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Computacion


Enviado por   •  13 de Noviembre de 2014  •  1.085 Palabras (5 Páginas)  •  156 Visitas

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Se denomina así a la secuencia de acontecimientos que siguen a una dosis de radiación ionizante de una cuantía muy superior a la radiación de fondo, y que ha afectado a todo, o al menos, a una parte considerable del organismo. La dosis más baja a la que puede aparecer alguna manifestación aguda es la de 1 Gy (100 rem). Por supuesto, dosis inferiores pueden dar lugar a manifestaciones orgánicas, genéticas o neoplásicas tardías, pero no forman parte del cuadro del síndrome agudo.

Al tratarse de un efecto no estocástico, sino determinístico, el porcentaje de enfermos que presentan este síndrome, la precocidad de su aparición, y su gravedad, dependen casi exclusivamente de la dosis recibida, y en definitiva, del número de células afectadas.

No todas las personas desarrollan el síndrome completo, que aparece solamente con dosis elevadas de irradiación. Según las manifestaciones clínicas, se acostumbra a dividir el síndrome en varios cuadros, cuya aparición, a grosso modo, permite intuir la posible dosis de radiación recibida por el sujeto. Una consideración básica es que no todos los tejidos tienen la misma sensibilidad hacia las radiaciones ionizantes, siendo las células más sensibles, en general, aquellas que tienen un índice de recambio más elevado.

El síndrome comienza siempre por un cuadro prodrómico, caracterizado por la aparición de anorexia intensa, naúseas, vómitos, diarrea, apatía, postración, fiebre, sialorrea, dolores abdominales de tipo cólico e hiperexcitabilidad. Este cuadro puede aparecer desde pocos minutos a horas después de la irradiación, y se resuelve incluso espontaneamente en uno o dos días, tras los cuales puede no haber más problemas, o comenzar los otros cuadros, siempre en dependencia de la dosis recibida. Los vómitos, naúseas y anorexia, parecen ser de origen central, mientras el resto de los síntomas se debería a los efectos de los detritus celulares y a la liberación de histamina, bradikinina y otras aminas vasoactivas procedentes de la destrucción celular. Por debajo de 50 rem (0.5 Gy) es rara su aparición, y es raro que falten los pródromos con irradiaciones de más de 4 Gy. El umbral para aparición de mortalidad es de 1.5 Gy.

Por encima de 2 Gy, y hasta los 10 Gy, el síndrome está dominado manifiestamente por un cuadro de afectación de los órganos hematopoyéticos. Los linfocitos circulantes sufren picnosis nuclear y apoptosis, y desaparecen, proveyendo un valioso indicador de la dosis recibida. Los linfocitos comienzan su descenso entre las doce horas y los dos días subsiguientes a la exposición. La velocidad y magnitud de este descenso está relacionada de forma lineal con la dosis de radiación hasta los 5-6 Gy. Más allá de estas dosis, la linfopenia es tan completa que no es posible establecer una relación. Los leucocitos polimorfonucleares descienden de forma más lenta, alcanzando su punto más bajo aproximadamente tres semanas después de la irradiación. Las plaquetas descienden más lentamente, y su recuperación, si ello es posible, puede tardar 6 a 8 semanas o más. Clinicamente, el cuadro hematopoyético se manifiesta como una pancitopenia, con úlceras bucales y faríngeas, petequias, púrpuras o hemorragias francas, infecciones localizadas o sistémicas bacterianas, virales o fúngicas, que se acompañan de malestar, cefalea, disnea, escalofríos, y por supuesto, fiebre. El cuadro hematopoyético suele aparecer tras

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