Contabilidad
Enviado por Freyja111 • 15 de Noviembre de 2012 • 867 Palabras (4 Páginas) • 277 Visitas
Decidir no es fácil: por definición la toma de una decisión implica a su vez una renuncia y siempre conlleva la posibilidad del error. Ese riesgo puede conducirnos a la trampa de la indecisión. Trampa porque, paradójicamente, no se puede no tomar decisiones. El hecho de hacerlo es en sí una decisión con la que entregamos el control de nuestro futuro a los demás y/o a las circunstancias de nuestro entorno.
Como sucede con cualquier otra actividad, a decidir también se aprende. El proceso de toma de decisiones (tanto en el ámbito profesional como en el estrictamente personal) puede venir facilitado cuando se interioriza una serie de principios básicos que resumo a continuación:
Principio 1. Preocúpate por decidir bien más que por acertar
Decidir bien no es lo mismo que acertar. Uno puede errar habiendo tomado la decisión correcta y recíprocamente acertar habiendo adoptado una decisión errónea.
Decisión
Correcta Incorrecta
Resultado Buen resultado OK Suerte
Mal resultado Mala suerte Posibilidad de aprendizaje
Principio 2. Identifica tus objetivos
No seas Alicia:
El Gato se limitó a sonreír al ver a Alicia. Parece bueno, pensó Alicia; sin embargo, tiene uñas muy largas, y muchísimos dientes, así que comprendió que debía tratarlo con respeto.
– Gatito, gatito, dijo, un poco tímidamente, ya que no sabía si le gustaba que le llamasen así; pero al Gato se le ensanchó la sonrisa. Ante esto, Alicia pensó:”Vaya, de momento parece complacido”, y prosiguió: — ¿te importaría decirme, por favor, qué camino debo tomar desde aquí?
– Eso depende en gran medida de adónde quieres ir, -dijo el Gato.
– ¡No me importa mucho adónde…! –dijo Alicia.
– Entonces, da igual la dirección — dijo el Gato. Añadiendo: ¡Cualquiera que tomes está bien…!
Conocer nuestra meta nos permite actuar en función de nuestros objetivos en lugar de reaccionar ante lo que acontece a nuestro alrededor; nuestro objetivo determinará en gran medida cómo actuaremos. En definitiva, si no sabemos dónde vamos, a diferencia de Alicia, difícilmente llegaremos.
Principio 3. Plantea tus problemas de forma realista
Asúmelo, no eres Superman. Ni siquiera Superlópez. Plantéate objetivos y planes de acción objetivamente realistas.
Principio 4. No te autoengañes, es muy fácil hacerlo
No te ciegues por una idea o alternativa preconcebida; evita buscar argumentos que la avalen sin considerar otros que la cuestionen. No te resistas a aceptar el error si éste llega (mejorará, las cosas cambiarán). Es fácil caer si estamos rodeados de gente que comparte nuestros planteamientos sin cuestionarlos.
Principio 5. Atiende sólo a la información relevante
Entendiendo por información relevante aquella
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