Comprensión Lectora en el Aprovechamiento Escolar del Alumno

INTRODUCCIÓN

Los procesos de transformación de una sociedad requieren de acciones y esfuerzos por parte de docentes que están encargados de formar a los estudiantes que son la generación del futuro. De tal manera, que un desempeño efectivo del mismo no depende sólo de sus cualidades como: vocación, manejo de grupo, conocimiento de los contenidos curriculares. Es necesario, además, que articule su práctica docente a una planeación fundamentada a partir del análisis y reflexión pedagógica.

Es así como la utilización de recursos literarios, por ser un tema importante, se busca que los estudiantes comprendan lo que el autor quiere manifestar, donde muchas veces utiliza palabras que pueden llevar a diferentes interpretaciones, pero es allí donde el docente debe hacer uso de sus habilidades para inducirlos hacia una consolidación de habilidades y destrezas necesarias a lo largo de su proceso educativo.

Además, es de suma importancia considerar que lo que se haga en las aulas contribuye al desarrollo del país. Por ello, es necesario trabajar a partir de las representaciones e ideas de los estudiantes y considerar los posibles obstáculos en el aprendizaje, los cuales permiten tomar las previsiones necesarias para hacer uso de diferentes actividades y estrategias de enseñanza que consideren los estilos de aprendizaje, teorías de enseñanza - de aprendizaje y contenidos que se ajusten a lo que ha diagnosticado previamente.

De allí, que el presente estudio tiene como objetivo implementar los recursos literarios como herramienta para reforzar la comprensión lectora en los estudiantes del 3er. Año Sección “A” del Liceo Dr. Arturo Uslar Pietri, del Municipio Páez, estado Portuguesa. Dentro de este orden de ideas, se puede indicar que su contenido está estructurado en cinco capítulos, que se describen a continuación:

Capítulo I: relacionado con el problema, objetivos y justificación.

Capítulo II: recoge todos aquellos argumentos importantes para resaltar estudios previos que sirven de referencia, al mismo tiempo se encuentran los elementos presente en cada uno de los constructos que caracterizan la acción investigativa, el soporte legal y la operacionalización de las variables.

En cuanto al Capítulo III: se hace evidente en su contenido los elementos metodológico tales como: tipo de investigación, población y muestra, técnicas, instrumento.

Capítulo IV: indica claramente los eventos presente en la organización del plan de acción como medio pedagógico encargado de llevar a la práctica el trabajo para la transformación de la realidad diagnosticada, donde se resaltan los criterios de ejecución y evaluación, objetivos del plan de acción.

Capítulo V: describe las actividades llevadas a cabo, con sus respectivos logros, estrategias, coincidencias y discrepancias, entre otros aspectos de consideración.

Finalmente, se resaltan las apreciaciones generales que las autoras consideraron pertinente para exponer las conclusiones y recomendaciones, así como las referencias citadas de manera alfabética y los respectivos anexos.

CAPÍTULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

La educación es concebida como la acción que conduce a la formación integral del ser humano, con ella se conjugan factores sociales, económicos y culturales. Asimismo, constituye la razón que impulsa al individuo a desarrollar su personalidad, adaptarse al medio donde se desenvuelve para lograr su incorporación como un ser eficiente, productivo y útil en el entorno donde se mueve.

Por ello, la acción educativa como tal se encuentra insertada en un concepto amplio de aplicación a los diversos sectores sociales y culturales de una nación; es decir, su actividad no establece diferencia entre los individuos, su objetivo abarca a todo su conglomerado, pues se caracteriza por ser una función eminentemente social, la cual pretende modificar o transformar las perspectivas generales de los niños, jóvenes y adultos en proceso de formación.

De allí, la importancia de las instituciones educativas de formar individuos para la vida, dado que no sólo trasmitir conocimientos resulta significativo en las personas, se requiere que el docente sea un guía que les permite orientarlos con el rol protagónico y generador de ideas, que busca en sus estudiantes un desempeño efectivo. Tal como lo expresa Valera y Paredes (2007), quienes señalan que:

La actividad docente puede concebirse como un encuentro en el que se reúnen los actores del proceso (el docente, como un sujeto del “supuesto saber” colocado no obstante en una dinámica de enseñanza-aprendizaje; y el alumno, situado en un intenso proceso de formación) para construir y compartir conocimientos, que devienen de la interacción o diálogo que desarrollan en función de temas específicos y motivaciones particulares. (p. 28).

Es así como la actividad educativa, debe ser formadora, enriquecedora y motivadora para así buscar en el grupo de estudiantes las herramientas necesarias para llevarlos hacia la adquisición de sus metas y objetivos pero de forma significativa, donde no sólo pasen un área académica, sino que aprendan de ella, con acciones que les resulten realmente valederas.

Sin embargo, para ello es necesaria la aplicación de actividades, estrategias, recursos u otros elementos que les faciliten una apropiada adquisición de habilidades y destrezas, puesto que ello les permitirá orientarlos de manera idónea. Es así como la comprensión lectora como un contenido que ha de ser considerado por los docentes en su práctica pedagógica y como una actividad importante que requiere ser reforzada a lo largo de su formación, dado que ello les permite adquirir competencias, conocimientos a lo largo de su aprendizaje.

Asimismo, se puede expresar que son variados los contenidos con los cuales se puede trabajar a la comprensión lectora para inducir en los educandos aprendizajes significativos, por la esencia que manejan en su manera de trasmitirlo, pero que a su vez les resulte cotidiana para ser empleado por ellos en cualquier situación.

Dentro de este particular, se resalta a los recursos literarios, los cuales son estudiados a lo largo de los años académicos a nivel de media y diversificada, son definidos por Barazarte (2009), como: “herramientas que el autor utiliza conscientemente para provocar emociones, sensaciones o ideas en el lector. Una parte importante del trabajo de análisis literario consiste en la identificación y estudio del uso de estos recursos en un texto” (p. 106). Es decir, que se emplean a fin de destacar ciertas particularidades en la escritura, las cuales

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