Conflicto Social En El Peru

El Conflicto Social en el Perú

César Fano Vallejos

El Perú a lo largo de su historia republicana ha pasado por más un millar de conflictos tanto políticos, militares y sociales; muchos de estos conflictos los cuales no llegaron a ser reportados por ciertos intereses en juego y/o por la falta de cobertura de la información por encontrarse o desarrollarse en zonas alejadas. Hoy en día, por la cercanía de la información y la difusión masiva en las redes sociales se conoce en qué lugar del país y del mundo se desarrolla un conflicto ya sea político, militar o social. Según la Defensoría del Pueblo (2014) en su último reporte de conflictos sociales en el mes de octubre se contó con 171 conflictos activos y 46 conflictos latentes, siendo los departamentos con mayor cantidad de conflictos sociales: Ancash (24 casos), Apurímac (22 casos) y Puno (19 casos) ; asimismo se registraron 253 acciones colectivas de protesta.

Se pueden enumerar los diferentes tipos de conflictos que han sucedido durante el año y resaltar lo más importantes, pero en definitiva solo las estadísticas no bastan para solucionar dichos conflictos. Estos sin duda ya son una constante en el día a día y muy poco se viene realizando para elaborar estrategias para anticipar dichos conflictos. El mismo manejo político regional y sus propios gobernantes no se encuentran capacitados para este tipo de situaciones y la poca gestión que viene desde gobierno central es insuficiente para cubrir a todo el país. A ello se suma el populismo de nuestras autoridades que aumentan estos tipos de conflictos movidos por sus propios intereses como lo suscitado por nuestro actual presidente Ollanta Humala y el reelecto presidente Regional de Cajamarca Gregorio Santos en el muy propalado caso Conga.

La Defensoria del Pueblo (2014) define al conflicto social como un proceso complejo en el cual sectores de la sociedad, el estado y las empresas perciben que sus objetivos, intereses, valores o necesidades son contradictorias y es esa contradicción que puede derivar en violencia; y para que esto se origine necesita de tres actores principales: actores primarios los que participan directamente en el conflicto, actores secundarios los que pueden ser grupos que apoyan a algunas de las partes y actores terciarios que pueden tener incidencia en el curso del conflicto. Estos conflictosy pasan por 5 etapas o momentos diferenciados:

• Fase temprana: momento en que los actores hacen pública la incompatibilidad de intereses o necesidades existentes.

• Fase de escalamiento: momento en que la tensión entre las partes aumentan.

• Fase de crisis: momento en que se manifiestan los reclamos a través de acciones de violencia.

• Fase de desescalamiento: momento en que disminuye los reclamos con acciones de violencia y la tensión entre las partes.

• Fase de dialogo: momento en que se desarrolla un proceso de dialogo intercambiando información, generando opciones y acuerdos.

La minería ha atraído un sinfín de conflictos sociales movidos por una falta constante de liderazgo por parte de las empresas mineras, por falsas organizaciones en pro de derechos humanos que mueven sus propios interés y por una población insatisfecha con el gobierno local y central que no ven otra manera de sacar provecho y una vez más, movidos por sus propios intereses personales y sobre todo económicos. Y es así, que la mayoría de los conflictos giran alrededor de la minería (socioambiental), por un temor ante una posible contaminación de suelos y ríos, por acuerdos no realizados, por incumplimiento de compromisos de responsabilidad social, maltrato a los pobladores entre otros. Lo cierto que es difícil ya realizar una actividad minera, ya se exploratoria o de desarrollo de proyecto sin tener un acuerdo previo entre las comunidades u la empresa que la desarrolla, aparte de los permisos legales que ello implique.

De Echave et al. (2009) formuló una hipótesis acerca de los conflictos mineros que no pueden ser resueltos sino tan solo transformados. Esta hipótesis que no está lejos de la realidad se basó en un estudio comparativo de conflictos mineros de gran envergadura ocurridos en la década pasada como el proyecto de Tambogrande, Las Bambas, Tintaya entre otros. En la actualidad los conflictos mineros siguen estando latentes y como lo sustentado por De Echave, estos conflictos mineros se han transformado, camuflado en obras sociales, obras por impuestos, filantropía, sin solucionar ni eliminar la causa raíz de

...