COMO SE HACE UN PROCESO

EL DRAMA:

Interés del público por los procesos ante todo penales. Paroxismo: curiosidad

Diversión, su placer. La vida de los demás está comprometida en el drama. Adoptar su héroe. El origen de la participación del público, se llama apasionamiento. Viven sus experiencias a través de las obras que presencian basadas en actos que tendrían algo de su vida personal. Esta el goce, el placer de los hombre que cada quien decide como lo vive.

Si el público no comprende las leyes no comprende nada, si las reglas no son justas, los resultados tampoco, cuando está en juego al mundo “la paz” tiene necesidad de justicia, como el hombre de oxígeno para respirar. Precisamente las reglas del juego no tienen otra razón de ser que garantizar la victoria a quien la haya merecido.

Si a ese drama, o más bien al drama en general, tratamos de ponerle un nombre, este el de la discordia. La concordia o la discordia son el germen de la paz o la guerra. El proceso domestica la guerra. El DERECHO nace para que muera la guerra. Se acude al juez para no tener que acudir a las armas. El vencer y el perder significan las suertes del proceso.

Discordia = duelo en el proceso, quien tiene la razón resulta vencedor.

Pesan más los hombres que tratan de solucionar los conflictos, que los pocos que crean la guerra, la discordia entre los hombre, entre ellos.

EL PROCESO PENAL:

Pena=Delito Libertad=dominio de si, tentaciones delito=castigo, restablecer el orden social. Cuenta o juega un papel importante en el tiempo.

Balance de la justicia, justicia rápida o justicia segura, para que sea segura debe haber investigación cuando las pruebas no están todas articuladas.

Castigar=juzgar, juicio, proceso. El juicio es la mayor dificultad que el hombre encuentra en su camino. Nuestra tragedia está en que no podemos actuar sin juzgar, pero no sabemos juzgar. Policía=instrumento. Se encara al imputado cuando hay serias probabilidades de culpabilidad.

PROCESO PENAL: Tiene dos fases Instrucción, Debate. No castigar inocentes, no exime del error judicial. Proceso=acto solemne por la importancia del proceder para un resultado y hallar al imputado.

Si hay absolución la justicia trabaja con perdida, si el acusado es inocente.

Condenar=ordenar el castigo, condenar no quiere decir, después de todo, más que ordenar el castigo; pero este, después de ordenado, debe ser ejecutado, y la ejecución, muy frecuentemente, dura años y años, y no pocas veces dura toda la vida del condenado. Con la condena definitiva cae efectivamente el telón en uno de los teatros de la justicia, pero se alza en otro: el primero se llama tribunal, el segundo penitenciaria. Y el proceso sigue procediendo, continúa su triste camino. La condena se asemeja a la diagnosis del médico: un hombre está enfermo y se le debe curar, dice este: un hombre es culpable y debe ser castigado. De acuerdo con los técnicos después del proceso de cognición, que sirve para conocer si un hombre es culpable o inocente. Entonces después de la condena viene el proceso de ejecución y cognición, son dos fases de un mismo proceso.

Cuando el sujeto sale de la cárcel, queda estigmatizado, sigue siendo juzgado por la sociedad, así ya haya pagado una condena, pocos creen en su reformación. Es difícil que sean aceptados por la sociedad sin discriminación.

EL PROCESO CIVIL:

En el proceso civil, no hay delito, es un proceso entre hombres hay acuerdo.

El bacilo de la discordia es el conflicto de intereses.

Se da el proceso porque no hay acuerdo, se presenta el conflicto de intereses, no hay guerra, pero está en potencia para evitarlos debe intervenir un tercero para evitarla, esa intervención recibe el nombre de Litis o litigio.

LITIS=DESACUERDO:

PRETENSIÓN OPOSICIÓN

La litigiosidad y delincuencia son dos índices correlativos de incivilidad. Cuando hay acuerdo o conciliaciones entre las personas o sujetos, se mantiene el nivel del orden social. El proceso civil opera para prevenir o reprender. Injusticia=Discordia.

PROCESO CONTENCIOSO, se desarrolla en presencia de un litigio y PROCESO VOLUNTARIO.

El proceso se inicia, solo por petición de una de las partes, no del magistrado en el civil, en el penal si se puede dar por iniciativa del magistrado, el ministerio público.

La justicia civil, también es lenta.

LAS PARTES: uno quiere que se proceda rápidamente el Acreedor, y el DEUDOR quiere que se retrase el proceso.

EL JUEZ:

El proceso se debe a la imparcialidad de alguien para juzgar. Sirve para que entren en juicio quienes no lo tienen. El Juez tiene juicio, El Juez es elegido por el Estado.

El proceso penal o proceso civil funciones del ESTADO les interesan al orden social.

Los jueces deben ser del mismo nivel de estudio. En competencias deben estar a nivel horizontal y por delito o cuantía a nivel vertical.

LAS PARTES:

Sobre el fondo del proceso las partes son, pues, siempre dos. Cuando se trata de delito se distinguen por una razón sustancial: uno es el que actúa, y otro es el que sufre la acción; uno es el ofensor y otro el ofendido. En cambio, cuando se trata de litigio, la distinción se funda en la iniciativa: una de las dos partes pretende y la otra resiste a la pretensión.

Ser juzgables (es decir, personas acerca de las cuales se debe emitir un juicio) y ser juzgados quiere decir tener que prestar obediencia al juicio del juez. El juicio del juez, tal cual se forma, con los modos que veremos, es el proceso, no es un juicio cualquiera; en particular, no tiene el simple valor de un consejo, de modo que aquel a quien se lo dirige pueda seguirlo o no, según le parezca bien o mal: es un juicio que tiene la fuerza de un mandato, cual si estuviese escrito en la ley. Por eso las partes deben someterse y obedecer al juicio del Juez.

Los juristas dicen a este propósito que el juicio del Juez tiene fuerza ejecutiva, y quieren decir con ello que, aunque las partes no se presten a ejecutarlo, alguien interviene para hacerlo ejecutar por la fuerza.

LAS PRUEBAS:

Se ha dicho que el Juez hace historia; no es todo lo que se debe decir de él, pero lo cierto es que el primero de sus cometidos es precisamente el de la historia, o mejor el de la historiografía, concebida a través de los término más estrictos y acaso no suficientes. El historiador escruta en el pasado para saber cómo ocurrieron las cosas. Los juicios que el pronuncia, son por tanto juicios de realidad, o más exactamente juicios de existencia; en otras palabra, juicios históricos.

Los

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