las cervecerías (Cuauhtémoc y Moctezuma), un dato curioso es que la cervecería Cuauhtémoc ayudo a la Moctezuma cuando estaban pasando por una crisis financiera, pero en lugar de absorberla, decidió aliarse con ella.

Al estar explicando, se hablaba también de los productos, el más viejo dotado de 1860 que era producto de carta blanca, también se explicó el porqué de los nombres de las cervezas.

Uno de los acontecimientos recientes de la cervecería fue la compra de acciones de la marca Heineken la cual, ya venden ellos como parte de sus productos.

Se nos explicó el procedimiento de la realización de la cerveza, llevándonos a cada área de producción, comenzando con la cebada y la levadura, la cebada se metía a grandes hornos para ser cocida, después se dejaba en reposo junto con la levadura según el porcentaje o grado de alcohol que se quisiera y después se transportaba a tanques de gobierno (llamados así, ya que antes el gobierno iba y checaba cada uno de los tanques, a pesar de que ya no ocurría esto, el nombre siguió por costumbre), seguimos recorriendo el lugar y a pesar de que no pudimos entrar a todas las áreas, observamos cada proceso como si estuviéramos dentro de él.

Llegando a el área de llenado de botellas, observamos cómo era tan rápida esta producción, una gran maquina almacenaba todo el líquido, una línea lavaba las botellas con agua caliente, otra checaba con un sensor que las botellas no estuvieran rotas o tuvieran algunas imperfecciones, de ser así las dejaban de lado para volver a hacerlas, fundiendo el vidrio de cada botella defectuosa, otra línea las llenaba, otra colocaba las tapas, otra empaquetaba, y así con cada una de las operaciones, no podíamos observar al 100% todo ya que el lugar era muy amplio y no se alcanzaba a ver bien.

Después de esto se dio un tiempo en el bar para resolver preguntas y dudas, así como para degustar algunos productos.

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