Delito lesiones menos graves, amenazas y daños

Procedimiento:             Acción Penal Pública. 

Materia:                     Delito lesiones menos graves, amenazas y

                     daños.        

Código:                

Querellante:             JORGE OLGUIN MAZUA.

Rut:                                6.760162-9

Abogado Patrocinante:        Walter Enrique Droguett Pino.

Rut:                             10.630.781-4        

Apoderado:                     Walter Enrique Droguett Pino.

Rut:                             10.630.781-4

Correo electrónico:   walter.droguett@vtr.net

Querellado:                PABLO ALEJANDRO REYES PADILLA.

Rut:                  9.050.532-7

EN LO PRINCIPAL: Querella criminal por crimen o simple delito de acción pública, lesiones menos graves, amenazas y daños.

PRIMER OTROSI: Solicita diligencias por el ministerio público.

SEGUNDO OTROSI: Patrocinio y poder.

                       S.J. DE GARANTÍA

JORGE OLGUIN MAZUA, empleado, domiciliado para estos efectos en calle Cáceres Nº 540 Rancagua, a SSA., Juez de Garantía, respetuosamente digo:

Que deduzco querella criminal por crimen o simple delito de acción pública, de lesiones menos graves, amenazas, y daños, en contra de Pablo Alejandro Reyes Padilla, empleado, domiciliado en Germán Riesco 059, Rancagua, a fin de que se determine su responsabilidad en los hechos que narraré, se formalice y lleve luego a juicio oral, aplicándose la máxima pena que la ley asigna a los delitos, atendidas las circunstancias del hecho y del agente, todo con expresa condenación en costas, conforme a los argumentos de hecho y derecho que de la siguiente forma expongo:

Con fecha 10 de mayo del presente, y a propósito de asamblea general extraordinaria de socios, desarrollada en la organización sindical del Sindicato Unificado Sewell y Mina, de esta ciudad, en la que se entregó el resultado de una auditoria solicitada realizar por la asamblea plena, en relación a la administración financiera y administrativa contable de los directores responsables de los periodos comprendidos entre los años 2009, 2010 y 2011, fui mandatado por los socios -oídos y desarrollados los resultados del informe del auditor y de la comisión de auditoria- para que iniciara un proceso de censura tocante a dichos directores, entre los que se encuentra el querellado.

Lo anterior, al resultar ser el único director sindical que no fue objeto de cuestionamientos, y el único resultante sin responsabilidad inmediata o directa de los resultados de la referida auditoria.

Concluida la asamblea, inmediatamente recibí de parte del querellado amenazas, quien manifestó, delante de otros socios de la organización, que me cuidara, ello con groserías, y que donde me viera me pegaría por ser desleal y otras consideraciones lejanas de la realidad.

El día lunes 14 del presente, alrededor de las 20:00 hrs, habiendo concluido mis labores como director sindical en las dependencias de nuestra organización, precisamente en el estacionamiento dispuesto para estos fines, y cuando me disponía a abordar mi vehículo, fui abruptamente abordado por un grupo de dirigentes sindicales de los que se encuentran cuestionados por los socios, incluido el querellado, quien inmediatamente se acercó a mi persona insultándome en forma muy grosera.

Yo inste por el dialogo cortes, y al requerir este trato, y sin ninguna razón justificativa, me lanzo un salivazo en mi rostro, señalándome que yo era un maricón y otras palabras soeces.

 Intente llevar mi mano a mi cara, instante en el cual me dio un certero golpe en el rostro, a la altura de mis ojos, con un objeto contundente. No advertí si seria un anillo pero era algo metálico.

Con el golpe, además de dar en mi ojo, primero destrozó mi lente óptico, recetado por oftalmólogo, destrozándose el vidrio de este.

En ese instante me amenazó de muerte, y junto con ello la de mi familia si no me retractaba de lo que “estaba haciendo”

Algunos socios que se encontraban en el lugar intervinieron, separándolo de mi e instándolo a retirarse, lo que ocurrió.

Luego de ese triste y doloroso instante, recogí mis cosas que quedaron esparcidas en el suelo, incluso el marco del lente destruido.

Luego concurrí a Carabineros de la Primera Comisaría de Rancagua, quienes me derivaron en forma inmediata a la Clínica Integral de Rancagua a constatar lesiones, las que arrojaron las señaladas, erosión en el ojo, contusión,  y corte en la parte superior de la ceja izquierda.

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